PITTSBURGH -- Parecía lo más apropiado que los Chicago Cubs completaran su victoria 1-0 sobre los Pittsburgh Pirates el viernes al convertir un doble play para finalizar el juego, ya que era el séptimo de la noche, empatando un récord de Grandes Ligas.
"Normalmente no ves eso. No recuerdo nada así", dijo el manager Joe Maddon.
Según Elias Sports Bureau, los Cachorros se unieron a los Yankees de 1942 y los Astros de 1969 como los únicos tres equipos en registrar siete doble plays en un juego de nueve entradas. Los Cachorros obtuvieron los suyos en seis bolas por tierra y uno tras una línea. El abridor Cole Hamels indujo a cinco de ellos mientras alcanzaba un total de 21 doble plays en la temporada, el más alto de su carrera.
"Es sorprendente cuántos pudimos obtener", dijo Hamels. "Son el mejor amigo de un lanzador".
Hamels hizo el lanzamiento correcto en el momento correcto durante toda la noche, induciendo un doble play en cada una de las primeras cuatro entradas y uno más en la sexta. Lanzó siete entradas sin permitir carreras, mientras que redujo su efectividad como Cachorro a un minúsculo 0.72.
"Él tiene esta manera de ser", dijo Maddon. "Está totalmente comprometido e involucrado en el momento, pero luego puede desconectarse por un segundo si necesitas hablar con él y él puede sonreír. Luego vuelve directamente al personaje. Es una buena forma de ser. Creo que es saludable".
Los Cachorros ganaron dos juegos seguidos con marcador de 1-0 por primera vez desde 1973, pero fue la primera vez en la historia de la franquicia en ganar ambos juegos con jonrones solitarios. Kyle Schwarber la voló el viernes para ayudar a los Cachorros a su primera racha de tres victorias desde el receso del Juego de Estrellas. El récord de franquicia de doble plays también ayudó a los Cachorros a extender su ventaja en la Liga Nacional Central a 4 1/2 juegos.
"Estábamos en un buen lugar todo el tiempo", dijo Maddon. "Dimos vuelta a los que se suponía que debíamos. No les dimos outs adicionales".
Los nueve doble plays combinados entre los equipos empataron el récord de la era moderna de la Liga Nacional en un juego de nueve entradas. El relevista Jesse Chávez indujo al último, con las potenciales carreras del empate y ganadora en base. David Freese bateó un roletazo al antesalista David Bote, quien pisó la tercera base y lanzó a primera para la victoria.
"No sabía que era el séptimo", dijo Bote con una sonrisa. "Eso es muy agradable".