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Enrique Rojas | ESPN Digital 7y

Kendrys Morales a gusto tras 10 años en las mayores

ST. PETERSBURG, Florida -- Una vez en Grandes Ligas, la principal aspiración del beisbolista promedio es acumular el dinero suficiente para vivir el retiro y, si es posible, ganar un anillo de campeón durante su carrera.

En el caso del cubano Kendrys Morales, quien ganó la Serie Mundial del 2015 con los Reales de Kansas City y ha acumulado una fortuna que ronda los $70 millones desde que alcanzó las ligas mayores, haber jugado por más de una década en el máximo nivel que tiene la pelota es su principal orgullo.

"Me siento un ser privilegiado y bendecido por Dios", dijo Morales a ESPN Digital. "El porcentaje de los peloteros que juegan 10 años en Grandes Ligas es my bajo, es muy difícil mantenerse aquí, es un béisbol con mucha calidad. Gracias a Dios he podido mantenerme saludable y he podido durar 10 años", agregó.

Morales, de 33 años, firmó un contrato de $33 millones de dólares para ser el bateador designado de los Azulejos de Toronto por las próximas tres temporadas, después que el dominicano Edwin Encarnación decidiera probar suerte en el mercado de agentes libres.

Morales, quien alcanzará los 10 años de servicios en Grandes Ligas en medio de su nuevo contrato, ha estado en los alrededores por una docena de temporadas. Incluso para un pelotero de talento superior que recibió un contrato de tres millones de dólares por seis temporadas, tras escapar ilegamente de Cuba, su país natal, jugar una década no es algo rutinario.

Cerca de 19,000 peloteros (exactamente 18,934 hasta el 11 de abril del 2017) han jugado en Grandes Ligas, pero apenas un poco más de 3,300 lograron mantenerse al menos una década, informó Elias Sports Bureau a ESPN Digital.

Un estudio demográfico de la población de Grandes Ligas entre 1902 y 1993, publicado en 1995 por William Witnauer, de la Univesidad Estatal de Nueva York en Buffalo, y Richard Rogers y Jarron Saint Onge, de la Universidad de Colorado, concluyó que la esperanza de vida de un jugador de posición novato en las ligas mayores era de 5.6 años.

De los casi 6,000 jugadores que accionaron en ese período, uno de cada cinco no jugó más de una temporada. El estudio, que no incluyó lanzadores -- por estar expuestos a más riesgos que los de posición -- mostró que el 13% de los peloteros que debutaron después de los 21 años no pudieron mantenerse para una segunda temporada.

"El trabajo diario y la consistencia que he tenido es lo que más aprecio. Es bastante difícil tener 10 años consecutivos siendo consistente aquí", dijo Morales, quien debutó con los Angelinos de Los Angeles un mes antes de cumplir los 23 años en mayo del 2006.

Desde que abandonó Cuba en una balsa en el octavo intento en junio del 2004, Morales ha jugado más de mil partidos con los Angelinos, Marineros de Seattle, Mellizos de Minnesota, Reales de Kansas City y Toronto y batea para .273 con 163 jonrones y 592 carreras impulsadas en más de 4,000 apariciones en el plato.

Con los Reales, el toletero ambidiestro pegó 52 jonrones y remolcó 199 vueltas en las dos temporadas anteriores para colocarse en posición de reclamar un salario promedio de $11 millones anuales y sustituir a un bateador como Encarnación, quien promedió 38 jonrones y 110 impulsadas en las últimas cinco campañas.

"Quiero ganar con este equipo, pero primero debemos llegar a los playoffs", dijo Morales, quien ha participado en 32 encuentros de postemporada en su carrera.

Morales batea .286 con un jonrón, dos dobles y seis empujadas en los primeros siete juegos del 2017, pero el resto de sus compañeros en la alineación hicieron poco para evitar que los Azulejos arrancaran con 1-6, la peor marca en la historia de la franquicia.

Toronto batea colectivamente para .196 con 23 carreras y ha perdido tres encuentros por una carrera de diferencia

"Es muy temprano para encender las alarmas. Este equipo va a batear, tarde o temprano", dijo Morales, quien destacó el gran ambiente que respira el camerino de su nuevo equipo. "Me recibieron bastante bien. Los muchachos en el camerino y la organización completa, todo el mundo se lleva bien. Eso es un factor fundamental para un equipo", dijo.

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