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Conoce al 'Pequeño Trout', el fan de 7 años de Mike Trout que viste como él todos los días

CUANDO GAVIN EDELSON se dirige a la clase de primer grado de la señorita Beever cada mañana, es sumamente probable que esté vistiendo uno de sus “trajes de Trout”. Así es como le dicen su mamá y papá. Tiene la camiseta blanca, la roja y la gris y la del Juego de Estrellas, la que tiene el apodo de Mike Trout en la espalda, la cual quizás sea la más fantástica de todas, porque es probable que otros niños de 7 años no sean tan aficionados al béisbol como para conocer su apodo. Ahora que lo vemos bien, Gavin conoce muchísimo sobre Trout.

“Pregúntame”, nos dijo y… accedemos. ¿Dónde nació Trout?

“Millville, Nueva Jersey”, responde Gavin.

¿Cuándo es su cumpleaños?

“El 7 de agosto”, respondió.

No esperó a la próxima pregunta.

“¿Quieres que te diga el nombre de su esposa?”, nos dijo. “Jessica”.

El niño estaba encendido.

“Lo sé todo”, dijo Gavin. “Cada noche antes de dormir, leo un libro sobre Mike Trout. Y ahorita, estoy vistiendo una camiseta de Trout. La roja. Cada vez que voy a una cena elegante, me hacen utilizar una camisa con cuello. Solo quiero usar una camiseta de Mike Trout”.

En su habitación, tiene los muñecos bobblehead, los figurines, el desastre de barajitas de béisbol, todo lo que forma parte del pequeño altar dedicado a Mike Trout. No importa que Trout juegue con Los Angeles Angels y Gavin resida en los suburbios de Baltimore. Cada mañana, Jason y Julie Edelson se despiertan al escuchar a su hijo menor irrumpir para sintonizar MLB Network y ver cómo le fue a Trout en la noche anterior.

Si bien el pequeño Gavin adora mañanas así, Gavin sin duda alguna vive para la serie anual en la cual los Angels juegan en Baltimore. La serie se inicia a las 7:05 p.m. hora local del viernes, aunque para Gavin comenzará un poco antes. Se dirigirá al Camden Yards antes del partido, apropiadamente vestido de Trout, aspirando que el viernes se asemeje mucho al 29 de junio de 2018.

“Lo recuerdo como el mejor día de mi vida”, dijo Gavin. “Porque pude compartir con Mike Trout”.

DESDE EL PRIMER MOMENTO en el cual Gavin Edelson vio a Mike Trout, sintió una afinidad. Corría el año de 2015. Tenía 3 años. Su hermano mayor Jake siempre parecía sacar barajitas de Trout de cualquier paquete que compraba y para el cumpleaños de Jake, Jason y Julie llevaron a su familia a ver un partido entre Angels y Orioles en el Camden Yards. Se sentaron en la cuarta fila en la tribuna por el lado de visitantes, justo detrás del círculo de espera. Mientras Trout se preparaba para tomar turno al bate, Gavin comenzó a imitar todos y cada uno de los movimientos de Trout.

Qué lindo se veía, pensaron sus padres. No podían imaginarse cómo terminaría todo esto. Gavin quería ser como Trout. A la mañana siguiente, se despertó y vistió una camiseta de color rojo, pantalones grises y medias rojas. Luego, recibió una camiseta y pantalones de béisbol y pasó sus días caminando y haciendo swing como Trout, un perfecto simulacro en tamaño pequeño. Cuando los Edelson volvieron al Camden Yards para ver a un partido de los Angels dos años después, Gavin cargaba una pancarta en la cual se leía: EL FANÁTICO NÚMERO 1 DE MIKE TROUT.

Adquirieron boletos para el jardín central. Los aficionados que rodeaban a los Edelson le gritaron a Trout para que éste hiciera un gesto a Gavin. Así lo hizo y le lanzó una pelota. Regresaron al estadio al día siguiente, a los mismos asientos que usaron dos años antes, cerca del dugout de los Angels. Dino Ebel, quien en ese entonces fungía como coach de banca de los Angels, vio a Gavin y se lo señaló a Trout. El jugador pidió la pancarta y la autografió. Mientras abandonaba el terreno luego de conectar par de jonrones, lanzó un guante de bateo en dirección a Gavin. La pelota, la pancarta, el guante… no había nada mejor.

Los Angels regresron a Baltimore en 2018. Jason se hizo con pases para ver la práctica de bateo en el terreno. Ebel fue la primera persona en salir del dugout de los Angels. Jason preguntó si se acordaba de Gavin. “Por supuesto”, respondió Ebel. Le agradecieron por todo lo que hizo en 2017. Ebel dijo que vería qué podría hacer por ellos este año.

Los Angels comenzaron a hacer sus estiramientos por los lados de la línea de tercera base. Trout estaba ubicado cerca de Albert Pujols, Kole Calhoun y Luis Valbuena. Inmediatamente vio a Gavin y le saludó con un gesto. Jason le preguntó a Julie: “¿Se está dirigiendo a nosotros?”. Apuntó a Gavin quien le respondió a Trout con el mismo gesto. El pelotero asintió.

