Estoy contento. La primera parada acaba de concluir con una buena actuación y, más importante, llegó el primer cobro, por eso siento que es prueba superada. Quizás podía haber llegado más lejos, pero haber cobrado en mi primer evento en esta aventura me hace sentir muy bien y me motiva para seguir adelante.
El torneo fue bastante distinto a lo que venía viendo en Latinoamérica. Por empezar, el Casino era ¡gigante! Para los que no hemos tenido la oportunidad de ir a Las Vegas, sin dudas esto impresionaría a cualquiera. En Perú, el Atlantic City me había parecido enorme, pero ahora, comparándolo con el Casino de Madrid, pudo decir que esto es casi tres veces más grande.
Además, como era un evento de PokerStars, el salón estaba muy colorido y había televisión, aunque no sé porqué canal se transmitirá el evento. En lo que respecta a los dealers, puedo comentar que son muy buenos, se ve que estan bien entrenados y aptos para un evento mundial como este.
Puedo decir que el estilo de juego es totalmente diferente al nuestro. Son agresivos pero con mucho retroceso, y bastante cautelosos. Ajustarme a este tipo de juego no me costó mucho, de hecho, desde temprano en el torneo empecé a dominar mi mesa y logré mantener mi ritmo hasta el final.
El Día 1 la pasé robando luces, siempre con buena posición. Así pude terminar con 52.300 fichas, ante un promedio de 31 mil, aunque me quedó un sabor amargo porque pude haber incluso llegado a tener más. En la única mano que pagué un all-in sufrí un bad beat horrible que me hubiera dejado en 80 mil. Fue así: en primera posición subo con K-Q, me pagan en media posición y cae 7-6-K. Ahí le mando la caja y me paga con 8-9. Lamentablemente para mí, vuela el 10 en el turn y forma la escala, quitándome una buena posibilidad de terminar más arriba.
Igual fue bueno pasar, porque de los 147 que se anotaron, sólo quedamos 61. Además, eliminé a al profesional Henri Kasper, con ases contra A-8, por lo que me sentía fuerte y confiado. Debo decir que después de la eliminación, me hice amigo de Kasper y estuvo dándome su apoyo, incluso me invitó a ir al EPT Tallin porque se quedó con las ganas de eliminarme. Para los que no saben, Henri Kasper es uno de los mejores jugadores estonianos; múltiple campeón de Omaha en Estonia y poseedor de numerosos cobros en EPT y WSOP.
En general, sinceramente no conocía a la mayoría de los jugadores, era un mar desconocido de europeos. Al único que reconocí fue a Poli Rincon, que es amigo de PokerStars y al Team Pro de España, Juan Manuel pastor. Además, estaba el golfista Sergio García, uno de los mejores en su deporte.
El Día 2 lo empecé con todo. Primero me levanté temprano y me fui con mi familia a conocer el estadio de Real Madrid, el Santiago Bernabeú. Con el furor que hay en España con el fútbol por estos días, me pareció ideal hacer una visita a una de las catedrales del deporte mundial.
Ya más relajado, volví al casino y me propuse lograr el objetivo de entrar en los premios. Sabía que 32 era el número mágico y supe manejar la situación. En otra ocasión, quizás hubiera jugado un poco más agresivo, pero era importante para mí llegar al cobro.
La eliminación finalmente se dio en el puesto 26, cuando me había quedado con 10 ciegas y me jugué con J-7. Uno de mis rivales tenía par de 9s y no recibí ayuda en las comunitarias. Como consuelo me entregaron un premio de 1650 Euros.
Pero como dije antes, prueba superada en Madrid. Primera presentación en Europa y vamos de 1-1, nada mal para empezar. Ahora a concentrarse en Brighton y a seguir cumpliendo metas.
El martes vuelo a Londres, donde voy a jugar el UIKPT, un torneo de 1100 libras esterlinas que se llevara a cabo en el Rendesvouz Casino de Brighton & Hove; por lo que estuve averiguando es un lugar super turístico y paradisíaco.
Después de haber cumplido el objetivo en Madrid, pues las expectativas están más altas. Siento que pude acoplarme rápido al juego europeo y que mi presentación en Londres va a ser mejor. La nueva meta: llegar a la mesa final. No sé si me llevare la victoria, pero si quiero tener mi primera aparición en una mesa final aquí en Europa.
Me despido de todos por un rato y en los próximos días les estaré contando cómo sigue el viaje. Gracias a todos por el apoyo y espero poder retribuirles con buenos resultados.
Pura vida.