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Kershaw y Greinke, amigos que rivalizan por primera vez

LOS ANGELES -- Clayton Kershaw dijo que no estaba buscando enfrentar a su ex compañero de equipo el viernes. Eso fue entonces.

Kershaw y Los Dodgers de Los Ángeles hicieron surgir lo mejor de Zack Greinke y los Diamantes de Arizona, el viernes, en un juego que no estuvo cerca siquiera de desarrollarse como se sugería antes del inicio.

Par de ases y ex compañeros en el staff de abridores de Dodgers, ganaron tres títulos consecutivos en el Oeste de la Liga Nacional, ambos han sido rivales de división en las dos temporadas pasadas, pero el viernes fue la primera vez en la que se enfrentaron directamente. Los Dodgers ganaron por 7-1.

"Lo dije antes, no es muy divertido enfrentarte a jugadores que conoces y que consideras amigos", dijo Kershaw después del juego. "Hicimos muy buen trabajo contra (Greinke) esta noche. Realmente batallamos, lo hicimos lanzar muchos pitcheos, y no le dimos opciones para retirar outs fácilmente. Lo hicimos romper con buenos hits y corredores en posición de anotar, así que, nos quitamos el sombrero frente a nuestra ofensiva. Realmente, pelearon muy bien contra él".

Una trama secundaria en el guión que reunió a cuatro Cy Youngs fue el hecho de que se trató del encuentro más caro en la historia de las Grandes Ligas, con cada lanzador ganando más de $30 millones de dólares en esta temporada.

El zurdo de los Dodgers mostró por qué su comando vale un precio tan lucrativo. No permitió que un corredor llegara a primera base hasta el cuarto inning y lanzó juego de un hit hasta la octava entrada. Kershaw permitió una carrera y cuatro imparables en 8.1 entradas de labor. Pedro Báez subió al montículo para retirar los dos últimos outs.

Chris Owings, de Arizona, permitió el primer hit de Kershaw en el cuarto rollo, y el lanzador terminó el noveno con un doble productor.

"Después de que (Kershaw) no tuvo una gran salida en Colorado (permitió tres jonrones), sabíamos que alguien tendría que pagarlo", dijo el manager de Dodgers, Dave Roberts. "Había aún más incentivos por competir contra Zack del otro lado. Estaba enfocado y siempre lo está. Pero ver un poco más de esa concentración e intensidad fue bueno. Es algo que nuestro club necesitaba, ese empujón de un abridor que nuestro bullpen necesitaba. Hubo muchas cosas buenas esta noche".

Mientras tanto, Greinke batalló de nuevo en Dodger Stadium, ahora, utilizando la camisola de los Diamantes. Permitió cinco carreras y diez hits en cinco entradas. En dos aperturas con Arizona, en Dodger Stadium, ha permitido 13 carreras limpias y 19 imparables en 9.2 entradas.

"No es que se tratara de mi mejor salida, pero ellos son bateadores de gran calidad y hacen muy buenos contactos", dijo Greinke. "Fue un buen juego por ellos".

El juego transcurrió sin anotaciones hasta el tercer inning cuando los Dodgers comenzaron a explotar. Adrián González y Logan Forsythe dieron sencillos productores; Justin Turner dio un doble productor de dos carreras y un fly de sacrificio que produjo una anotación, de Yasiel Puig, en el quinto inning, antes de que Greinke abandonara el juego con 107 pitcheos.

Kershaw y Greinke se hicieron amigos rápidamente mientras jugaban con Dodgers, tenían en común la habilidad para lanzar bien en el parque de pelota de Los Ángeles. Kershaw tuvo el segundo mejor promedio de efectividad en Dodger Stadium, con 1.98, mientras Greinke fue cuarto, con 2.19. El primero en la lista era Sandy Koufax, con 1.37, quien estuvo en el juego en un palco de los dueños de los Dodgers, cerca del dugout de tercera base.

"Nos acercamos mucho, nuestros hijos son de la misma edad y también son cercanos", comentó Kershaw. "Fue un poco raro".

Fue el primer juego entre ex ganadores del Cy Young, quienes alguna vez fueron compañeros, desde que Tom Glavine y John Smoltz se enfrentaron el 2 de septiembre de 2007 con Mets y Bravos, respectivamente.