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Venir de atrás, la especialidad de los Criollos de Puerto Rico

CULIACÁN -- Jugar contra las probabilidades y al borde de la eliminación sacó lo mejor de los Criollos de Caguas en las últimas cuatro semanas, comenzando en Puerto Rico y terminando en México. Dos trofeos de campeones son el mejor testimonio de eso.

Los Criollos puertorriqueños derrotaron 1-0 en 10 entradas a los Aguilas de Mexicali mexicanos en la gran final de la Serie del Caribe del 2017, el martes, en un emocionante y dramático partido celebrado a casa llena en el Estadio Tomateros de Culiacán, México.

Un elevado de sacrificio del receptor Jonathan Morales impulsó desde tercera base al torpedero Yadiel Rivera, quien comenzó la entrada con doblete contra el relevista Jake Sánchez (0-1), para producir la única anotación del encuentro y darle a Caguas su cuarto título caribeño, una semana después de coronarse por 17ma. ocasión en su país.

Puerto Rico ganó sus últimos tres encuentros, contra República Dominicana (Tigres del Licey), Venezuela (Aguilas del Zulia) y México para conseguir una hazaña que parecía imposible después que perdieron los primeros de la serie. Desde que la Serie del Caribe incorporó playoffs a su formato hace cinco años, dos equipos que solamente ganaron un encuentro en la primera ronda (el primero fue Pinar del Rio de Cuba en el 2015) y tres que no fueron líderes de triunfos, se coronaron campeones.

Estar abajo y recuperarse fue la marca registrada de Caguas en sus últimas tres series. Los Criollos estuvieron abajo 0-2 en la semifinal, ante los Indios de Mayaguez, y 2-3 en la final, frente a los Cangrejeros de Santurce, para sacudirse de ambos malos momentos y atrapar su primera corona de la Liga Puertorriqueña Roberto Clemente desde el 2013.

"De verdad que ha sido un año especial, de altas y bajas, de principio a fin", dijo el manager novato Luis Matos. "Este es un equipo especial que le gusta jugar contra la pared. Estos muchachos son especiales. Ellos hicieron el trabajo, yo solo moví las piezas", agregó el capataz.

"Después que perdimos el tercer juego, hice una reunión y les dije a los muchachos que no vine aquí a pasar bochorno, aunque sabía que nos gusta jugar contra la pared. Ese fue el juego clave", dijo Matos sobre el partido de vida o muerte del sábado contra los dominicanos.

Los Criollos atraparon el cuarto título de su historia (también en 1954, 1974 y 1987), el primero para Puerto Rico desde el 2000 y el #15 para la Isla del Encanto, la segunda mayor cantidad de la historia, solamente detrás de los 19 que suman los equipos de República Dominicana.

Con más de 19 mil fanáticos apoyando a Mexicali, hasta el martes el equipo más efectivo del torneo, los Criollos no se amilanaron para ganar su tercer partido decisivo consecutivo, tras comenzar perdiendo los primeros tres. Más de 130,000 aficionados pagaron boletas para presenciar en vivo una de los clásicos caribeños mejor organizado de los últimos tiempos y en el que los clubes mexicanos buscaban su quinto título en siete años.

Mexicali jugó encuentros consecutivos que terminaron (venció con esa pizarra al Granma de Cuba en las semifinales del lunes) y México volvió a disputar una final con extrainnings en su territorio. En el 2013 derrotó a República Dominicana en 18 entradas en Hermosillo.

"Ellos no tienen nada porque aborchonarse. Hicieron un gran trabajo", dijo Matos sobre el desempeño de las Aguilas, que con 4-2 tuvieron el mejor récord de la serie.

Las primeras seis entradas fueron un gran duelo de lanzadores entre los derechos Adalberto Flores (6 IL 1H 1BB) y Héctor Velázquez (6IL 5H 0BB 5K). Flores tuvo que dejar el juego luego de calentar para comenzar el séptimo inning, debido a una ampolla en su mano de tirar.

Los relevistas de ambos equipos siguieron colgando ceros hasta la conclusión de las nueve entradas regulares. Andrés Santiago (2IL) y Miguel Mejía (2IL) trabajaron cuatro episodios por Caguas, en tanto que los zurdos Tyler Alexander y Oliver Pérez hicieron igual por Mexicali.
Mejía (1-0) fue el lanzador ganador y Sánchez (0-1) el derrotado.

El antesalista David Vidal, quien bateó .417 con tres jonrones, cinco anotadas y cinco impulsadas, fue electo el Jugador Más Valioso. Vidal y el bateador designado Iván De Jesús integraron el equipo Todos Estrellas del torneo.

"Trabajamos mucho para que esto pasara. Trabajando y siempre mantenernos positivos, produjo un resultado", dijo Vidal, un jugador de 27 años que jugó en una liga independiente el verano pasado.

"Dios es grande y nos tenía guardado este regalo. Siempre recordaré haber sido parte del grupo que ayudó a que Caguas y Puerto Rico cortaran rachas largas de no ganar la Serie del Caribe", dijo Vidal.