Han pasado casi seis semanas desde que Lonzo Ball participó en un encuentro de baloncesto.
Mientras ha estado incapacitado por una lesión en su ligamento colateral tibial izquierdo, el seleccionado número 2 en el draft 2017 pudo ver a Julius Randle jugar su baloncesto más consistente, a Brandon Ingram brillar en siete compromisos en la posición de base, a un Kyle Kuzma que ha hecho explosión de manera ocasional, a Josh Hart sumando dobles-dobles como titular y a un joven núcleo dentro de Los Ángeles Lakers creciendo y disfrutando su vida juntos.
"Los chicos han aprendido a jugar sin mí", dijo Ball recientemente. "...Saben qué cosas funcionan bien: ritmo y defensiva".
Mientras los Lakers descubrían su estilo, Jordan Clarkson y Larry Nance Jr. fueron canjeados a Cleveland en un movimiento que liberó espacio dentro del tope salarial, trayendo a Isaiah Thomas, Channing Frye y un puesto de selección protegido en primera ronda del draft. Si bien esta negociación fue un triunfo importante para Magic Johnson y Rob Pelinka, quienes le dejaron disponible a los Lakers hasta $70 millones a fin de invertir en dos agentes libres de élite durante este verano o el próximo; para los Lakers, representó un golpe para su química en pleno surgimiento, al igual que para su nivel de juego.
Muchos de los jóvenes miembros de los Lakers nunca habían estado en medio de un pacto en plena fecha límite de cambios que les haya representado no sólo la pérdida de dos de los componentes claves del ligero éxito que han experimentado durante la presente temporada, sino de dos personalidades de sumo agrado dentro del vestuario.
Este movimiento representa que Ball debe regresar a un equipo de los Lakers que ha perdido tres encuentros al hilo y juega lo que ha sido su peor defensiva de esta temporada, tolerando un promedio de 129.3 puntos desde el cambio. Los Lakers regresan a la cancha de práctica en la noche del miércoles, y Ball espera estar de vuelta en el primer partido de los Lakers luego del receso del Juego de Estrellas este viernes ante Dallas (10:30 p.m., hora del Este por ESPN). Los Lakers (23-34) esperan que su cotizado base novato pueda cambiar las fortunas del equipo una vez más.
"Será realmente divertido poder contar con él manejando el balón y colocando a nuestros hombres en puestos diferentes y dándole confianza a los demás", expresó Ingram. "Va a hacer que nuestra ofensiva sea aún mejor".
La filosofía de Ball, consistente en "pasar primero" y acelerar el ritmo del partido debería revitalizar a los Lakers. Hace que los Lakers dispongan de mejores situaciones de enceste y su química al lado de Kuzma podría hacer que el novato alero anotador pueda Luke Walton debe descifrar algunas claves antes del regreso de Ball.
¿Cómo utilizará a Thomas? ¿Seguirá Thomas como suplente como la bujía ofensiva que el equipo necesita desesperadamente y, probablemente, utilizar a Ball en las últimas etapas de partidos cerrados? Y, ¿cómo asumiría esto Thomas, a quien le gusta ser titular? Johnson ha expresado que Ball es el base titular del equipo.
"Ambos somos jugadores de baloncesto y sabemos cómo jugar con diferentes clases de jugadores", dijo Thomas. "(Ball) es un talento joven y especial. Será un jugador especial en esta liga por años por venir. Viendo los toros desde la barrera, viendo jugar a los Lakers, (Ball) es muy bueno y va a su propio ritmo, lo cual es una fortaleza a una edad tan joven".
"Es talentoso, y no puedo esperar a estar en la cancha con él, competir con él y, con esperanzas, poder ganar muchos partidos".
Los dos primeros partidos luego del receso del Juego de Estrellas podrían ayudar mucho a que los Lakers retomen la senda ganadora. Se enfrentarán a Dallas en casa antes de viajar a Sacramento a la noche siguiente. Estas jornadas consecutivas serán el inicio de una gira de muchas millas para los Lakers, desde Sacramento, pasando por Atlanta, Miami y terminando en San Antonio. Será un viaje de ocho días que podría significar que los Lakers descubran nuevamente su energía perdida o una caída hacia el foso.
"Como staff, vamos a pasar (parte del) receso pensando en nuevas ideas con respecto a cuál podría ser la manera más efectiva de jugar para nosotros con el nuevo roster con el cual contamos", dijo Walton la semana pasada. "Volveremos a ver videos viejos, haremos una tormenta de ideas para conseguir algo nuevo. Conseguiremos algo".
Además del regreso de Ball, los Lakers buscarán mayor consistencia por parte de Thomas, cuyos tres primeros partidos como miembro de los Lakers han sido una montaña rusa. Mostró ciertos destellos en su debut, anotando 22 puntos, incluyendo 4 triples y 6 asistencias. Sin embargo, fue expulsado en su segundo partido luego de cinco minutos de acción tras haber chocado con su ex compañero en los Celtics, Rajon Rondo.
Thomas no pudo conseguir precisión en su enceste en el tercer partido, fallando 12 de 15 intentos y terminando con 7 puntos. Mientras tanto, la defensiva de los Lakers ha retrocedido desde el cambio. Muy probablemente, Walton se verá obligado a ajustar su esquema de cambio defensivo del 1 al 5, la cual ha sido una agradable sorpresa para los Lakers esta temporada cuando jugaban en su mejor forma), basándose en la presencia de Thomas, de 5 pies, 9 pulgadas de estatura.
"Debemos recuperar nuestra energía", expresó Walton luego que los Lakers admitieran 130 y 139 tantos en Dallas y Nueva Orleans, respectivamente. "De alguna forma, la perdimos rápidamente... No estamos jugando a la defensiva".
Al contrario de la mayoría de los equipos que están fuera de la lucha por pasar a los playoffs, los Lakers no tienen propiedad sobre su puesto de selección en primera ronda en el draft 2018. Por ende, la perspectiva a largo plazo de los Lakers sigue enfocada en agentes libres y cuáles serían los nombres que podrían ser atraídos por Johnson o Pelinka durante el presente verano o el próximo. Adicionalmente, a la gerencia le agradaría ver a los jóvenes Lakers seguir aprendiendo lo necesario a fin de ganar, con la mejoría continua de Ball, Ingram, Kuzma y Hart.
Si Thomas consigue la manera de hacer lo que él aspira, o sea, recobrar su valor al nivel de un jugador con promedios cercanos a los 29 puntos por temporada (como fue su caso en la temporada pasada) para así poder firmar un contrato lucrativo a largo plazo el cual, muy probablemente, provendrá de otro equipo; haciéndolo sin afectar el crecimiento de los Lakers, el resto de la presente temporada será considerado como un éxito para un equipo que se encuentra a tres victorias de igualar su récord de la pasada campaña.
"Creo que sabemos que podemos ser aún mejores en la segunda mitad de la temporada", expresó Ingram.