OAKLAND, Calif. -- En algún momento durante la temporada regular, LeBron James se preguntó si los Cleveland Cavaliers incluso llegarían a los Playoffs y ni siquiera pensaba en tener oportunidad de llegar a sus octavas Finales de la NBA consecutivas.
“Hubieron momentos en los que (pensé), ‘OK, ¿Los Cavaliers siquiera llegarán a Playoffs’?”, James dijo a Rachel Nichols de ESPN el miércoles en una entrevista exclusiva. “Y entonces pensaba, ‘OK. No voy a dejar ahí esta conversación, es algo ridículo. Ahora tengo que llegar a la Postemporada’”.
James se refería a ese periodo entre diciembre y enero, cuando los Cavs perdieron nueve de 12 oartidos. Sufrieron una derrota por 28 puntos en Minnesota, otra por 34 en Toronto y una devastadora paliza en casa en la que permitieron 148 puntos a los Oklahoma City Thunder, todo en un lapso de nueve días.
En ese periodo, por momentos, James pareció hasta parecer con problemas motivacionales. Dijo que tuvo que animarse para salir del bache personal que afectaba al resto del equipo.
“Me sentía como, ‘OK. No estoy muy seguro de lo que estamos haciendo con este equipo; no estamos jugando buen basquetbol’, pero no te puedes quedar en eso”, dijo James a Nichols. “Tienes a tanta gente que te admira, a tantos niños a los cuales inspirar y uno mismo siempre ha hablado sobre ser lo más grandioso que se pueda diariamente, así que tuve que cambiar el switch antes de la fecha límite de cambios”.
James dijo que comenzó a tener dudas sobre los Cavs en el verano pasado.
Se ha reportado que James no estuvo de acuerdo con la decisión de los Cavs de consentir a Kyrie Irving con su solicitud de ser cambiado. Por primera vez, públicamente, James le dijo a Nichols que llamó a la directiva del equipo para pedirles no cambiar a Irving.
“Incluso si miras atrás al verano, cuando sentía que era malo para nuestro equipo poder cambiar a nuestro guardia superestrella, un tipo que ha librado tantas batallas los últimos tres años y que, obviamente, no fui parte de la comunicación y no supe exactamente qué sucedía entre ambos lados. Simplemente sentí que no era un buen momento para que el equipo hiciera eso”, agregó.
“Sentí que las probabilidades estaban en nuestra contra desde el verano y luego te enteras que inicias la temporada sin el guardia All-Star que obtuvimos de Boston (Isaiah Thomas), porque podrá jugar hasta enero. Simplemente pasaban cosas con el equipo. Cambiamos alineaciones, jugadores en la duela, hicimos un cambio en la fecha límite y no me puedo sentar ahora y decir que las Finales eran parte de mi idea”, agregó.
James tampoco estuvo a favor de que los Cavs terminaran su relación laboral con el gerente general David Griffin el verano pasado, pero dijo que continúa con su relación laboral con el dueño Dan Gilbert, quien pagó la nómina más alta en la NBA esta campaña y agregó más cuando el actual gerente general Koby Altman reinventó al equipo al contratar a cuatro nuevos jugadores para ayudar a cambiar el rumbo de la temporada de los Cavs.
“No se trata de mí o de Dan, tenemos una gran relación laboral. No es que no seamos mejores amigos y no creo que debas ser el mejor amigo de un jugador como dueño o viceversa, pero creo que esto ha funcionado para nosotros en estos cuatro años desde que regresé”, explicó James a Nichols.
James ha aclarado varias veces que no considerará opciones en la agencia libre hasta el final de la campaña, pero indicó que está tranquilo con su situación y con lo que ha conseguido junto con los Cavs las últimas cuatro campañas, lo que incluye un título y cuatro apariciones en las Finales.
“He intentado poner a esta franquicia en un nivel que siempre sea visto como positivo. Desde un punto de vista de basquetbol, un punto de vista social, desde el punto de vista comercial”, señaló James a Nichols. “Muchos encabezados son sobre mí, pero soy uno, mientras juegue para esta franquicia, cuando veas a los Cavaliers, quiero que pienses en una gran organización de prestigio”.
Cuando Nichols le preguntó a James si la relación con Gilbert afectaría su decisión en la agencia libre, James dijo: “Vamos a ver”.