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Paulina Chapa, la mexicana que cumple su sueño con los Dallas Wings

DALLAS – Paulina Chapa se enamoró a muy temprana edad del baloncesto y mucho tuvo que ver el encanto de Michael Jordan. Desde entonces, Chapa se fijó como meta tratar de llegar a la WNBA, la mejor liga de baloncesto femenil en el planeta.

Unos años después, la mexicana cumplió su meta, aunque fuera de la duela, como una de las más alta ejecutivas de las Dallas Wings, el equipo de basquetbol femenil profesional del área Dallas-Fort Worth, para el que trabaja como vicepresidenta de mercadotecnia.

“Crecí desde muy chiquita siendo súper fanática del basquetbol”, recordó. “Desde la primera vez que vi jugar a Michael Jordan me cautivó el deporte, la destreza, la habilidad, la intensidad con la que se vivía esos momentos, en los noventas”.

“Fue un auge y una época de oro completamente para la NBA”, agregó. “En Monterrey y México en general era toda una locura. Me clavé desde muy chica. Uno de mis objetivos desde que estaba muy chica era estar en la NBA, trabajar en un lugar como la WNBA y, bueno, se cumplió”.

Chapa nació en Estados Unidos, pero unas cuantas semanas después su familia mexicana regresó a Monterrey, donde creció, se desarrolló y estudió hasta antes de volver a Estados Unidos para completar su carrera universitaria y un posgrado.

Jugó basquetbol en ligas de Monterrey toda la vida, como ella misma señala, hasta que una lesión en la preparatoria la alejó de las duelas de manera formal, así que en la universidad decidió seguir con el deporte de sus amores, aunque de manera más informal, sólo recreacional.

Su vida profesional comenzó en el béisbol de las Grandes Ligas, con los Medias Blancas de Chicago, para los que trabajó en el área de mercadotecnia hispana. De ahí, su desarrollo siguió hacia la liga que siempre idolatró, la NBA.

“Fue un sueño hecho realidad”, reconoció. “He sido muy afortunada en el camino. No ha sido fácil, definitivamente entrar en los deportes, en general seas mujer, hombre, mexicana, americana, lo que sea, es difícil, es un trabajo competido. Es un trabajo donde hay muchas personalidades de diferentes tipos”.

Sin embargo, el partido más importante en su carrera hasta el momento apenas comienza: tratar de dirigir el destino mercadológico de un equipo femenil que tiene buena competencia en una región muy orientada al deporte, en la que hay clubes profesionales prácticamente de cualquier disciplina, incluidas la NFL con los Dallas Cowboys, las Grandes Ligas con los Rangers de Texas, el futbol del FC Dallas, el hockey de los Stars y, sobre todo, el básquetbol de los Dallas Mavericks.

“No es fácil competir en Dallas con tantos deportes”, dijo. “Pero estamos ofreciendo un producto que es muy particular, básquetbol femenil. Es impresionante ver en persona el producto que tenemos en la cancha, nuestras jugadoras. Es un básquetbol de muy alto nivel, muy comparable con el masculino”.

Otra de las ventajas que Chapa observó en el panorama de las Wings con la comunidad es que son una opción más económica que la mayoría de los espectáculos deportivos del área y que son el único club profesional de primera división, por llamarle de alguna manera.

“Los boletos de temporada completa cuestan 199 dólares”, dijo. “Por otro lado, somos el único equipo femenil con la intensión de inspirar a las niñas que están jugando básquet y ser un modelo a seguir. Más allá de competir, vemos que estamos con el deporte correcto, en la ciudad correcta y sobre todo con el producto correcto de talento en la cancha”.

A partir de mayo próximo, las Wings jugarán su tercera temporada en Dallas, donde se establecieron en la arena de la Universidad de Texas en Arlington.

La campaña anterior, las Wings clasificaron a los playoffs. Chapa está convencida de que el 2018 será la temporada de consolidación, en la que repetirán en la postemporada y serán serias candidatas al campeonato.

Las Wings presentaron la semana anterior en Dallas a su flamante refuerzo, Liz Cambage, quien con sus 6-8 pies de altura, es considerada una de las centros más dominante del baloncesto femenil a escala mundial.

“Liz es una de las mejores jugadoras del mundo y mejorará nuestro equipo de basquetbol”, dijo en un comunicado el presidente de las Wings, Greg Bibb sobre la dos veces olímpica australiana. “Su habilidad ofensiva añadirá otra dimensión al juego rápido y de muchas anotaciones del entrenado (Fred) Williams, mientras que su tamaño y presencia defensiva mejorará ampliamente nuestra habilidad de proteger el aro y los rebotes del lado defensivo”.

Chapa se considera una represente latina en la WNBA fuera de la cancha. Pero espera que pronto haya representación importante de hispanas dentro de la duela.

Dijo estar consciente de que su tarea será igual o más complicada que la de sus jugadoras y entrenadores para conseguir el primer campeonato de baloncesto femenil para Dallas-Fort Worth.

Pero está optimista en que la influencia en todos aspectos del equipo será cada vez mayor en todos sentidos.

“El talento está en la cancha”, afirmó. “Es espectacular y creemos que este año tenemos las piezas correctas para tener impacto importante y dominar la liga por completo. Y no lo veo de ninguna otra forma”.

Por lo pronto, la mayoría de sus jugadoras participa en ligas profesionales alrededor del mundo, antes de que tengan que reportara al campamento de las Wings, que comienzan pretemporada entre el 7 y 8 de mayo.

“Muchas de nuestras jugadoras sienten la necesidad de seguir en ritmo de competencia, de jugar todo el año porque hay un periodo largo entre temporadas”, comentó Chapa. “A ellas además les ayuda a elevar su nivel de juego y aprender técnicas de otros país”.

“Pero llegan de sus respectivas ciudades con más ganas de competir en la mejor liga del mundo, la WNBA”.