Ya con la mente fría, un día después de sufrir los estragos que le causó a los Angelinos de Los Ángeles, con su vigésimo segundo cuadrangular del año, Aaron Judge, uno de los toleteros más temibles en el béisbol, para dar a los Yankees de Nueva York un triunfo de 5-3, Mike Scioscia, el manager de los aureolados, le responde a quienes consideran que lo lógico en ese octavo episodio, era darle un pase intencional al líder en las votaciones para el Juego de Estrellas.
''Es una decisión que se puede observar desde dos perspectivas. Nosotros vimos algunas cosas que intentamos aprovechar, por eso decidimos lanzarle. Desafortunadamente, el resultado no fue el que esperábamos'', explicó, esté martes, el veterano dirigente, antes de la segunda cita entre el equipo de Anaheim, y los neoyorquinos, en Angel Stadium.
''Son situaciones del juego en las que uno debe de tomar decisiones, utilizando el sentido común y de acuerdo a la circunstancia del momento, pero a veces no te resultan. Porque ellos cuentan con una alineación llena de buenos peloteros y de una forma o de otra, debes de enfrentarlos''.
Una consideración, en la que estuvo de acuerdo el propio Judge, a quien la primera pregunta que respondió, luego de que produjera las dos anotaciones que significaron la diferencia, con su monumental batazo, que explotó a la mitad de la tribuna del jardín derecho.
''No me sorprendió que me lanzaran, ya que luego vienen, detrás de mí, Matt Holliday, Starlin Castro y Gregorius'', señaló el joven pelotero de los Yankees.
''Lo único que me puso a pensar, fue cuando la cuenta se puso con 2 bolas, sin strikes. Porque había la posibilidad de que se lograra un strike, y después, el segundo, lo que hubiese cambiado totalmente el panorama, pero no logramos llegar tan lejos'', siguió explicando Mike Scioscia, quien concluyó con la siguiente reflexión:
''Yo estoy tranquilo, por la decisión que tomé. Sentí que era la mejor opción, y que nos llevaría a salir bien librados de esa entrada, a pesar de que, al final, no nos salió bien la jugada''.