El duelo tuvo lugar antes del quinto juego de la serie de siete partidos que disputan astros de la grandes ligas y figuras de la pelota japonesa.

Dos de los tablazos de Bonds rebotaron contra un enorme cartel publicitario sobre las gradas del jardín derecho.

"Fue lindo batirme con Matsui. Espero que nos volvamos a encontrar en los Estados Unidos", declaró Bonds.

Matsui está negociando su posible incorporación a alguna novena de las grandes ligas.

Luego de la primera tanda de diez batazos, Bonds se acercó a Matsui, le dio unos masajes en los hombros y le dijo que se tranquilizase. El consejo rindió dividendos, ya que en su segunda tanda Matsui pegó cuatro jonrones, incluido uno a lo alto de las graderías del jardín derecho.

"Al menos pegué cinco. Ocho a cinco no me parece nada mal", comentó el jaopnés. "Admiro su potencia, sin duda (Bonds) es el mejor bateador del mundo. Me dijo que me calmase y que aflojase el hombro. Fue un día memorable para mí".

Bonds, quien había conectado tres jonrones en los primeros cuatro partidos de la serie, incluido uno con la casa llena, no disparó cuadrangulares en el quinto juego, pero produjo una carrera con un doble en el cuarto inning y colaboró en una victoria 4-0 de los estadounidenses.

Fue su segundo triunfo seguido luego de perder los primeros tres juegos.

Bonds le tiró al primer lanzamiento y remolcó a Paul Lo Duca desde la segunda base.

Un jonrón de Junior Spivey y un doble productor de Ichiro Suzuki pusieron la pizarra 3-0 en la quinta y un elevado de sacrificio de Pat Burrell reportó la última carrera en la octava.