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Ohm Youngmisuk | ESPN.com 6y

Los Lakers esperan que Jason Kidd sea el modelo a seguir para Lonzo Ball

EL SEGUNDO, California - Mucho antes que su joven recién seleccionado en el puesto 2 del draft 2017 estuviera cerca de hacer historia, a punto de convertirse en el jugador más joven en la historia de la NBA en conseguir un triple-doble, la organización de Los Ángeles Lakers comenzó su educación de Lonzo Ball hurgando en los archivos.

El entrenador Luke Walton, su asistente Jesse Mermuys y el staff de video de los Lakers revisaron horas de cintas en definición estándar, estudiando a tres de los armadores más grandes que han jugado al baloncesto.

Walton examinó a profundidad videos de John Stockton mientras desarrollaba su conexión con Karl Malone en Utah, que los llevaría al Salón de la Fama. También revisó a Steve Nash dominando el pick-and-roll al lado de Amare Stoudemire y, lo más importante, a Jason Kidd desatando un quiebre rápido transformador en Nueva Jersey.

"Intentamos conseguir la mejor forma de construir con el personal que tenemos", indicó Walton. "Investigamos equipos de antaño para así intentar conseguir lo que sentíamos era lo mejor para nuestro grupo".

Ball, quien enfrentará la prueba más fuerte de su carrera profesional hasta hoy cuando John Wall y los Wizards les visiten en la noche del miércoles (ESPN en EE. UU, 10:30 ET) tiene un largo camino aún por recorrer, tras los pasos de esos legendarios armadores. Por ahora, los Lakers quieren hacer todo lo posible a fin de utilizar sus fortalezas como jugador con mentalidad de "pasar primero" y su velocidad en crear jugadas veloces empujando el balón.

No es coincidencia que examinaron a Kidd, con quien Ball tiene muchas similitudes. Ambos nacieron en California, jugaron baloncesto universitario en ese estado (Kidd en la Universidad de California y Ball en la UCLA), antes de ser seleccionados en el segundo puesto de sus drafts respectivos. Kidd comenzó su carrera en la NBA con Dallas en 1994. No obstante, los Lakers específicamente investigaron su llegada a Nueva Jersey en 2001, y cómo fue capaz de cambiar los destinos de la franquicia de los Nets, transformándola de ser el hazmerreír permanente de la Liga a campeones de la Conferencia del Este en dos campañas consecutivas.

Hay muchos apuntes que estos jóvenes Lakers en reconstrucción pueden tomar de su análisis de esos Nets. Ambas franquicias ganaron 26 partidos en la temporada previa a la llegada de sus armadores con mentalidad de "pasar primero". Aquellos Nets fueron entrenados por un ex miembro de los Lakers. Byron Scott, quien tenía en aquel entonces 40 años de edad, estaba en su segunda temporada al mando y constantemente quería que los Nets corrieran y defendieran de la misma forma que lo hacían sus viejos equipos de la era "Showtime" en California.

Walton, quien jugó 8 temporadas y media con los Lakers, ahora tiene 37 años y está en su segundo año como coach en Los Ángeles. Es el mejor amigo de su ex compañero en Arizona Richard Jefferson, quien era novato dentro de ese equipo de los Nets, cuando Kidd llegó proveniente de Phoenix en un canje por Stephon Marbury.

Jefferson compartió con Walton y Mermuys las sutilezas de la filosofía del "compromiso a correr" en cada jugada y la forma en la cual Kidd desarrolló una química instantánea con un joven núcleo conformado por Kenyon Martin, Kerry Kittles y Keith Van Horn, aún sin experiencia.

"La gente veía SportsCenter y sus jugadas, sin comprender que eso fue el resultado de siete años de prácticas diarias", afirmó Jefferson con respecto a Kidd. "Hacía cuatro o cinco pases que uno nunca había visto jamás. Era algo absurdo".

