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Giannis Antetokounmpo es un JMV, pero ¿tendrá éxito en playoffs?

PHILADELPHIA - A medida que los Milwaukee Bucks se encontraban perdidos en el último cuarto ante los Philadelphia 76ers, Giannis Antetokounmpo tenía un mensaje para sus compañeros de equipo:

Yo me encargo de esto.

Sí, a los Bucks les faltaba Eric Bledsoe, que había sido expulsado a los tres minutos de juego. A Khris Middleton se le limitó a 25 minutos cuando regresaba de una lesión. Malcom Brogdon y Nikola Mirotic fueron marginados debido a las lesiones.

Y aún así, con su comportamiento, con sus acciones, con su juego, Antetokounmpo siguió arrastrando a Milwaukee, negándose a permitirles perder una oportunidad de reclamar la ventaja de jugar en casa en los playoffs y el mejor registro de la NBA en sus propios términos.

“Solo estaba tratando de tener confianza”, dijo Antetokounmpo a ESPN. “Lo más importante es que tus compañeros de equipo vean que tienes confianza. Incluso cuando Bledsoe, uno de nuestros jugadores estrellas y una de nuestras piezas más importantes están fuera, no te ven perder la compostura y simplemente se dan por vencidos, y ven que estás confiado, todos obtienen confianza.

“Se trata de cómo entras en la habitación. Porque todo lo que hago, mis compañeros de equipo me están mirando. Así que trato de ser el mejor ejemplo para ellos, ser un líder y cuando salgo, no lo cuestiono”.

No hubo dudas sobre esto después. La última línea de estadísticas de Antetokounmpo lo dijo todo: 45 puntos, 13 rebotes, 6 asistencias y 5 bloqueos en 35 minutos. También lo hizo la puntuación final: Bucks 128-122 Sixers, una victoria que Milwaukee logró con una carrera de 15-4 para terminar el juego, una marcada por un bloqueo de Antetokounmpo que Joel Embiid.

Fue una victoria que no solo demostró por qué Milwaukee ha sido el mejor equipo de la NBA durante esta temporada regular, sino también por qué Antetokounmpo ha sido el jugador más valioso de la liga. Ahora, como los playoffs están a poco más de una semana, el objetivo se vuelve aún más grande: hacer esto en la pretemporada.

“Así es como está construido”, dijo el entrenador de los Bucks, Mike Budenholzer. “Para jugar contra los mejores y competir, y simplemente poner todo en la línea. Así es como está construido, es lo que yo diría”.

Budenholzer y el gerente general, Jon Horst, han construido estos Bucks con esmero sobre Antetokounmpo -el primero instaló un sistema que acentúa todos los notables dones de Antetokounmpo en ambos extremos de la duela, y el segundo salió y encontró la piezas (el centro Brook Lopez y el gran reserva Ersan Ilyasova durante el verano, y el gran reserva Mirotic en la fecha límite del cambio) para hacer que las cosas funcionen-. El resultado ha sido un equipo que ha dominado la NBA durante toda la temporada.

Pero los Bucks no han sido tan dominantes debido a un sistema o por los movimientos realizados en el verano. Esto se debe a que tienen a un jugador que parece preparado no solo para ganar su primer premio al Jugador Más Valioso, sino también para seguir mejorando a pesar de que posiblemente sea el mejor jugador del mundo hoy en día.

“Él todavía está aprendiendo”, dijo el escolta reserva George Hill. “Él todavía está mejorando. Todavía es joven en este momento, aún aprendiendo los entresijos del juego y cosas por el estilo. Pero es divertido estar cerca de él y verlo evolucionar, desde que entró por primera vez en la liga hasta donde está ahora, la forma en que su cuerpo ha cambiado, la forma en que su mentalidad ha cambiado. Es divertido estar cerca”.

Hace un año, Hill estaba de viaje en Ohio cuando LeBron James colocó a los Cleveland Cavaliers en su espalda y los llevó a las finales de la NBA por cuarta temporada seguida. Al hacerlo, fue uno de los aspectos más destacados de la carrera de James y un recordatorio de cómo había gobernado completamente sobre la Conferencia del Este y, a decir verdad, la liga, a lo largo de esta década.

Luego James eligió ir al Oeste, al optar por unirse a Los Angeles Lakers en la agencia libre. Y mientras James terminó sin clasificar a los playoffs por primera vez en 14 años, nunca iba a poder defender su corona sobre el Este.

Y, de la forma en que Hill lo ve, no hay razón para que Antetokounmpo no pueda ser quien tome ese manto de James y se convierta en la fuerza dominante de la Conferencia.

“Él es uno de los mejores en la liga por una razón”, dijo. “Él lo sabe y sabe que va a atraer multitudes y tiene un buen equipo detrás de él, e ir con él. Creo que va a tener una postemporada fenomenal”.

