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Venezuela vela sus armas

ISLA DE MARGARITA -- Bajo un sol esplendente, apenas horas después de asegurar su clasificación a la semifinal, los Indios de Mayagüez saltaron nuevamente al terreno del estadio Nueva Esparta, esta vez para practicar.

El manager Carlos Baerga dirigió la jornada y después de un rato se sentó junto al gerente Iván Rodríguez en las sillas color aguamarina, detrás del home, para dar un último vistazo a sus muchachos.

"No podemos dormirnos contra Venezuela", explicó Baerga. "Tiene cañones grandes".

El ex camarero boricua lo advirtió la noche anterior, luego de esa trabajada victoria sobre los Navegantes del Magallanes, 5 carreras por 4: "No quiero descansar", dejó en claro.

El duelo entre ambos contendores se repetirá este viernes, en el mismo escenario. Pero por primera vez en los últimos cinco días, el piloto de la nave venezolana, Carlos García, prefirió seguir el camino contrario que su colega.

"Tenemos varios jugadores con molestias y dolores", señaló el Almirante. "Necesitamos un día de completo descanso".

El popular equipo turco veló armas, literalmente, la víspera de la semifinal. Como los antiguos guerreros del medioevo, nadie movió un músculo ni empuñó sus herramientas de trabajo la víspera, a pesar del compromiso en puertas.

El campocorto Eduardo Escobar tiene un golpe en el tobillo derecho. El receptor Robinson Chirinos continúa con la mano izquierda inflamada. El centerfielder Endy Chávez recién termina de recuperarse de un problema en una pierna. El pitcher Carlos Zambrano, abridor de una posible final, admite que aún le duele una rodilla.

Los brazos más importantes del bullpen también agradecieron la pausa. El cerrador Jean Machí y sus preparadores Juan Carlos Gutiérrez y Hassán Pena relevaron en tres días consecutivos, para asegurar las victorias que metieron a los bucaneros en esta instancia.

La temporada de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional es larga. Comenzó el 10 de octubre. Magallanes ha disputado 88 juegos para llegar al duelo contra los campeones de Puerto Rico.

Tal vez por ello el jonronero Mario Lissón y el antesalista Adonis García han estado apagados con el madero, luego de ser los émbolos de la maquinaria magallanera en la ronda eliminatoria de la LVBP.

Esos 88 compromisos son más de la mitad de un calendario de grandes ligas y todavía quedan dos encuentros más, para completar la tarea que todos en la Confederación del Caribe se propusieron al inicio de sus torneos: conquistar esta competencia regional.

Ya el representante de Cuba, Villa Clara, viajó de regreso a su país, y los dominicanos Tigres del Licey quedaron fuera este jueves.

García no quiere ser el siguiente en despedirse de una cita en la que es el anfitrión. Por eso, ordenó el día libre para sus dirigidos. Para restañar las heridas.

No sólo son heridas literales, las de Escobar, Chirinos, Chávez y compañía. También las hay metafóricas: la tropa de Baerga ha sido la única capaz de derrotar a los filibusteros en Margarita, hasta ahora.

"Sabemos lo que puede hacer Puerto Rico", admitió García. "Nos ganaron a nosotros y a Dominicana. Sabemos que pueden jugar buena defensa y que batean. Tenemos que hacer un juego consistente, el juego que sabemos. Tenemos que estar enfocados en la zona de strike".

El timonel venezolano sumará hombres de refresco al combate. Chávez debe regresar al jardín central, luego de dos cotejos en el cuarto del trainer y otro como designado. Eso moverá a Ezequiel Carrera al left, lo que redundará en una mejor defensiva.

Machí, Gutiérrez y Pena estarán de vuelta en el bullpen, tras ausentarse en la victoria de los Indios sobre los Navegantes.

"Sabíamos que iban a descansar (el miércoles), porque era su descanso obligado", apuntó García sobre los tres escopeteros, que forman, junto a Deolis Guerra, el más efectivo cuarteto de bomberos cortos en la serie.

Machí necesita un salvado para llegar a cuatro e igualar el récord de la cita, que impuso su compatriota Francisco Buttó.

Chirinos puede ser otra novedad. Agregaría poder ofensivo, al permitir contar con él y Ramón Hernández en el lineup, simultáneamente. El diagnóstico más optimista ubicaba su posible regreso para este viernes, pero el grandeliga continúa bajo observación médica.

Giancarlo Alvarado y Daryl Thompson están anunciados para abrir.

A Alvarado no le fue bien en su estreno. Fue contra el Licey, en la jornada inaugural. Explotó en el tercer inning y se despidió con cinco carreras, tres de ellas merecidas, aunque los puertorriqueños ganaron esa tarde a los dominicanos. Dio un boleto y no ponchó.

Thompson lanzó un poco mejor. Ganaba 6 por 1 sobre el Villa Clara cuando fue emboscado en el quinto y enviado a las duchas. Los venezolanos triunfaron a la postre y él quedó con cuatro rayitas limpias, seis hits, dos bases por bolas y un guillotinado.

García recuerda ese desempeño del derecho y sabe que se juega la vida en un partido.

Thompson tampoco fue muy consistente en la LVBP, con los Caribes de Anzoátegui. Por eso, el Almirante prefirió el miércoles usar a Wilfredo Boscán por sólo un episodio, en vez de hacerle iniciar el choque. Así podrá sacarlo como primer relevista contra los monarcas de Borinquen, si hace falta.

El nuevo formato de la Serie del Caribe no deja espacio para el error. Todos lo saben. Por eso, unos se entrenan, para mantener el ritmo, y otros descansan, para recuperar fuerzas, con el tope decisivo frente a Hermosillo como premio.

Es solo un juego. Una única confrontación en la que Magallanes y Mayagüez se juegan la vida.