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MIAMI – La gente salió del American Airlines Arena con la pesimista certeza de que no volverán a ver al Miami Heat hasta la próxima temporada de la NBA.  Luego de dividir los dos primeros juegos en casa, los Philadelphia Sixers barrieron al Heat en los dos encuentros en Miami para tomar una ventaja de 3-1 que parece decisiva en la serie entre ambos, correspondiente a la primera ronda de los playoffs. Un catastrófico colapso en el último cuarto llevó a Miami a perder una ventaja de 12 cartones y Filadelfia se llevó el triunfo por cerrado marcador de 106-102 y ahora tratará de rematar en el Wells Fargo Center. Los visitantes consiguieron una corrida de 14 puntos en fila en los primeros minutos del último parcial, en la que influyó grandemente un error de táctica del coach Erik Spoelstra, una vez más, que prefirió una alineación pequeña incapaz de neutralizar la estatura de Joel Embiid (siete pies), y el australiano Ben Simmons, el croata Dario Saric y el turco Ersan Ilyasova, todos ellos de 6.10. Por más de siete minutos, el hombre más alto que tuvo Spoelstra sobre la cancha fue James Johnson (6.8), lo que permitió a los Sixers capturar 17 rebotes ofensivos en todo el partido, que le dieron al equipo demasiadas segundas oportunidades. Inexplicablemente, Hassan Whiteside, ni Kelly Olynyk, ambos de siete pies, y Bam Adebayo, de 6.10, veían desde la banca cómo los hombres altos de los visitantes destrozaban en pocos minutos la buena diferencia que el equipo construyó en el tercer parcial. En total, Filadelfia consiguió 57 rebotes, por 43 Miami, aunque la gran diferencia estuvo en la cantad de tiros libres fallados por los de casa, que hubieran dado un vuelco al marcador final. El Heat intentó 25 disparos desde la raya de penalidad y encestó solamente 13, mientras que los Sixers sí supieron aprovechar los regalos de rival, al marcar de 35-27. Esta vez el novato Simmons fue la gran figura, con un triple-doble, al anotar 17 puntos, capturar 13 rebotes y servir diez asistencias, además de robar cuatro balones, mientras que J.J.Reddick, con 24 cartones, fue el mejor encestador de los ganadores. “Fue un gran juego contra un gran equipo. Esto no está terminado ni mucho menos”, dijo con condescendencia Reddick. “Este (el Heat) es un equipo con mucho orgullo y sabemos que tratarán de sacarse la espina aunque sea de visitantes, pero nuestro equipo venía enfocado en ganar los dos aquí y lo conseguimos”, agregó. Sobre el gran partido de su compañero Simmons, sólo tuvo elogios: “Fue Ben siendo Ben. Es un hombre físicamente muy dotado y una habilidad que mejora en cada juego, ¿Qué más decir”, añadió Reddick. Embiid, que el juego anterior fue el mejor anotador de Filadelfia, no tuvo un gran partido esta vez, con sólo 14 unidades, auqnue reboteó 12 balones y bloqueó cinco tiros. “Sí, es cierto que no fue un gran juego, ofensivamente hablando, pero creo que hice cosas importantes en la defensa hoy y estoy satisfecho”, explicó el centro. “El próximo martes tendré mi primer juego de playoffs en casa y eso me tiene muy emocionado. Esperamos liquidar ahí mismo esta serie”, agregó. “Es una derrota muy dolorosa porque estuvimos muy cerca y la dejamos escapar”, explicó por su parte Spoelstra. “En el último cuarto ellos fueron capaces de ejecutar sus jugadas y nosotros no”. “Sé que tenemos ahora el camino cuesta arriba, pero este equipo es luchador y esto no ha terminado aún”, dijo el entrenador de Miami en una de esas frases preconcebidas y políticamente correctas, aunque los fanáticos saben que de la manera en que se ha desarrollado esta serie, más fácil se ganan ellos la lotería antes que el Heat consiga remontar.
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