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Enrique Rojas | ESPN Digital 6y

David Peralta reflexiona sobre ser padre y la ayuda de su papá para llegar a las Mayores

En su primer Día de los Padres como papá, David Peralta tiene un mejor contexto para reflexionar sobre todo lo que hizo su progenitor para ayudar a convertir un antiguo lanzador de ligas menores con dos operaciones de hombro en uno de los bateadores más productivos de los Diamondbacks de Arizona en las Grandes Ligas.

"A todo el mundo le cambia la vida cuando le nace un hijo", dijo Peralta a ESPN Digital.

"Le pregunté a muchas personas y mis compañeros me decían que la vida me cambiaría, para bien. Cuando vi nacer a mi hija me cambió todo. Es la responsabilidad más grande que he tenido en mi vida, luchar por ella. Es algo inexplicable", agregó el pelotero venezolano.

David II y Jordan Peralta son los padres de Sofía Elizabeth, de nueve meses. David, el jardinero y toletero de los Diamondbacks, es el hijo de David I y Diocelina Peralta. El día del padres es una celebración muy importante para la familia Peralta, por muchas razones.

"Somos muy unidos. Mi papá tenía una escuela de béisbol en Valencia y además de ser un gran padre, fue mi mánager en pequeñas ligas y quien me guió hasta llegar al profesionalismo. Siempre ha estado para mí, como papá y como entrenador", dijo Peralta.

Peralta era un jardinero de 17 años cuando los Cardenales de San Luis decidieron firmarlo, en septiembre del 2004, pero con la condición de que se convirtiera en lanzador. El chico tenía buen brazo y era zurdo, los buscalatentos pensaron que tenía más futuro como pitcher. Para un adolescente venezolano, la oportunidad de ser profesional era más importante que la posición.

El proyecto fracasó después de 18 juegos y dos operaciones del hombro en cinco años. Los Cardenales dejaron libre al chico en 2009. De regreso a sus orígenes, David padre se puso a trabajar duro para recuperar al jardinero perdido en el pitcher lesionado y fracasado que era su hijo.

La gran dedicación de los Peralta comenzó a rendir frutos en 2011, cuando el chico, ahora con 23 años, recibió una oportunidad del equipo Rio Grande Valley de la Liga Norteamericana, un circuito independiente que apenas tuvo tres años de existencia (2010-12). Peralta trabajó en un McDonalds, durmió en un colchón de aire y a veces en un viejo auto en su primera temporada con Rio Grande Valley.

Después de probarse con varios equipos, mientras seguía jugando en equipos semiprofesionales, Peralta recibió una oportunidad de regresar a la pelota organizada de Estados Unidos, en julio del 2013, con un contrato de ligas menores de los Diamondbacks.

"El béisbol y la vida es cuestión de oportunidades. Gracias a Dios y la vida por esta segunda oportunidad. Cuando cambié de pitcher a jardinero tuve que trabajar sin descanso, sacrificando tiempo con la familia y cosas buenas", dijo Peralta.

"El apoyo de los míos fue grandioso y vital. No lo habría logrado sin ellos, mis padres y mi novia, que ahora es mi esposa", agregó.

Peralta bateó .346 en 51 partidos en Clase A en 2013 y bateaba .297 en 57 juegos en Doble A en 2014, cuando fue llamado al equipo grande. Y llegó para quedarse. El venezolano batea .291, con 88 dobles, 57 jonrones, 29 triples y 27 bases robadas en 488 partidos desde su debut con Arizona.

En el 2017, Pertalta fue electo como el representante de los Diamondbacks para el Premio Marvin Miller, un reconocimiento de la Asociación de Peloteros de Grandes Ligas con el nombre de su primer director ejecutivo y que destaca al jugador "cuyo desempeño en el campo y las contribuciones a su comunidad inspiran a otros a niveles más altos de logros".

En el 2018, ha sido el bateador más completo de un equipo que entró al Día de los Padres liderando la División Oeste de la Liga Nacional con marca de 39-31 y 1.5 juegos de ventaja sobre los Dodgers de Los Ángeles.

"El béisbol no es para siempre. Desde que firmé con Arizona me propuse que me iba a asegurar de trabajar duro todos los días para cuando llegara la oportunidad. Si no se daba, perfecto, pero no sería por no estar preparado", dijo Peralta, quien lidera a los "DBacks" esta temporada en promedio (.279), hits (69) y jonrones (14). El valenciano también es segundo en carreras remolcadas (36), anotadas (33) y OPS (.848) y tercero en WAR (1.3).

Cerca de cumplir 31 años de edad, David Peralta se encuentra en el mejor momento de su vida. En lo personal y lo profesional.

"Estoy jugando en Grandes Ligas, tengo padres adorables, una bella esposa y soy padre. No tengo una sola razón para quejarme de la vida. Doy gracias a Dios todos los días", dijo Peralta.

"A veces digo a mis padres que ahora entiedo todas esas preocupaciones, atenciones, emociones, alegrías y tristezas por cada cosa que me pasaba. Ser padre es el sentimiento más bello y hermoso que uno puede llegar a sentir", agregó.

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