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La vía alterna del draft suplementario

O.J. Ross de Purdue es quien tiene las mejores posibilidades de ser reclutado en el suplementario. AP

MÉXICO -- Nuevamente, llegamos a la época del año en que un puñado de ex jugadores colegiales tienen la oportunidad de ingresar a la NFL por la vía alterna del draft suplementario, que se celebrará mañana jueves, 11 de julio.

Como siempre, vale la pena volver a repasar la mecánica de este draft suplementario.

A diferencia del draft normal, acá no hay una gran ceremonia en Radio City Music Hall, ni entradas de carpeta roja, ni horas interminables de transmisiones televisivas. Se lleva a cabo mediante correo electrónico.

Esta vía está diseñada para jugadores que, pudiendo ser elegibles para el draft normal, no formaron parte del mismo debido a que planeaban jugar una temporada colegial más en primera instancia. En la gran mayoría de casos se trata de jugadores que perdieron su elegibilidad para la siguiente campaña universitaria, después del draft normal, ya sea por cuestiones académicas o disciplinarias.

Para determinar el orden de elección, los 32 equipos se dividen en tres grupos: el primero consiste de los equipos con seis triunfos o menos en la temporada anterior, el segundo con los equipos que ganaron más de seis partidos pero que no ingresaron a la postemporada, y el tercero con los equipos que disputaron playoffs.

Dentro de cada bloque, el orden específico se determina mediante una lotería similar a la que se usa en el draft de la NBA, con los equipos de peores registros obteniendo mejores probabilidades de elegir antes que los clubes con mejores marcas.

Lo que sigue es una especie de subasta, donde un club comunica a la liga el nombre del jugador que le interesa, y la ronda de la selección que estaría dispuesto a invertir en él. La NFL adjudica el jugador al equipo que oferta la selección más alta --o en caso de que dos o más equipos ofrezcan una selección de la misma ronda, de acuerdo al orden descrito anteriormente--, y ese equipo renuncia a su selección de la misma ronda para el siguiente draft normal. Sobra decir que para que un equipo pueda ofertar una selección en el draft suplementario, es necesario que cuente con una selección de la misma ronda en el siguiente draft normal.

Para este 2013, hay seis jugadores que se han declarado elegibles para el draft suplementario: el ala defensiva James Boyd de UNLV, el tackle defensivo Nate Holloway de UNLV, el ala defensiva Toby Jackson de Central Florida, el receptor abierto DeWayne Peace de Houston, el receptor abierto O.J. Ross de Purdue, y el back defensivo Damond Smith de South Alabama.

Según la mayoría de observadores, podríamos estar ante el primer draft suplementario donde ningún jugador sea elegido desde el 2008. Ross podría tener las mejores posibilidades del grupo de este año, en sumarse a un equipo mediante una selección.

El último jugador que fue elegido en un draft suplementario fue el receptor abierto Josh Gordon, por los Cleveland Browns, en el 2012, por quien pagaron su selección de segunda vuelta del pasado draft de abril. Gordon jugó originalmente para Baylor, pero fue echado del equipo en el 2010 tras arrojar positivo en una prueba de control de drogas. Transfirió a Utah, pero fue echado tras una tercera prueba positiva, después de celebrado el Draft 2012. Gordon es un ejemplo perfecto del riesgo que suele asociarse con jugadores de draft suplementario: iniciará la campaña del 2013 suspendido por dos encuentros, tras una prueba de control de drogas positiva en la NFL.

Sin embargo, también es posible encontrar de repente alguna joyita en el draft suplementario, aunque los casos son raros. En 1998, los Green Bay Packers invirtieron una selección de segunda ronda en un guardia de Navy que había sido echado del programa por arrojar positivo por esteroides. Ese mismo año, los San Diego Chargers pagaron una selección de segunda ronda por un tackle defensivo de Oklahoma State que había sido declarado académicamente inelegible para la siguiente campaña. Con el tiempo, Mike Wahle y Jamal Williams se convirtieron en jugadores de Pro Bowl en la NFL.