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México pierde a una N°1; Granillo se gana el futuro

No juega un partido oficial hace cinco meses Mexsport

CIUDAD DE MÉXICO -- Hace exactamente un año, Alejandra Granillo se perfilaba para convertirse en la inamovible número 1 del tenis mexicano. Con 18 años, la joven de Pachuca ya se metía entre las 600 mejores del mundo, y su carrera profesional comenzaba a despegar.

Hoy, Alejandra recorre los pasillos de la Universidad de Pepperdine para ir de su clase de Cultura Americana a la cátedra de Historia. Hace 5 meses que Granillo no compite en un torneo que entregue puntos para el WTA Tour. Y en apenas unos días, su status tenístico pasará de "profesional" a "amateur".

El proyecto más concreto que tenía el tenis femenino mexicano ha tomado una decisión de vida. Ha escogido dejar el circuito para convertirse en estudiante de Relaciones Internacionales. Y tenista de la NCAA (National Collegiate Athletic Association, el ente que regula el deporte universitario en los Estados Unidos). Una decisión irreprochable desde el punto de vista personal. Imposible de criticar. Digna de aplaudir. Pero que golpea al tenis local, por inacción y omisión.

"Tomé esta decisión porque este año el equipo de trabajo con el que yo entrenaba (el de Olga de la Fuente) se desintegró", me cuenta Alejandra, en un alto a su tarea académica. "No tenía con quién entrenar, mis coaches se volvían a Argentina, empezaron a surgir problemas económicos, vi que todo se estaba complicando mucho, y decidí venirme".

En mayo, mientras planeaba su última gira por Portugal y España (cuyos resultados la ubicaron en el 557° del ranking), Alejandra escogió un nuevo camino para su vida. Puso sobre la mesa la treintena de ofertas de beca completa que le habían hecho llegar universidades estadounidenses. Descartó UCLA, USC, Berkeley, y escogió Pepperdine. Ahora vive a unos metros de las playas de Malibú, en California.

"Fue un cambio demasiado rápido, pero no podía perder esta oportunidad. Es más, me vine en un gran momento tenístico. Y como había cobrado premios en este 2010, la NCAA me suspendió por un semestre. Durante este tiempo no he podido entrenar oficialmente con el equipo de Pepperdine. Pero en enero ya estaré habilitada".

A pesar de la sanción, la misma NCAA ubicó a Granillo como la octava mejor novata para la temporada 2010-2011. Ella aspira a convertirse en la líder de su equipo y seguir creciendo tenísticamente.

"Aquí tendré un equipo completo de entrenadores y preparadores físicos con los cuales trabajar. Planeo quedarme los cuatro años que dura la carrera, porque si empiezo algo, lo quiero terminar. Durante los veranos, quiero jugar torneos profesionales para no perder mi ranking, pero no cobraré premios. No quiero desaparecer".

El objetivo a largo plazo para Granillo es regresar al WTA Tour, ya con un título bajo el brazo. Pero ahora eso se ve como algo muy lejano. Ahora sus días transcurren entre las aulas, los dormies de la universidad y la ilusión de tener éxito en el ámbito deportivo de la NCAA. Diagrama sus actividades académicas. Estudia. Construye su futuro. Y deja una reflexión lapidaria: "Ahora en Mèxico no es un buen momento para ser tenista profesional".

Twitter:
@juaniceballos