Ahh, el parque de los Monumentos. Un lugar mágico en el Yankee Stadium en el cual peloteros no tan inmortales se convierten en, sí, inmortales.
Los Yankees de Nueva York han retirado tantos números que ya no les queda ninguno disponible con un sólo dígito. Lo que nos despierta la interrogante: Con el próximo retiro de la camiseta de David Ortiz en Boston, cuáles estrellas del pasado de los Medias Rojas hubiesen recibido placas conmemorativas si su equipo diera el honor de forma tan abierta como los Bombarderos del Bronx?
En un intento por responder esta pregunta, enviamos al escritor Scott Lauber, que cubre a los Medias Rojas, y el periodista Andrew Marchand, que maneja la fuente de los Yankees, a un universo alternativo (una galaxia imaginaria en la cual Boston y el Bronx son un sólo sitio) a fin de debatir los méritos de ciertos ex miembros de los Medias Rojas con relación a sus contrapartes de los Mulos de Manhattan.
Si le pasó a Jorge Posada, ¿por qué no a Jason Varitek?
Lauber: Los números nos dicen que Posada (42.6 WAR, 121 de OPS ajustado) estuvo más cerca de quedar al nivel de Yogi Berra (59.6, 125), Bill Dickey (55.8, 127) y Thurman Munson (46.0, 126) que Varitek (24.4, 99) estar al nivel de Posada. Pero, el Parque de los Monumentos no es lugar para pensar en sabermetría, o cualquier tipo de pensamiento lógico, si nos ponemos a ver. Gente como Bill James no tiene cabida ahí. Varitek fue el receptor de cuatro partidos sin hits, ganó dos Series Mundiales y usó una gran C roja en su pecho. Si los Medias Rojas fueran los Yankees, el retirar el No. 33 no sería suficiente. Hubiesen bañado en bronce el guante que Varitek enterró en la cabeza de Alex Rodríguez.
Marchand: Los Yankees son, digamos, un poquito laxos a la hora de celebrar sus éxitos del pasado. Posada no es miembro del Salón de la Fama. Sin embargo, hay un debate legítimo con respecto a si merece o no tener un lugar en Cooperstown. No se puede decir lo mismo de Varitek. "Sado", como lo llamaba su mejor amigo Derek Jeter, estuvo en cinco equipos campeones. La única razón por la cual darle ventaja a Varitek en esta comparación es que Varitek nunca requirió ser sacado del lineup cuando fue puesto como noveno bate. Hay una tesis del por qué los Yankees no debieron haber retirado el número 20, pero hay una más fuerte que se cuestiona el por qué el número 33 sigue disponible en Fenway.
Si le pasó a Andy Pettitte, ¿por qué no a Curt Schilling?
Lauber: Durante años, los Medias Rojas aplicaron dos reglas a los retiros de números: Un pelotero debió haber pasado toda su carrera con el equipo y haber sido exaltado al Salón de la Fama. El parque de los Monumentos del Yankee Stadium tiene menos reglas que la Cúpula del Trueno de Mad Max. Pettitte se fue del Bronx y regresó, y no ha pasado suficiente tiempo retirado a fin de aparecer en las boletas de votación del Salón de la Fama. Si bien Pettitte fue el último Yankee en usar el número 46, cuatro miembros de los Medias Rojas han usado el número 38 desde que Schilling lo hiciera. Eso está bien. Quizás, en vez de un número, Boston podría retirar la media de Schilling. Aún con sangre y sin lavar, obviamente.
Marchand: Pettitte fue mencionado en el informe Mitchell y aún así tuvo su número retirado, lo cual habla bien de su dinámica personalidad. Fue popular entre compañeros de equipo, entrenadores, aficionados y los medios de comunicación. Si bien Schilling no tenía ese carisma, quizás fue el mayor responsable de romper con la maldición del Bambino. Pienso que, si vamos a usar los principios de los Yankees para considerar el retiro de un número, Schilling merece ser homenajeado en Fenway.
Si le pasó a Bernie Williams, ¿por qué no a Dwight Evans?
Lauber: Bajo cualquier criterio, independientemente de las formas del Parque de los Monumentos, en la cual todos son bienvenidos, el número de Evans debería ser retirado. Cumple con suficientes requisitos: 19 años con el equipo, tres veces llamado al Juego de Estrellas, ocho Guantes de Oro, WAR de por vida de 66.9, un OPS ajustado de 127. Todo lo que le falta a Dewey es un anillo. Y es difícil considerar eso en su contra, considerand que bateó para .300 con tres cuadrangulares y un OPS de .977 en las Series Mundiales en las cuales Boston jugó siete partidos cada una en 1975 y 1986, para cargar con sendas derrotas. Los Yankees hubiesen retirado el número de Evans al segundo de anunciar su retiro. Los Medias Rojas le han permitido usar el No. 24 a Manny Ramírez y David Price, entre otros.
