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Pumas, Chivas: una apuesta de sangre

La cita es el domingo, al mediodía, en el campus universitario: El fútbol mexicano debería estar agradeció con los dos. En una industria futbolística que no parece tener tiempo para respetar planes, para confiar en proyectos a largo plazo, el Guadalajara y la Universidad han seguido el camino adecuado. Al final del día, estemos tranquilos porque el más beneficiado será el propio futbol mexicano, la selección y hasta el resto de los clubes que se beneficiaran con el talento que ambos producen.

LOS ANGELES -- Todo mundo parece demasiado ocupado en la posición de las Chivas en la tabla general, en el catastrófico inicio del torneo y en la llegada de un nuevo entrenador como Ignacio Ambriz. Nadie, en cambio, le da demasiado énfasis al particular duelo que tendremos el domingo al mediodía en el estadio Olímpicos Universitario.

Dos clubes que han tirado sus cartas sobre la mesa, que han cerrado las puertas a contrataciones y que han decidido valerse de lo que ellos mismo producen en el patio trasero de su casa. Dos instituciones que reflejan en el día a día lo que puede y debe ser el futuro mismo del fútbol mexicano.

Pumas y Chivas prometen, además, mostrar en la cancha un duelo altamente competitivo de canteras, de orgullo y de identidad.

Pero no sólo de trata de poner a los jóvenes a jugar. También se trata de competir por el trofeo. Etiquetados siempre como "equipos grandes", los dos, Chivas y Pumas saben que en las tribunas no hay demasiada calma para esperar resultado, que torneo a torneo, desde que rueda el balón, necesitan pelear por los puntos y por la gloria del campeonato.

El fútbol mexicano debería estará agradecido con los dos. En una industria futbolística que no parece tener tiempo para respetar planes, para confiar en proyectos a largo plazo, el Guadalajara y la Universidad han seguido el camino adecuado. Al final del día, estemos tranquilos porque el más beneficiado será el propio futbol mexicano, la selección y hasta el resto de los clubes que se beneficiaran con el talento que ambos producen.

Un viso de urgencia se asoma sobre Chivas este domingo. Una derrota pondría las cosas mal, justo en el debut del nuevo entrenador, pero Chivas no puede salir a especular. Debe salir a procurar su futbol, a tratar de recuperar la memoria de la cancha y a confiar en el espíritu de su equipo. Ambriz no tiene ninguna clase de "varita mágica"", pero los jugadores de Chivas tienen el balón en sus pies. Ellos saben, mejor que nadie, lo que hay que hacer para ganar.

Pumas presentará una camiseta conmemorativa a su debut, hace 50 años en la primera división, que seguramente llenará de lágrimas algunas miradas. Universidad es, desde hace muchos años, el equipo que muestra el camino en México en la producción de jugadores, Han tenido sus altibajos, como cualquiera, pero siempre están ahí, en pie de lucha y con la capacidad de seguir asombrándonos.

Estoy seguro de que será un buen domingo en el campus universitario. Hay dos camisetas llenas de orgullo, de identidad, de historia, de leyenda, dos equipos que apuestan por su sangre y que no pueden, de ninguna manera, fracasar.