La noche del jueves fue festiva para los Bucks. Esta es una franquicia que, durante tanto tiempo, ha sido una idea tardía de la NBA. Milwaukee ha podido celebrar una victoria en una serie de postemporada sola una vez -en 2001, cuando perdieron ante los mismos Philadelphia 76ers en las Finales de la Conferencia Este- en los últimos 30 años.

En estos 18 años, Milwaukee clasificó a los playoffs en ocho ocasiones y nunca avanzó -la más grande de cualquier equipo en los cuatro deportes profesionales estadounidenses más importantes-, según una investigación de Estadísticas e Información de ESPN.

Mientras tanto, todos los demás fans de la NBA han podido celebrar una serie de playoffs ganados desde entonces.

Así que es comprensible que haya muchos buenos sentimientos fluyendo en los vestuarios de Milwaukee después de la victoria del jueves. Para Antetokounmpo, sin embargo, este no era un momento de celebración. En su lugar, fue simplemente un recordatorio de cuán lejos les queda a los Bucks por ir.

Él ha perdido la serie de playoffs en tres diferentes ocasiones: para los Chicago Bulls en 2015, para los Toronto Raptors en 2017 y para los Boston Celtics (en siete partidos) la temporada pasada.

“No hemos avanzado de la primera ronda. Así que tenemos que ir paso a paso”, le dijo Antetokounmpo a ESPN, golpeando su puño en su mano para enfatizar cada paso. “No puedes saltar pasos. Cuando lleguemos a los playoffs, creo que podemos vencer a cualquier equipo. Podemos vencer a cualquier equipo”.

Eso no debería ser una declaración polémica. Los Bucks tienen el mejor récord en la NBA. Ellos han superado a los equipos por nueve puntos por 100 posesiones, un numero totalmente absurdo al considerar que los campeones defensores, los Golden State Warriors, superan a los equipos por 6.4 puntos por 100 posesiones esta temporada. Los Bucks están entre los tres primeros en eficiencia ofensiva y defensiva, y lideran a la NBA en la última categoría. Podría decirse que tienen el mejor jugador en la NBA. Budenholzer es el gran favorito para ganar el premio al Entrenador del Año en la NBA -un honor que su estrella no tiene reparos en decir que debería ganar por segunda vez después de haberlo ganado en 2015 con los Atlanta Hawks-.

Y sin embargo, a pesar de todo, persisten las dudas. Este grupo no ha avanzado en los playoffs todavía. Hay preguntas sobre si el reparto de apoyo de Antetokounmpo podría hacer lo suficiente para ayudarlo. Algunos se preguntan si su brinco inconsistente se convertirá en una responsabilidad si los equipos de alguna manera pueden mantenerlo fuera del carril y obligarlo a hacer repetidamente.

Se supone que los equipos no deben saltar de la mitad al frente de la linea inesperadamente. Hace cuatro años, un equipo -los Golden State Warriors- se encontraron en medio de una metamorfosis similar. Cambiaron de entrenador, instalaron un nuevo sistema ofensivo, hicieron que un jugador (Stephen Curry) se convierta en el Jugador Más Valioso de la Liga y terminara con el mejor récord en la NBA.

En todo momento, hasta que -e incluso después- ganaron el título de la NBA en 2015, muchos dudaron que pudieran hacerlo.

Queda por ver si los Bucks pueden seguir el mismo guión. Lo mismo ocurre con la búsqueda de Antetokounmpo del premio al Jugador Más Valioso de esta temporada, ya que tiene una duda competencia con el base de los Houston Rockets, James Harden -el mismo hombre al que Curry le ganó para llevarse su primer JMV en 2015-.

Pero Anteotokoumpo ha escuchado a estos críticos. Y él sabe que hasta que estos Bucks demuestren que están equivocados, esos escépticos no irán a ninguna parte.

“Sí, seguro que nos motiva”, dijo Antetokounmpo a ESPN. “Somos Milwaukee. No hemos estado más allá de la primera ronda que desde 2001. Y como dije, tenemos que ir paso a paso. Pero definitivamente nos motiva.

“Las personas no creen que podamos ganar todo. Pero al final del día, vamos a jugar para eso. Vamos a jugar hasta el final. Está en nuestras manos decir cuál será el final”.

Donde sea el final para los Bucks, ellos irán tan lejos como Giannis Antetokounmpo pueda llevarlos. Y, a medida que llegan los playoffs, el mismo mensaje que le dio a sus compañeros de equipo con su comportamiento, con sus acciones y con su juego el jueves por la noche, es el mismo que espera entregar al resto de la NBA en los próximos dos meses.

Yo me encargo de esto.