Marchand: Me parece una locura. ¿Por qué no está retirado el número de Evans? Sí, claro, los Medias Rojas son mucho más estrictos con respecto a ese ritual en particular, comparados con los Yankees. Pienso que el número de Williams mereció ser retirado. Cierto, no está en el Salón de la Fama, pero tiene mejor nivel de lo que uno podría creer, revisando la historia, y sin duda es un Yankee legendario. Me parece loco que el número de Evans ha podido ser usado nuevamente. Quizás podrían retirar el número 24 para los tres que lo han usado. Bien, quizás para dos de tres, supongo.
Si le pasó a Joe Torre, ¿por qué no a Terry Francona?
Lauber: Hora de un exámen sorpresa. ¿Que número usó Francona durante sus ocho años como manager de los Medias Rojas? Tito tuvo marca de 774-552 con Boston, cinco apariciones en los playoff y dos coronas de Serie Mundial, incluyendo el fin de la maldición en 2004. Igualmente, usaba un pullover de mangas largas en vez de su camiseta con el número 47 debido a problemas circulatorios. Eso no detendría a los Yankees. ¿No usaste uniforme? No hay problema. ¿El Parque de los Monumentos aún tendría espacio para tí?
Marchand: Este debate es más complicado. Francona no fue Torre (el líder de una dinastía) pero Torre no acabó con una maldición legendaria. Puedo entender el por qué homenajear a Francona, habiendo sabido que él no salió de Fenway por la puerta grande. Los Yankees y Torre tampoco rompieron de forma amistosa. Sin embargo, después que hicieron las paces, Torre fue inmortalizado como manager miembro del Salón de la Fama, con su lugar en el Parque de los Monumentos.
Si le pasó a Don Mattingly, ¿por qué no a Nomar Garciaparra?
Lauber: Al igual que Mattingly, Garciaparra tuvo un corto periodo en el cual estuvo entre los mejores jugadores del béisbol. Al igual que Mattingly, Garciaparra no ganó una Serie Mundial. Sin embargo, ahí terminan las similtudes. "Donnie Baseball" fue el capitán de los Yankees y una figura adorada en la historia de la franquicia. Los Medias Rojas cambiaron a "Nomah" a mediados de su histórica temporada de 2004. ¿Cómo puede ser merecedor del retiro de su camiseta un jugador cuya salida significó un punto de mejoría de su equipo? Hasta para los Yankees, eso le quitaría el encanto.
Marchand: Donnie Baseball es muy querido. Es como el Padrino de la Dinastía de los Yankees, quien enseñó a un joven Derek Jeter como correr apropiadamente en las bases. Aparte de ello, Mattingly fue el mejor jugador del béisbol mayor por un corto (pero distinguido) periodo. No es miembro del Salón de la Fama, pero es un jugador que permaneció durante toda su carrera con un sólo equipo y aún sigue siendo muy respetado en toda Nueva York.
Si le pasó a Ron Guidry, ¿por qué no a Luis Tiant?
Lauber: Hablamos de dos lanzadores que supieron combinar la elegancia y la sustancia. Los aficionados de los Yankees aún cargan el resentimiento de ver a Jim Rice, y no a Guidry, ser designado el Más Valioso de la Liga Americana en 1978. Pero no se puede negar que "el Relámpago de Luisiana" fue un espectáculo, con su forma de alzar la pierna y la manera en la cual rebotaba en la loma. "El Tiante" tenía un pico más alto e igual dosis de elegancia, dándole la espalda al plato antes de hacer sus envíos. Por eso solo, llegaría al Parque de los Monumentos. Sin embargo, el haber sido uno de los mejores pitchers en la historia de los Medias Rojas debe ser motivo suficiente para un homenaje.
Marchand: Quizás ya es hora que la gente en Boston supere una carrera por el Más Valioso que ocurrió hace casi cuatro décadas, pero parece que algunos no pueden dejar el pasado en el pasado. Me gustaba el estilo de Tiant, por ende, le daría el honor del retiro de su camiseta.
Si le pasó a Babe Ruth, ¿por qué no a Babe Ruth?
Lauber: La carrera de "El Babe" en Boston fue previa a los números en los uniformes. Entonces, ¿por qué no retirar un perro caliente (y no cualquier perro caliente, un Fenway Frank) en su honor? Así lo hubieran hecho los Yankees.
Marchand: Los Medias Rojas debieran retirar "No, No, Nannette" (la obra teatral financiada, según indica la leyenda, por el lucro causado al traspasar los derechos de Ruth de Boston a Nueva York). Miren, "El Babe" fue gran parte de la historia de los Medias Rojas (y no olvidemos, que su impacto fue positivo), por ende, tener una marquesina en algún muro de Fenway sería justo.