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Los Cavaliers dejan ir el triunfo ante Warriors al final

AP

CLEVELAND – Es muy probable que los Cleveland Cavaliers no vuelvan a ver una victoria en estas Finales NBA contra los Golden State Warriors tan cerca como la que echaron a perder este miércoles por la noche en su propio hogar.

Los Cavaliers estuvieron a poco más de 26 segundos de ganar el Juego 3 contra los Warriors hasta que llegó de nueva cuenta Kevin Durant para aniquilarlos con un disparo de tres puntos y coronar un último periodo en el que mostró dónde se separan los súper estrellas de los jugadores NBA promedio.

Durant coronó así su noche de 31 puntos, incluidos 14 en el último cuarto, para que los Warriors se llevaran su tercer juego consecutivo en Finales 118-113, alarguen su récord a 15-0 y se acerquen a un paso de la marcha perfecta en postemporada para un campeonato.

“Es obvio que K.D. hizo algunas grandes jugadas al final, igual que Klay Thompson a la defensa en los últimos minutos fue increíble", consideró el entrenador de los Warriors, Steve Kerr. “En general fue un increíble desempeño sin rendirse en el que tal vez no fue nuestro partido más inteligente".

“Pero quizá si fue el mejor del año en términos de nuestra habilidad para seguir ahí cuando en realidad parecía que nada iba a nuestro favor", agregó.

Los Cavaliers pelearon como no habían hecho durante los primeros dos juegos.

LeBron James otra vez se echó a su equipo hombros y tuvo otra noche individual para las generaciones, que incluyó 29 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias; esta vez Kyrie Irving (38, 6 y 3) parecía que explotaba a la ofensiva con increíbles coladas y disparos de dos puntos de fantasía.

Kevin Love respondió también por tercera ocasión en la serie, sobre todo del lado de la defensiva y los tableros. Pero el resto de sus compañeros otra vez pasó como si ni siquiera hubieran llegado al Quicken Loan Arena. Y peor aún, de ambos lados de la duela.

Si acaso, JR Smith, quien por tercera ocasión abrió entre los titulares, tuvo su mejor encuentro con 16 puntos.

Sin embargo, decisiones equivocadas en los tres minutos finales cobraron factura.

“Soy humano, igual que mis compañeros", dijo Irving. “Y dejarlo todo en la línea de esa manera… quieres salir del lado ganador, pero fallamos".

“Dimos un gran esfuerzo y el resultado no salió como esperábamos", agregó Irving.

Parecía que el equipo que estaba abajo era Cleveland; forzando disparos de tres puntos que jamás salieron, como sucedió con Kyrie Irving; perdiendo balones y rebotes que parecían seguros, como el caso de Kyle Korver, quien fue una de las bujías de su equipo la mayor parte del tiempo, salvo en los minutos más trascendentes.

Otra vez quedó demostrado que a los mejores tiradores del planeta nunca se les puede dejar una sola ventana de oportunidad o sellan partidos como ningunos otros.

Y no sólo Durant. Klay Thompson confirmó su despertar ofensivo con 30 puntos, de los 18 llegaron en triples, para un conjunto que tuvo otra noche de larga distancia: 16 encestes de tres puntos de los Warriors.

Thompson además defendió como pocos de nueva cuenta y aunque se metió en problemas de faltas y jugó más de seis minutos del último periodo con cinco personales, tuvo la inteligencia para terminar el partido sobre la duela y cooperando.

“Sólo traté de jugar con gran agresividad y me sentí en ritmo y balance", dijo Thompson. “Pero nos falló ese equilibrio durante buena parte del partido. Tuvimos 18 entregas de balón. Eso probablemente cerró más el juego de lo que necesitábamos".

“Tenemos que hacer algunos ajustes para el viernes", consideró Thompson. “Quizá sólo 10, 9 entregas de balón para ponernos en mejor posición".

Stephen Curry puso su dosis acostumbrada con 26 unidades y estalló con 13 rebotes, además de seis de las 29 asistencias totales de Golden State.

“Todos ellos están jugando a un alto nivel", reconoció el entrenador de los Cavaliers, Tyronn Lue. “Pero yo creo que dejamos ir un partido que podíamos ganar. Ellos hicieron las jugadas al final, así que debemos darles crédito".

Es evidente que el talento es insuficiente para el aún campeón reinante de la NBA, que respira ya de manera artificial, en especial si se considera que nunca algún equipo se ha levantado de un 0-3 en cualquier fase de la postemporada.

Peor aún para sus desanimados aficionados, cuando es evidente que el talento es insuficiente para estos Warriors que están a un triunfo de completar la misión para la que contrataron a Durant.

“Como he dicho antes, somos un mejor equipo porque obviamente tenemos a Kevin Durant", mencionó Kerr. “Pero también por nuestras experiencias. Tu ganas un campeonato, pero luego pierdes otro en moda rompecorazones. Hemos visto casi todo en este punto”.

“Estás abajo en el cuarto periodo", añadió. “Es un juego de cinco puntos con seis minutos en el reloj. Es cuando dices ‘tenemos mucho tiempo libre, ejecutemos’. Y creo que nuestros muchachos lo hicieron a la perfección”.

El cuarto y quizá definitivo partido de la serie se disputará en la misma arena este viernes por la noche.