<
>

Mariano Rivera acepta con humildad su entrada perfecta a Cooperstown

Minutos después de ser el primer beisbolista de la historia que entra al Salón de la Fama de manera unánime, el panameño Mariano Rivera aceptó el honor con la misma humildad y dignidad que lució a lo largo de su legendaria y exitosa carrera de dos décadas con los Yankees de Nueva York.

''Para mí es un honor, un placer'', dijo Rivera a ESPN Digital el martes. ''Todo atleta quiere conseguir algo como esto. Siendo el primer beisbolista y siendo un latinoamericano y un panameño, es un honor. Me siento agradecido de Dios que me dio la oportunidad de estar saludable para conseguir esto'', agregó.

''El béisbol es más grande que cualquier jugador y siempre hay que tener eso en cuenta'', apuntó el lanzador panameño de 49 años de edad.

''Mariano fue un feroz competidor y un humilde campeón, lo que lo ha convertido en una leyenda del béisbol tan querida. El éxito y el estrellato nunca cambiaron a Mariano, y su respeto por el juego, el uniforme de rayas y sus compañeros de equipo y oponentes por igual hacen de este día una celebración de su legado'', dijo Hal Steinbrenner, uno de los dueños principales de los Yankees.

''Habrá muchos más grandes y talentosos lanzadores de relevo, pero nunca habrá otro como él. Este es otro logro increíble para Mariano, y un día como hoy me llena de orgullo saber que usó el uniforme rayado para todos y cada uno de los juegos de su extraordinaria carrera'', agregó el ejecutivo.

Rivera, quien fue nombrado en las 425 boletas de la Asociación de Escritores de Béisbol de América (BBWAA), fue electo al Salón de la Fama junto al bateador designado puertorriqueño Edgar Martínez y los lanzadores norteamericanos Roy Halladay y Mike Mussina para ser exhaltados en la ceremonia del próximo 22 de julio en Cooperstown, Nueva York.

Por primera vez en su historia de 83 años votando para el pabellón de los inmortales, los escritores eligen a alguien de manera unánime. El jardinero Ken Griffey Jr. tenía el récord de votación más alta, con el 99.32% que recibió en el 2016.

El fenecido Halladay y Martínez recibieron 363 votos para un 85.4%, mientras que Mussina fue marcado en 326 papeletas para un 76.7%. Halladay y Rivera aparecieron en la boleta por primera vez, Mussina por sexta ocasión y Martínez por décima y última oportunidad.

''Cuando terminó mi carrera pensé que tendría alguna oportunidad de llegar al Salón de la Fama, pero imaginar en hacerlo unánime es otra cosa, porque en Grandes Ligas hemos tenido tantos buenos jugadores y nadie lo había conseguido. Entrar al Salón de la Fama es un gran honor, pero hacerlo de forma unánime es un reconocimiento increíble'', dijo.

''Es asombroso. Gracias a Dios por haberme dejado tener una carrera tan bella y tan larga, en la mejor organización del béisbol, los Yankees, y finalizar con algo como esto es asombroso'', dijo Rivera, el último pelotero de las ligas mayores que usó el número 42, retirado por la oficina del comisionado en de 1997 en honor a Jackie Robinson, el afroamericano que quebró la barrera racial en 1947.

''Vestí el número 42 en honor a Jackie Robinson y ser el primero unánime es asombroso'', dijo Rivera.

''Impresiona pensar en el increíble viaje que Mariano ha realizado a lo largo de su vida: sus inicios sin pretensiones en un pueblo de pescadores panameños para lanzar con los Yankees, bajo las luces más brillantes y la atención de todo el mundo. Hablo por todos los fanáticos de los Yankees cuando digo que tuvimos la suerte de haberlo tenido de nuestro lado durante tanto tiempo'', dijo Brian Cashman, el gerente general de Nueva York.

Rivera, el líder de salvamentos (652) de todos los tiempos, también ha sido uno de los pitchers más dominantes de la historia en temporada regular y playoffs, donde tuvo foja de 8-1, efectividad de 0.70 y 110 ponches en 141.2 IL, incluyendo 11 rescates y efectividad de 0.99 en 24 apariciones de Serie Mundial.

El 13 veces Todos Estrellas y miembro de cinco ediciones de los Yankees que ganaron el clásico de otoño, fue electo Jugador Más Valioso de la Serie Mundial de 1999 y de la Serie de Campeonato de la Liga Americana del 2003.

''No hay palabras para agradecer lo que Dios ha hecho por mí en estos momentos'', dijo Rivera. ''Me siento humilde por mí y por mi país, Panamá. En Panamá están celebrando a su segundo jugador en el Salón de Panamá. Esto pertenece a Panamá'', dijo Rivera.

Por primera vez, dos latinoamericanos consiguen su boleto a Cooperstown por vía de la BBWAA al mismo tiempo. En el 2006, cuando el Salón de la Fama armó un comité especial para investigar las Ligas Negras que funcionaron en Estados Unidos antes que las Grandes Ligas aceptaran personas de color (desde 1949 en adelante), los fallecidos jugadores cubanos Cristóbal Torriente y José Méndez y el ejecutivo cubano Alex Pompez entraron a Cooperstown, junto a otras 13 figuras de ese béisbol alterno.

Con Rivera y Martínez aumenta a 11 la cifra de jugadores latinos de las Ligas Mayores que alcanzan el Salón de la Fama. El exclusivo club está integrado por los puertorriqueños Roberto Clemente (1973), Orlando Cepeda (1999, vía Comité de Veteranos), Roberto Alomar (2011), Iván Rodríguez (2016) y Martínez (2019); los dominicanos Juan Marichal (1983), Pedro Martínez (2015) y Vladimir Guerrero (2017; el venezolano Luis Aparicio (1984), el panameño Rod Carew (1991) y el cubano Tany Pérez (2000).

Pocos peloteros han sido respetados en la industria como Mariano Rivera y su ingreso a Cooperstown con votación perfecta es solamente una gran muestra de ello.

''Jugando en los patios y las playas de Panamá aprendí a respetar a los demás. Siempre quería ser el mejor, pero sin hacer sentir mal o molestar a nadie. Creo que ese respeto para tratar a los otros me ayudó a caminar más fácil en el béisbol'', dijo Rivera.