Al inicio de ese campo de entrenamiento, los Lakers tenían reacciones similares a la de los Nets cuando Kidd practicó por primera vez junto a ellos. Los jugadores se maravillaban con la capacidad de pase y la visión de Kidd y cómo éste les facilitaba el juego a ellos. También comentaban a menudo su deseo de convertirse en el equipo más veloz de la liga y querer pisar el acelerador todo el tiempo. Los Nets decían exactamente lo mismo durante su primer campamento.

Sin embargo, enseñarle a estos jóvenes Lakers como correr no ha sido nada sencillo. Cuando Ball se desgarró el tobillo y quedó limitado a actuar en solamente dos encuentros de pretemporada y pocas prácticas en el campamento, Walton se vio forzado a darle énfasis en su proceso de enseñanza al juego de transiciones.

"Es mucho más difícil ejecutar, comparado a estar diciendo que queremos correr a todo momento y que deseamos ser el equipo más veloz", dice Walton. "Insistimos en este mensaje a nuestros jugadores y ahora debemos retractarnos un poco, por lo cual (estamos) ejecutando algo de la labor necesaria a fin de convertirse en un buen equipo a la hora de correr".

"Esa sigue siendo la forma en la cual vamos a jugar", indica Walton con respecto al correr. "Sólo que hemos desacelerado el proceso un poquito".

Los Lakers cuentan con talentos jóvenes, atléticos y con poca experiencia a fin de correr junto a Ball. Tienen al segundo seleccionado del draft 2016 Brandon Ingram, en quien radican las esperanzas del presidente del equipo Magic Johnson a fin de correr con Ball de la misma forma en la cual James Worthy servía como ala al lado de Johnson y los Lakers durante la era "Showtime".

Walton considera que cuenta con el dueto más veloz de jugadores puesto 4 con Julius Randle, quien tiene un juego ofensivo muy elaborado, y Larry Nance Jr., quien gusta de jugar sobre el aro y lanzar alley-oops, enorgulleciéndose de su defensiva y juego agresivo. Kentavious Caldwell-Pop es un jugador versátil largo y capaz al igual que Kittles, aunque no tiene una destreza similar para lanzar en el perímetro a la del ex jugador de los Nets.

Al igual que Jefferson en 2001, Kyle Juzma es un alero novato y enérgico, proveniente de la primera ronda del draft, y que ha forjado un nexo instantáneo con su armador, quien juega con esmero y gusta de correr por la cancha. Y los Lakers cuentan con un sexto hombre capaz en Jordan Clarkson, quien puede dar capacidad de encestar a larga distancia y sabe cómo servir de bujía al levantarse de la banca.

No obstante, es Ball quien tiene la responsabilidad de hacer que este conjunto cree con la misma armonía que mostraron los Nets con sus quiebres rápidos dignos del ballet. Tiene apenas 19 años (cumplirá 20 el viernes) y apenas comienza su carrera en la NBA, mientras que Kidd estaba en su apogeo físico y bien avanzado en su camino a convertirse en uno de los líderes más respetados en la NBA en memoria reciente. Igualmente, Kidd tiene una mentalidad de baloncesto sumamente respetada. En la actualidad, está en su quinta campaña como entrenador en la NBA. Sus Bucks recibirán a los Lakers en Milwaukee el 11 de noviembre.

Mermuys quería estudiar la forma en la cual los equipos intentaban defenderse contra Kidd, quien promedió 14.7 puntos, 9.9 asistencias, 7.3 rebotes y mostraba porcentaje de 39.1 desde la cancha en su primera temporada con los Nets. Kidd no había desarrollado la habilidad desde el perímetro que eventualmente lo pondría entre los 10 mejores encestadores de triples en la historia de la NBA, y con todo y eso era capaz de controlar el partido.

"No creo que haya habido en la historia del baloncesto (antes de Kidd) un hombre capaz de dominar tantos encuentros sin anotar", dice Jefferson.

