LOS ÁNGELES -- Yon de Luisa ha vuelto a equivocarse. Tras la impopular y timorata postura después de los hechos trágicos en La Corregidora, no ha corregido el rumbo el presidente de la FMF. Eligió la arrogancia de embestir al iceberg.
Era de esperarse, tras el tsunami exacerbado de reacciones contra las decisiones de la #YuntaDeDueños (dixit Sven-Göran Eriksson), que Yon de Luisa tratará de pacificar la tormenta. En cambio, agitó los vientos.
Tras expedir un certificado de impunidad e inmunidad a las barras bravas, al Querétaro, a sus verdaderos dueños, y a los intereses ocultos, la afición en México, reaccionó virulentamente. En su defensa, la gente, eligió contratacar con una advertencia: #ElGrito. Sí, una palabra, cuatro letras, que aterran a la FMF y a todas las rémoras que se amamantan de la Selección Mexicana.
Cientos de miles de trinos rabiosos se desencadenaron en Twitter. Una advertencia estentórea que debe escucharse hasta Zurich. Pero Infantino tiene mejores negocios entre ceja, oreja y sien.
En W Deportes, Yon de Luisa respondió ante la beligerancia tuitera de una afición al futbol que esperaba medidas drásticas después de los fatídicos sucesos en Querétaro. Sí, estaba al tanto del ominoso ruido de los silenciosos mensajes en redes sociales.
“Ya vi algunos tuits de eso. Hemos recibido amenazas, no es la primera ni la última (vez). Si alguien quiere llegar y gritar ‘pu...’, se le va a sacar, así como en (juegos de) Selección. ¿Quieren gritar? ¡Perfecto, que se olviden de ir a un estadio!”, lanzó al aire el presidente de la FMF.
Evidentemente, perdió la mesura y perdió la batalla. El reyecito se sintió más poderoso que el pueblo.
Uno esperaba de Yon de Luisa un acto de conciliación, de reconciliación, de pacificación. Eran de esperarse palabras de contrición, de arrepentimiento, de concordia. Eligió la confrontación, el desafío, la provocación, la amenaza. En tiempos en que urge la paz, eligió la guerra. Se sintió un mítico Hércules ante la Hidra de Lerna y sus miles de cabezas.
De Luisa defendió la severidad de las sanciones a las 'barras'.
Recuérdese que Yon de Luisa fue preparado durante años, por Emilio Azcárraga Jean. Es el tipo más poderoso ante FIFA por parte de la Concacaf, aunque a este organismo lo gobiernen otros, y lo presida un tercero. Él tiene derecho de picaporte hasta la alcoba de Infantino, si es preciso.
Yon de Luisa estaba llamado a domesticar al mundo del futbol mexicano. Ha recibido la ayuda que necesita. El #TuzoGate es una prueba de ello. Azcárraga Jean no quería más migrañas en su imperio del futbol. Y Yon debía ser el hilandero de la tranquilidad y el sometimiento de los 18 equipos, seis de ellos en tres multipropiedades, y los 12 restantes.
Pero perdió la cordura y perdió la batalla. Y ha ocurrido en tiempos críticos. Hoy la Selección Mexicana y la FMF son tan vulnerables y expuestos, como los aficionados rojinegros en La Corregidora.
1.- México aún no tiene una plaza en el Mundial de Catar 2022. Debe jugar de local ante Estados Unidos y El Salvador. Y la tribuna puede desgañitarse gritando cada una de las otras 92 mil 999 palabras del idioma español (según la RAE), pero no esa, no la de #ElGrito. Podría perder puntos y quedar fuera del Mundial.
2.- Esta vez, la FMF no podrá reclutar a los 2 mil paleros, los 2 mil arrejuntados, los 2 mil patiños, que sobornó llevándolos a los partidos ante Costa Rica y Panamá. Esta vez pretende abrir las puertas de para en par. Y ya se sabe, el mexicano reacciona mal ante las amenazas, se rebela ante los ultimátums.
Grupos de 'animación' de Gallos recibió sanción de no asistir 3 años como local.
3.- Gente cercana a la FMF asegura que le han advertido a Yon de Luisa que esos partidos ante EEUU y El Salvador, se deben jugar a puerta cerrada, para evitar el riesgo de que aparezca
#ElGrito, y desemboque en una sanción sin precedentes, como perder puntos, o, incluso, perder la sede de 2026. Pero, el presidente no quiere verse débil, intimidado, condicionado.
En el Podcast de Raza Deportiva del lunes pasado, advertíamos que un grupo de dirigentes, en la mencionada #YuntaDeDueños (marca registrada de Sven-Goran Eriksson) del martes, imploraría –falazmente--, piedad hacia el Querétaro como empresa, como fuente de trabajo, etcétera.
Ocurrió, como se había anticipado en ese podcast. Hubo abogados intempestivos, con segundos intereses. Yon de Luisa mordió el anzuelo de esos dirigentes piadosos, encabezados –según fuentes--, por el Grupo Pachuca, quien pidió piedad, contemplación y cordura para la empresa, la afición, la ciudad y los empleados de Querétaro.
Y evidentemente, contrasta esa clemencia de la FMF y del mismísimo Yon de Luisa hacia Querétaro, cuando poco les importó mostrar esa bonhomía, esa generosidad, ese humanismo, cuando cientos de personas perdieron su modus vivendi en los casos de Veracruz y del Morelia. Ahí, no hubo contemplaciones.
Vaya, hasta el mismo Mikel Arriola le dio un zape público a su jefe, cuando fustigó la forma negligente, descuidada, torpe, en la que se manejó el tema de los Tiburones Rojos, más allá de las tropelías del infausto Fidel Kuri. “Todavía hay deudas y demandas”, dijo el presidente de la Liga Mx.
¿Puede revertir esta situación Yon de Luisa? Difícilmente. Recibió una respuesta anticipada de las cerca de 3 mil personas que acudieron a una marcha por la paz, y en una declaratoria de guerra a la FMF, la noche del miércoles en Guadalajara, hasta las faldas del Estadio Jalisco.
Esa manifestación, fue una arenga involuntaria, y desafortunada, del mismo dirigente de la FMF con esa forma de provocación espetada: “Si alguien quiere llegar y gritar ‘pu…’, se le va a sacar, así como en (juegos de) selección. ¿Quieren gritar? ¡Perfecto, que se olviden de ir a un estadio!”.
Alguien podría regalarle a De Luisa un ejemplar de El Arte de la Guerra de Sun Tzu. “Debemos fingir debilidad, para que el enemigo se pierda en la arrogancia”, recomienda el legendario general chino.
Ocurrió al revés. Y Yon perdió la cordura y la batalla.