BUENOS AIRES -- No hubiera sido justo que una temporada como la 2013 de la ATP no terminara con otro partido que no sea un Nadal-Djokovic. En este espacio voy a repasar los factores determinantes en el triunfo de Nole sobre Rafa, pero también me gustaría destacar el buen torneo y excelente año de Juan Martín Del Potro, así como la mejoría en la confianza y el juego de Roger Federer, que si bien no está al 100% físicamente (personalmente lo vi un poquito más "gordito") este resultado lo va a motivar y proyectar de cara a la gira australiana y al 2014 en general.
Por su parte, Del Potro, a quien ya repasaremos en una columna completa en las próximas semanas, desarrolló un gran tenis en el final de temporada y el sabor amargo de las oportunidades perdidas contra Federer en el Masters no debería empañar un año tenístico que lo vuelve a situar con opciones a ganar cualquier torneo. Tema aparte es el N°1 donde la regularidad es fundamental y no se puede fallar en ningún Grand Slam antes de semis.
En cuanto a la final en Londres, debo destacar el juego de saque de Djokovic, que se mostró muy sólido en este final de temporada durante toda la gira indoor y que le permitió ganar muchos puntos; y tampoco hay que olvidarse de su juego de base, que debido a su velocidad de pelota lastima muchísimo a sus rivales. Algo que combinado con unos porcentajes de saque espectaculares se convierte en una ecuación difícil de romper.
En cuanto a Rafa y los porqués de su "derrota" en la final, creo que básicamente su servicio no fue tan efectivo como a él le hubiera gustado para poder disputar el partido contra un Nole impecable. De haber sacado mejor las chances habrían sido otras y quizás hasta podría haber ganado el partido. Concedió demasiadas oportunidades y el serbio, quien para mí tiene la mejor devolución del circuito, no desaprovechó las ocasiones y se mostró en un gran nivel de concentración, con pocas fallas.
A Nadal también lo vi en algunos momentos errático con su drive, algo muy poco habitual; y en este sentido parece que la pelota que se utilizó en el torneo no le gustó tanto porque sus golpes no agarraron el efecto que él quiere. Pero eso no es algo que justifique victorias o derrotas, ya que las condiciones a veces lo favorecen a Rafa, y en otras, como en Londres, a Nole, tanto por la superficie como la bola.
Si bien algunos pudimos llegar a pensar previo al partido que Rafa se podía sentir presionado, por no lograr el único torneo grande que le falta junto a Miami, creo que en el partido no se lo vio tenso en ese sentido y la clave pasó mas por lo tenístico que por lo anímico.
En el plano físico creo que ambos llegaron cansados al final de temporada, pero con una fatiga similar. No se notó una frescura mucho mayor en uno que en otro. Nadal hace un desgaste más grande que Nole por su patrón de juego, pero también es cierto que Rafa jugó mucho más agresivo este año y además comenzó la temporada allá por febrero cuando Nole ya había ganado torneos y tenía varios partidos acumulados.
Las vacaciones de estos dos súper jugadores serán cortas en lo tenístico, pero las exhibiciones no generan ningún tipo de presión para ellos; y de hecho se realizan mientras transcurre la pretemporada, por lo tanto serán como unas vacaciones "part time" por Latinoamérica, donde podrán disfrutar de sus fanáticos y de países que no visitan a lo largo del año con el Tour.