Previo al compromiso del miércoles, Ball promedia 13.3 puntos, 9.3 rebotes y 8.7 asistencias, con 34.8 por ciento de encestes desde la cancha. Mermuys desea que Ball y los Lakers estén preparados (y consigan formas de hacer un impacto en el cotejo) cuando los oponentes apabullen al novato a fin de bloquearle y evitar que éste reciba pases.

"Estamos cargando con esa presión a Lonzo", afirma Mermuys con respecto a las comparaciones entre éste y Kidd, "pero estamos tratando de maximizar sus atributos al lanzar y ayudarle que esto le sea lo más fácil posible. Obviamente, J-Kidd es un jugador increíble. Cada vez que nos enfrentábamos a él, incluso en las últimas etapas de su carrera, siempre me asombré por su capacidad de analizar y percibir las situaciones de juego antes que éstas pudieran ocurrir. Tengo esa misma sensación con Lonzo, quien hace ver que el juego es muy lento para él, siendo tan joven".

"La capacidad que tiene (Ball) de hacer imágenes (mentales) y ver cómo se pueden desarrollar jugadas antes que ocurran, es algo que no se puede enseñar. Tiene una percepción increíble del juego y es un talento increíble con el cual cuentan muy pocos jugadores".

Los Lakers no aspiran que su cotizado armador iguale lo hecho por Kidd, cuando éste condujo a los Nets a obtener 52 victorias y una aparición en las finales de la NBA durante su primera temporada en Nueva Jersey (su octava en total).

"No estamos intentando ser los Nets de la actualidad", advirtió Walton.

Sin embargo, los Lakers sí desean constatar si pueden correr como lo hicieron los Nets en esa época, con un armador generoso quien, en su actuación digna del Más Valioso en la Liga de Verano de Las Vegas, hizo que muchos ejecutivos, entrenadores y evaluadores de la NBA evocaran a Kidd.

Walton le dará a Ball suficiente libertad para tomar conclusiones y experimentar cada situación posible, sin importar las dificultades que experimente el novato en su proceso de crecimiento. Los Lakers se conformarán con tener pérdidas de balón ocasionadas al tratar de correr todo el tiempo y con ver a Ball tratar de imponerse a defensivas a nivel profesional por primera vez en su vida.

Cuando no puedan correr, Ball y los Lakers jugarán con su ofensiva base que intentará moverse mientras lee al contrario. En el mejor escenario posible, Walton se imagina que los Lakers correrán como los Nets y moverán el balón en forma similar a los Warriors. Aunque el roster de los Lakers no cuenta con la artillería de Golden State en el perímetro, Walton desea que todos en la cancha se conviertan en amenazas capaces de atacar al aro. Sin embargo, advierte que su equipo aún se encuentra lejos de conseguir esto.

"Estamos viendo lo que tenemos como equipo, cuáles son nuestras mayores fortalezas y deficiencias, e intentamos entender y sentir lo que nos puede dar la oportunidad de ganar partidos", dice Walton.

He ahí la razón por la cual Walton y Mermuys repasaron la historia en busca de los mejores pasadores que han jugado al baloncesto, a fin de ayudar potencialmente a Ball a crear su propia historia.

"Steve Kerr siempre solía decir: 'Lo simple conducirá a lo espectacular', como si uno, dos, tres o cuatro pases son simples, pero la posesión termina siendo algo espectacular", dice Walton, ex asistente en Golden State, con respecto al entrenador de los Warriors. "Y esa es la forma cómo Lonzo y algunos armadores gustan de (esa jugada). No hay muchos bases que jueguen de la misma forma, pero los armadores del pasado que lo asumieron de esa forma fueron espectaculares al jugar su posición".

"Obviamente, cuando Jason llegó (a Nueva Jersey), ya era sumamente bueno, entendía bien a la NBA y era uno de los mejores líderes de nuestro deporte. Creemos que ese será el camino que (eventualmente) Lonzo también tomará".

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