“Lo vi, vistiendo mi camiseta y creo que es el sueño de cualquier poder compartir con peloteros de Grandes Ligas”, expresó Trout en una entrevista efectuada la semana pasada. “Pensé que fue algo muy bonito. Pensé que seria una gran experiencia para él. Mantendrá ese recuerdo por siempre y se lo dirá a todos sus amigos. Hay que aprovechar cualquier oportunidad para alegrar el día de un niño… uno no sabe por lo que están pasando. Antes de eso, ni le conocía. Sólo el hecho de interactuar con los chicos, llevarlo al terreno, que pueda ver la práctica de bateo… creo que es algo especial para él”.

Al inicio, según recuerda Trout, Gavin “era tímido, pero luego de un par de minutos, comenzó a hablar con nosotros. Comenzamos a hablar con él para hacerle sentirse cómodo. Obviamente no quieres hacer que se sienta muy abrumado”.

Ya era demasiado tarde. Gavin, quien rara vez se queda sin palabras, se había quedado mudo. Estaba al lado de Mike Trout. Haciendo estiramientos con Mike Trout. Y hablando sobre el clima con Mike Trout.

“Aquí tienes a quien es, de lejos, el mejor jugador de todo el béisbol”, dijo Jason, a quien le temblaban las manos mientras grababa el respectivo video. “Y probablemente termine siendo el mejor de la historia. Y deja lo que está haciendo para tener gestos así con los niños. No solo se trato de buscar al niño y hacer que lo viera jugar. Conversa con el niño, se ríe con él, está hablando con él”.

Luego de aproximadamente 15 minutos, Gavin se sintió con suficiente confianza como para pedirle a Trout su bat después de la práctica de bateo. Claro que sí, respondió Trout, y ese bat ahora es el artículo más destacado en su pequeño altar. Totalmente alentado, Gavin le preguntó una cosa más a Trout antes de volver con sus padres: si Trout podía batear un jonrón por él esa noche.

“Lo intentaré”, respondió Mike Trout y luego, en el primer inning, con el tercer pitcheo que vio esa noche, Trout depositó una recta enviada por David Hess a 408 pies de distancia en las tribunas del jardín central. Eventualmente, las imágenes del encuentro entre Trout y el infante surgieron luego de que el comisionado Rob Manfred, durante las festividades del Juego de Estrellas, cuestionó las intenciones de Trout de mercadear su imagen. Eddie Matz, periodista de ESPN, subió a Twitter varias fotos y un video de Gavin y Trout y sirvieron como recordatorio de que el mejor pelotero del mundo no tenía obligación de reconocer la presencia del niño y mucho menos de compartir con él. Sin embargo, así lo hizo y esto dice mucho más de él de lo que podrían expresar los mejores comerciales de televisión.

“No hay mejor forma de mercadear la imagen de Mike Trout”, dijo Jason, “que mostrar lo hecho por él ese día”.

AMALIA BEEVER no es gran aficionada al béisbol; sin embargo, ha aprendido un hecho de este deporte durante el año escolar 2018-19.

“Sé que Mike Trout es absolutamente asombroso”, expresó.

La educadora lo sabe porque en su trabajo como la señorita Beever, maestra de primer grado, debe leer y evaluar las tareas de Gavin Edelson. Y si hay una asignación de redactar algún ensayo en la clase de la señorita Beever, es lo más probable que Gavin aproveche la oportunidad para evocar las proezas de Trout.

A la señorita Beever le encantaron las barajitas de béisbol obsequiadas por Gavin en conmemoración del Día de San Valentín. Hechas por encargo por la empresa Topps, tenían la foto del pequeño junto a Trout. La compañía rechazó la idea en un principio porque tenía la imagen de un pelotero activo, recuerda Jason; sin embargo, no desistió y llamó a la Asociación de Peloteros del Béisbol de Grandes Ligas, organización sindical que maneja los derechos de imagen de los jugadores de la pelota Mayor; pidiéndoles permiso para utilizar la foto considerando que la cuenta de Twitter oficial de Major League Baseball la había publicado previamente. El sindicato concedió la petición.

Gavin llega a la escuela y les cuenta a sus amigos sobre su juego en el campocorto contra otros chicos de 8 y 9 años y cómo su swing era igual al de su amigo Mike Trout. El estante de libros de la señorita Beever no contaba con muchos libros sobre béisbol. Por eso, ella compró todos los que vio y se aseguró de decirle a Gavin que ella contaba con una nueva selección de tomos que él podía disfrutar.

“Él es muy respetuoso, muy trabajador, muy útil. Es un gran amigo”, dijo Beever. “Realmente es un chico muy dulce”. Ella pudo ver esa franqueza no solo en los actos de Gavin, sino también en sus palabras. El año pasado, el niño le escribió una carta a Trout que le entregó en el terreno. Este año, redactó una nueva misiva, adhirió la barajita de Mike Trout y Gavin Edelson en la parte superior y ahora aspira que la lluvia pronosticada para Baltimore durante el partido del viernes termine cayendo en otra dirección. Porque realmente quiere que su héroe pueda comprender lo que siente por él.

El reportero multimedia de ESPN, Alden González. contribuyó en esta historia.