OAKLAND, California - El ala-pívot de los Golden State Warriors, Draymond Green, dejó entrever que podría regresar a la alineación titular este lunes por la noche contra los Atlanta Hawks.
"Creo que todo va a estar basado en cómo me siento antes del partido", dijo Green después de la sesión del lunes, "pero estoy bastante seguro de que estaré jugando".
Green sufrió una contusión en el tobillo izquierdo en la victoria del viernes por 109-85 frente a Los Angeles Lakers, y estuvo fuera el sábado en una victoria de 115-102 en casa sobre los Minnesota Timberwolves.
El incidente ocurrió en el tercer cuarto cuando Green pisó a su compañero de equipo Ian Clark en la garganta y se torció el tobillo izquierdo. Cuando Green cayó, sin querer golpeó a Clark en la cabeza con su rodilla derecha. Ambos jugadores dejaron el juego y no regresaron. Clark tampoco jugó el sábado también.
"Se siente bien," dijo Green sobre su tobillo. "Todavía está un poco sensible, pero probablemente va a estarlo hasta lo... que sea".
Normalmente, es una batalla conseguir que Green deje de jugar. Quería jugar el sábado, pero la organización le convenció de que era lo mejor tomar la noche. Debido a que es temprano en la temporada, Green decidió no luchar contra la decisión.
"Forzar eso en el juego 15 es un poco fuera de lugar", dijo. "No es fácil, es aburrido estar sentado, no es divertido, prefiero no hacerlo".
Green dice que esto no es una lesión que le preocupa demasiado y lo describió como una situación accidental.
"¿Cuántas veces vas a caer en el cuello de alguien? Quizás el pie, apuntó Green. "Caer sobre el pie de alguien pasa todo el tiempo, pero caer en el cuello de alguien, fue algo raro".