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Sir Alex golea al Manchester City 14-1

LOS ÁNGELES -- Es un proverbio árabe. Un escocés, con honores británicos y salario de alcurnia inglesa, lo practica pacientemente. Claro, si en diciembre cumple 71 años, ¿qué prisa puede tener?

"Me sentaré a la puerta de mi casa a ver los cadáveres de mis enemigos pasar".

Sir Alex Ferguson llegó en 1986 a la torre de control del Manchester United. Su primera Liga la ganó seis años después. Desde entonces ha ganado 12 de ellas, además de otras competencias del Reino.

En ese lapso, Ferguson ha visto desfilar a 14 entrenadores del Manchester City. Este domingo puede ser el número 15.

Roberto Mancini sabe que vive bajo la dictadura de un ultimátum dirigiendo a la nómina más costosa de uno de los equipos menos saludables financieramente de la Liga Premier, especialmente comparado con el Manchester United, certificado por Forbes.

El Etihad Stadium puede ser este domingo, para Mancini, un monumental mausoleo donde lo lapiden o un monumental altar donde lo veneren.

Ferguson sabe que es inamovible. Mancini sabe que es desechable. Esa es la diferencia.

Para Ferguson, sin embargo, hay heridas abiertas. Ese corazón que rejuvenece cada torneo y se avejenta cada 31 de diciembre, no puede olvidar dos de las más dolorosas heridas infligidas por los Ciudadanos: el 6-1 de apenas la temporada anterior, y el 5-1, también en una pesadilla en el Teatro de los Sueños, en 1989, cuando el escocés sufría todavía para darle forma a un proyecto que se convertiría en dominante en la Liga Premier.

Mancini no sólo presenta a un equipo como campeón vigente, altamente competitivo, con agregados importantes como, Jack Rodwell, Javi García, Scott Sinclair, Maicon, Matija Nastasic y Richard Wright, sino que además saben todos la dimensión de la confrontación cuando el liderato está en la mesa.

Manchester City decepciona además en la Champions y las cifras están por debajo de lo esperado: hace un año, en la fecha 15, el City aterrorizaba con 49 goles, mientras que ahora apenas suma 28.

Lo cierto es que con el antecedente de ese 6-1 de octubre de 2011, tampoco se puede confiar en las estadísticas que marcan que de sus últimos 15 encuentros, el saldo es favorable para los Red Devils con ocho victorias y dos empates.

Lo cierto es que un equipo que se ha visto frágil en defensiva como el United con 21 goles en 15 torneos, puede ser una oportunidad para despertar para el City, especialmente por una línea de ataque que pretende formar con un David Silva saliendo de lesión, Tévez, Nasri y Agüero.

¿Chicharito Hernández? A la banca. Ferguson enviaría a Welbeck, Rooney, Young y Van Persie.

Así, hay el botín es generoso: dignidad, respeto, liderato, historia, y saber si Mancini será el entrenador número 15 que ve Ferguson perder su cabeza durante su mandato.