Yao Ming, de 22 años, seleccionado por los Rockets de Houston con el número uno en el pasado sorteo universitario, también hizo méritos para llevarse el premio de Novato del Año, sus estadísticas fueron en la mayoría de las categorías mejores que las de Stoudemire, de 20 años.

Pero después que la pasada temporada el ala-pívot español Pau Gasol se convirtió en el primer jugador europeo que lograba el premio de Novato de Año, dárselo por segunda vez consecutiva a un extranjero era algo que encajaba muy bien dentro del mundo de la NBA y más después de las críticas que han comenzado a surgir por la llegada de profesionales de fuera de Estados Unidos.

Tampoco hay que olvidar el momento de patriotismo que se sigue viviendo dentro del país con la guerra de Irak y lo que supone el protagonismo estadounidense en todos niveles y aspectos de la sociedad.

Pero cuando se trata de negocios, los directivos de la NBA son los primeros en asegurarse a los profesionales que les den los mejores resultados en su comercialización del producto del deporte del baloncesto y Yao Ming cayó como una bendición.

Nunca, ni el legendario Michael Jordan, en sus comienzos tuvo la aceptación y promoción comercial que ha logrado Yao Ming, auténtico símbolo no sólo para los ciudadanos de su país sino también para el resto del continente asiático y del mundo.

Yao Ming ha hecho anuncios de todo tipo, desde computadoras a tarjetas de crédito, pasando por juegos audiovisuales y otros productos de informática, mientras que su imagen ha salido en la mayoría de las portadas de revistas especializadas de todo el mundo.

A pesar que los Rockets no han tenido su mejor temporada en el apartado deportivo, Houston ha sido el centro de atención internacional durante la competición regular gracias únicamente a la presencia de Yao Ming, que movió millones de dólares en contratos comerciales tanto para el equipo como para el mismo.

El jugador chino de 22 años es consciente de todo lo que ha generado su presencia dentro del baloncesto profesional de la NBA y lo ha asimilado con total naturalidad, lo mismo que lo de no ser elegido como mejor novato.

Yao Ming consiguió unos promedios de 13,5 puntos; 8,2 rebotes; 1,8 tapones y 2,8 asistencias por partido con un 49,8 por ciento de acierto en los tiros de campo y el 81,1 desde la línea personal.

"Lo más importante de todo es que no he defraudado a nadie y que hice todo lo que se me pidió en mi primera experiencia dentro de la NBA", comentó Yao Ming.

Stoudemire logró promedios de 13,5 puntos; 8,8 rebotes; 1,1 tapones y una asistencia por partido, con el 47,2 por ciento de acierto en los tiros de campo y el 66,1 desde la línea de personal.

Pero al final el haber conseguido los Suns el paso a la postemporada y los Rockets quedarse fuera no ayudo tampoco a la causa de Yao Ming.

El pívot chino antes de viajar a su país, salió de Houston el pasado miércoles vía San Francisco, donde se reunió con sus agentes, a la espera de salir este fin de semana con dirección a Shangai (China), donde tiene su residencia, tuvo la delicadeza de dejarle la felicitación a Stoudemire por el triunfo del premio.

"Felicito a Amare", comentó Yao. "Creo que es el comienzo de una rivalidad entre dos jugadores que puede durar muchos años".

El lenguaje de Yao Ming no podía ser más comercial y de proyección de futuro al declarar de manera oficial que había surgido una nueva rivalidad deportiva en el campo, los dos equipos están en la Conferencia Oeste, pero la misma sólo será en el apartado deportivo porque en el de imagen, el pívot chino batió todas las marcas anteriores.