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El primera base de los Tigres de Detroit Miguel Cabrera fue suspendido por siete partidos por incitar la primera pelea y por lanzar golpes en el partido del jueves ante los Yankees de Nueva York en el Comerica Park, según anunció este viernes las Grandes Ligas. Por su parte, el receptor de los Yankees Gary Sánchez fue suspendido por cuatro juegos por pelear y lanzar golpes. El lanzador de los Tigres Alex Wilson también recibió cuatro juegos de suspensión por lanzarle un pelotazo de forma intencional a Todd Frazier de los Yankees luego de haber sido emitidas las advertencias de rigor por parte de los árbitros a ambos bandos. El receptor de los Yankees Austin Romine fue sancionado con dos partidos por pelea y lanzar golpes. Tanto Sánchez como Romine dijeron que esperan apelar los castigos. Y el manager de los Tigres Brad Ausmus fue disciplinado y tendrá que cumplir un partido de castigo por las acciones intencionales de Wilson mientras estaban en vigor las advertencias. Los castigos también incluyen multas a los jugadores suspendidos. Por su parte, el manager de los Yankees Joe Girardi, el coach de la banca Rob Thomson, el jardinero de los Yankees Brett Gardner, el lanzador Tommy Kahnle y el torpedero de los Tigres José Iglesias fueron multados por sus acciones durante los incidentes. En adición, dos miembros de los Yankees, el primera base Garrett Cooper y el jardinero Clint Frazier fueron multados por entrar al terreno mientras están en la lista de lesionados. El abridor de los Tigres Michael Fulmer comenzó los altercados al golpear a Sánchez en el siguiente turno luego que este le conectara cuadrangular. Fulmer no fue suspendido ni multado. Girardi sonrió ligeramente cuando se le preguntó si pensaba que era apropiado que Fulmer no fuese sancionado. El manager declinó responder la pregunta. El incidente inicial ocurrió cuando Cabrera y Romine pelearon en el plato, llevando a que se vaciaran las bancas en la sexta entrada. La pelea fue parte de un día loco de golpes y pelotazos entre ambos bandos. Ambos jugadores fueron expulsados, pero no estuvieron solos. En incidentes separados, Girardo y Kahnle fueron expulsados en la sexta entrada, Thomson y el relevista Dellin Betances fueron sacados en la séptima, y Ausmus y Wilson en la octava. Sánchez ha sido criticado por lo que se percibió que fueron golpes a traición cuando golpeó a Cabrera y Nicholas Castellanos, en momentos en los que no podían defenderse. El miembro del Salón de la Fama Pedro Martinez, quien una vez lanzó al suelo al entonces coach de los Yankees Don Zimmer durante una pelea, dijo que Sánchez "podría ser malamente recordado por esto por mucho tiempo". "Él tiene derecho a su opinión", dijo Sánchez. "Si eso es lo que siente, eso es él". Una serie de eventos llevaron a Cabrera y Romine a enfrentarse en la sexta. Cabrera hizo la primera movida al empujar a Romine en el pecho y lanzándole un golpe. "Todavía pienso que me estaba defendiendo", dijo Romine. "Obviamente, lo vamos a apelar". Girardi dijo que los Yankees podrían intentar demorar o escalonar las suspensiones para no perder de forma simultánea a Sánchez o Romine. Girardi dijo que no sabía quien sería utilizado como receptor sustituto cuando Sánchez y Romine estén fuera. El mejor receptor de los Yankees en liga menor es Kyle Higashioka. Justo antes de la pelea, el relevista de los Yankees Kahnle había lanzado un pitcheo que pasó por detrás de Cabrera. Kahnle fue inmediatamente expulsado de juego por el árbitro Carlos Torres. Esto molestó al manager de los Yankees Joe Girardi, quien salió corriendo del dugout visitante. Girardi montó una escena, pateando el suelo y argumentando que la expulsión había sido injusta. Girardi dijo que los árbitros no estaban entendiendo el juego. Lo que pareció enfurecer más a Girardi fue el hecho que el abridor de los Tigres Michael Fulmer se quedó en el partido luego de golpear a Sánchez en la cadera en la quinta entrada. Una entrada antes, en la cuarta, Sánchez le conectó cuadrangular a Fulmer. En la séptima entrada, las expulsiones continuaron, ya que Betances fue sacado de juego luego de golpear al jugador de los Tigres James McCann con una recta de 98 mph. Betances fue sacado del partido luego de la discusión montada por el manager de Detroit Brad Ausmus. Esto llevó a que Thomson, quien era el manager sustituto de los Yankees ante la salida de Girardi, perdiera los estribos, siendo también sacado de juego. En la octava, Wilson de los Tigres golpeó a Frazier cerca de su cadera izquierda. Wilson fue expulsado, junto con Ausmus. Ambas bancas se volvieron a vaciar, y aunque hubo algunos empujones, no se lanzaron más golpes.
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