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Hermosillo se atrevió

El nuevo Estadio Sonora pasó la gran prueba en su inauguración en la Serie del Caribe 2013. AP Photos

HERMOSILLO -- Bien lo dijo Ernesto Jerez durante nuestra transmisión del juego inaugural en el Estadio Sonora: "En muchas ocasiones tras visitar los parques de entrenamientos primaverales de las Grandes Ligas, siempre surgía esa pregunta con frustración, del por qué en nuestras ligas de béisbol no teníamos ningún parque con tales características…pues bien, hoy podemos finalmente decir que lo tenemos".

Esa reflexión de Ernesto quizás resume el sentimiento de todos los que vivimos la apertura del "Coloso del Desierto".

La construcción del parque fue la excusa y razón de peso para que la Confederación del Caribe otorgara a Hermosillo la sede del evento. Sin embargo, a nivel politico este proyecto no fue bien recibido por su alto costo proveniente de las arcas públicas del estado. El presupuesto del parque llegó a $40 millones de dólares, y en general los gastos de la ciudad en vialidad y obras para la Serie del Caribe se ubicaron en los $67 millones de dólares aproximadamete.

Aunque se hablaba de protestas y boicots por estos gastos que se combinaron con impopulares medidas por impuestos adicionales a los residentes de esta ciudad, al final se siguió cumpliendo ese axioma del béisbol: "Si lo construyes...ellos vendrán".

Así pues los fanáticos locales colmaron a plenitud el día inaugural y al momento de ver al tricampeón mexicano Yaquis de Obregón saltar al terreno, el descontento, si había alguno, se esfumó.

Si además sumamos que para el mismo momento cuando se cantó la voz de playball, aún los obreros continuaban removiendo escombros y algunas vías de acceso no estaban, ni están, terminadas; en teoría debió existir un descontento local.

Pero al ver la joya en el interior del parque, nada de aquello importó. Y aún faltan detalles.

Los rumores locales hablan de que aparte de traer el evento a Hermosillo, el gobierno buscaba construir una mega obra en una zona inóspita de una ciudad a la cual le sobra terreno por estar en el medio del desierto, con la idea de que algunos inversionistas locales se hicieran de terrenos cercanos a precio de "gallina flaca" para desarrollar proyectos de bienes y raíces que en un futuro alcancen mayores precios y ganancias.

Y quizás, como ocurre en nuestros paises, existan negocios sombríos, algo que no nos consta. Sin embargo, es innegable que sea cual sea el escenario que exista, el desarrollo de una nueva zona para esta ciudad es signo de progreso.

Más aún si el parque de béisbol es el núcleo de este proyecto, pues de igual forma habrá desarrollo para el equipo local, Naranjeros, y para la Liga Mexicana del Pacífico.

A veces el fin justifica los medios. El Estadio Sonora es hoy un ejemplo de como puede existir una unión entre empresa privada y gobierno local en pro del deporte y del prestigio como se debe tratar nuestro béisbol.

Si este es el inicio de una nueva era en parques de pelota invernal pues bienvenida sea.

Y a pesar de que aún hayan detractores, al menos, en mi humilde opinión, yo me pongo del lado de los que están a favor. Si tienen dudas, visite el Estadio Sonora y contemple un juego de béisbol, le aseguro que no tiene nada, absolutamente nada que envidiarle a un parque de liga mayor, y además tiene ese sabor especial de la pelota del Pacífico.

Nuestro tema musical de esta Serie del Caribe se titula "Hermosillo Se Prendió", más bien quizás se debió llamar: "Hermosillo se atrevió". El costo se verá a largo plazo, pero en lo deportivo hoy podemos afirmar que el mejor parque de pelota en América Latina está aqui y que de ahora en adelante será la flamante casa de los Naranjeros.