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Kevin Durant quedó descartado para jugar este sábado por la noche con los Golden State Warriors contra los New Orleans Pelicans debido a un esguince en su tobillo izquierdo, según lo que anunció el equipo. Este será el segundo partido consecutivo que Durant verá vestido de traje, su tercero en las últimas cuatro ocasiones. El alero de los Warriors anotó 21 puntos en 33 minutos el miércoles pasado contra el Oklahoma City Thunder tras no jugar el domingo en Brooklyn, pero se resintió de la lesión y Kerr admitió que fue un error el haber apurado su regreso. “Yo pensaba que él estaba bien. Nosotros pensábamos que él estaba bien, pero luego él se sintió adolorido [el miércoles]””, Kerr dijo después de que Durant no participó en la victoria por 143-94 sobre los Chicago Bulls el viernes. “Estoy seguro de que la liga está contenta con nosotros por haberlo puesto en su juego ‘destacado’ con [Russell Westbrook] y todo eso, pero él estaba adolorido al otro día, así que no debimos haberlo puesto a jugar”. Kerr agregó que él no creía que la lesión sea seria, pero que optaría por ser precavido para que su alero estelar esté al 100 por ciento.
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