LAS VEGAS - Dave Martínez aún no está listo para decirle adiós a Bryce Harper.
El dirigente de los Washington Nationals sabe muy bien que Harper posiblemente recibirá la oferta más lucrativa entre los más de 150 agentes libres existentes en el béisbol de Grandes Ligas en la actualidad.
De todas maneras, el manager afirmó, al igual que lo ha hecho el gerente general Mike Rizzo, que todavía existe la posibilidad de regreso para el jardinero, sin duda la estrella de mayor envergadura de los Nacionales desde su debut con apenas 19 años en 2012.
"Como saben, Bryce y yo tenemos una relación muy especial; lo quiero a morir", sentenció Martínez. "Y escuché a Rizzo decir eso, y siento lo mismo, de ninguna manera la puerta está cerrada para Bryce".
El cotizado jardinero de 26 años ya es considerado un "veterano" de seis apariciones al Juego de Estrellas, acumulando con 184 jonrones, 521 carreras impulsadas y un OPS de .900 a través de sus siete temporadas con los Nacionales.
Varios equipos están programados para reunirse en persona con Harper y su agente Scott Boras esta semana. No obstante, lo harán fuera de los predios del Mandalay Bay Resort & Casino, donde se celebran las reuniones invernales de Grandes Ligas, ya que Las Vegas es la ciudad natal y de residencia del Jugador Más Valioso de la Liga Nacional en 2015.
El propietario de los Nacionales, Mark Lerner, había afirmado ante la prensa la semana anterior que anticipaba que Harper firmara con otro equipo. Eso llevó a Rizzo a tener que explicar cómo la posición de Lerner afectaría cualquier negociación con Harper.
El mensaje de Rizzo en estas reuniones invernales en Las Vegas ha sido mucho menos definitivo que el que proyectó el dueño del equipo el pasado viernes. Curiosamente, Rizzo también dijo que los Nacionales no tenían (hasta el momento) ninguna reunión programada con Harper o sus representantes.
"No le di mucha importancia", explicó Rizzo al abordar los comentarios de Lerner. "Le pidieron a Mark que especulara sobre el futuro de Harp y, lo único que he aprendido haciendo este trabajo durante mucho tiempo, es que nunca especulo sobre los agentes libres, de dónde van a firmar y o cuánto dinero le van a dar. Es demasiado difícil porque hay muchos factores involucrados".
"No sé qué sucederá. Mark Lerner no sabe. Bryce Harper no sabe realmente con qué equipo va a firmar", continuó Rizzo. "(Lerner) habló de corazón y dijo lo que pensaba. Pero es sólo especulación. No voy a especular. Todavía es temprano en el proceso. Las puertas nunca están cerradas".
"No voy a decir que vamos a perder a Harp, porque la puerta aún está abierta. Él tiene que tomar una decisión muy grande. En última instancia, es su decisión. Sé lo que siente por sus compañeros de equipo, sé lo que siente por Washington, pero es una decisión difícil que debe tomar para él y para su familia" Dave Martínez, sobre Bryce Harper
El súper agente Scott Boras está programado para encontrarse con los medios la tarde del miércoles en Las Vegas, donde sin duda la mayor cantidad de preguntas girará en torno al futuro de Harper.
Durante las pasadas reuniones de los gerentes generales de Grandes Ligas, celebradas en Carlsbad, California a principios de noviembre, Rizzo habló de sus conversaciones con Boras y de la oferta que le hicieron a Harper al final de la temporada en un intento de llegar a un acuerdo antes de convertirse en agente libre.
Según informes, la oferta fue por cerca de 10 años y $300 millones de dólares, pero expiró una vez no se llegó a un acuerdo antes que los Nacionales no tuvieran derechos exclusivos de negociación.
Al igual que Machado, se anticipa que Harper firme un contrato con un valor por encima de los $300 millones. Se ha reportado que los Philadelphia Phillies y los los St. Louis Cardinales han expresado interés en sus servicios.
"No voy a decir que vamos a perder a Harp, porque la puerta aún está abierta", agregó Martínez. "Él tiene que tomar una decisión muy grande. En última instancia, es su decisión. Y es duro. Sé lo que siente por sus compañeros de equipo, sé lo que siente por Washington, pero es una decisión difícil que debe tomar para él y para su familia".
"Bryce y yo tenemos una relación muy, muy especial", continuó el dirigente de raíces puertorriqueñas. "Y no, todavía no lo veo sin (nuestro) uniforme. Como dijo Rizzo anteriormente, la puerta todavía está abierta. No sabemos qué va a pasar. Él tiene que tomar una decisión difícil; todos lo sabemos. Pero la decisión es suya".