CLEVELAND - Tyronn Lue confirmó a los periodistas después de la derrota del Juego 4 en la final de la NBA del viernes ante los Golden State Warriors que tiene la intención de regresar como entrenador en jefe de los Cleveland Cavaliers la próxima temporada.
Lue, quien guió a los Cavs a su primer campeonato en la historia después de ser elevado a entrenador en jefe a mediados de la temporada 2015-16, cuando David Blatt fue destituido, le quedan tres años de cinco, $35 millones por la extensión que firmó en el verano de 2016.
El entrenador, de 41 años, tuvo un permiso médico de nueve juegos desde fines de marzo hasta principios de abril después de padecer dolores en el pecho y ocasionalmente de toser sangre, y se perdió partes de otros dos juegos anteriores con los mismos síntomas. Más tarde, Lue reveló a Rachel Nichols de ESPN que también está tomando medicamentos para calmar su ansiedad.
"Tuve algunos problemas difíciles en el transcurso de la temporada, y probablemente podría haber renunciado, pero no iba a hacer eso", dijo Lue. "Sabía que incluso si no me sentía al 100 por ciento que tenía que regresar a los playoffs. Ese es mi momento. Ese es mi momento. No quería poner a nuestros entrenadores en esa situación. No quería poner a nuestros jugadores en esa situación, y tengo que luchar para lograrlo. Eso es lo que hacen los campeones. Di todo lo que tenía".
Cuando los Cavs cayeron en tiempos difíciles en enero y febrero, culminando con una derrota nacional televisiva de 120-88 ante los Houston Rockets el 3 de febrero, su 12ª derrota en 18 juegos en ese momento, un directivo anónimo de los Cavaliers le dijo a Adrian Wojnarowski de ESPN el trabajo de Lue estaba a salvo.
Al medio tiempo del Juego 1 de las Finales, el dueño de los Cavs, Dan Gilbert, twitteó el apoyo adicional de Lue escribiendo: "Ty Lue y su personal han estado allí con casi tanto ruido y juicio prematuro que pueden ser lanzados a un entrenador y guiados y volvemos al baile".
En dos temporadas y media como entrenador en jefe de los Cavs, Lue tiene un récord en temporada regular de 128-77 (.624) y un récord de desempate de 41-20 (.672).
Lue agradeció a casi todo su cuerpo técnico: el entrenador en jefe asociado Larry Drew, Mike Longabardi, Phil Handy, James Posey, Damon Jones, Vitaly Potapenko y Jim Boylan, después del Juego 4 para mostrar su agradecimiento por sus contribuciones mientras trabajaba para recuperar su salud.
"Hicieron un gran trabajo hasta que volví", dijo Lue. "Aunque volví cuando aún no estaba listo, tenía que hacerlo. Eso es lo que soy. Nunca voy a rendirme y nunca voy a ceder. Me quedé y pude tener un muy especial año, fuera de perder en la final.
"Pero pensé que hicimos un buen trabajo al mantener el rumbo y llegar a este punto. Me alegro por los muchachos".
Se le pidió a Lue que compartiera lo que aprendió sobre sí mismo como entrenador esta temporada.
"Siempre puedo mejorar", dijo. "Pero sé que soy un tipo duro. Me enorgullezco de eso. Pero soy duro conmigo mismo muchas veces, pero tengo que darme cuenta de que solo he estado entrenando durante dos años y medio, pero se sienten como 10 o 15. Puedo mejorar, y voy a mejorar. Acabo de enterarme de que tienes que mantener el rumbo en esta profesión. Cualquier cosa puede suceder. Tuvimos muchas oportunidades para enviar correos electrónicos. para poner excusas, y no hicimos eso. Creo que comenzó conmigo, comenzó con LeBron James, con solo decir 'sin excusas', y lo somos hoy ".