Nuestro objetivo de hoy es disipar algunos mitos. Comencemos.
Mito No. 1: La controversia que rodea a Yasiel Puig porque el periodismo pesado se aprovecha de él.
La realidad: La controversia rodea a Puig porque la cobertura de la prensa refleja a la perspectiva interna que mucha gente tiene sobre él dentro del seno de los Dodgers, y esa perspectiva es que el jardinero derecho comete demasiados errores.
El equipo ama su energía y su talento pero -- al mismo tiempo -- algunos de sus compañeros, dirigentes del equipo y miembros del cuerpo técnico se exasperan cada vez más ante el hecho de que él comete los mismos errores una y otra vez, ya sea con su falta de puntualidad o su manera de correr las bases. Nadie está buscando voltearlo; nadie está tratando de reprimirlo; nadie está tratando de hacer que él tenga una mala imagen. Ellos solo quieren que él haga su trabajo.
Tal y como Ramona Shelburne dijo en su artículo, Don Mattingly tuvo una reunión con el equipo para hablar con Puig y hacer borrón y cuenta nueva. Mattingly no haría algo semejante si él pensara que un par de periodistas deportivos estaban siendo injustos.
Además, vale la pena recordar que aunque Mattingly haya retractado las declaraciones que hizo en Australia durante los últimos días, él jugó en Nueva York durante toda su carrera como pelotero y que lidió mucho con periodistas allá. Él sabe cómo hacer que su mensaje se oiga a través de la prensa. Él hizo saber su preocupación mediante el sarcasmo -- lo cual, de nuevo, refleja la preocupación que tienen varios otros miembros de los Dodgers como organización que no hacen declaraciones públicas. Mattingly ha asumido los roles tanto de policía bueno como de policía malo, quizás debido a que algunos de sus jugadores (particularmente aquellos que solo hablan en inglés) no se sienten cómodos diciéndole a Puig lo que ellos piensan. Ese fue el propósito de la reunión del equipo -- el crear un foro abierto. Es una gran señal que Puig haya aceptado las sugerencias hechas de la manera en que lo hizo.
Sí el logra cambiar de la manera en que sus compañeros quieren que lo haga, ellos lo respetarán como nunca antes por ello. Pero si no lo hace, la exasperación solo se pondrá peor.
Mito No. 2: La asociación de jugadores se ha visto forzada a ceder para que las sanciones por pruebas antidopaje sean más duras
La realidad: La unión ya había sido pionera en la pelea por conseguir que el sistema antidoping del béisbol sea el más estricto de todos los deportes profesionales. Ningún cambio puede hacerse realidad sin la aprobación de la unión, y los jugadores estaban furiosos sobre el hecho de que algunos de sus colegas como Ryan Braun, Alex Rodríguez y otros intentaron hacer trampa durante el escándalo de Biogénesis el verano pasado, o sea el equivalente de que alguien tenga ases en la manga durante un juego de póker del vecindario.
Así que la unión ha trabajado para identificar un sistema de sanciones que ellos crean que sirva como herramienta disuasiva sin excederse demasiado. La versión más reciente sugiere 100 juegos como pena por un primer doping positivo y una temporada entera por un segundo positivo.
Si la tendencia a hacer trampa persiste, las sanciones volverán a ser más severas -- y la unión será la encargada de que esto suceda.
Mito No. 3: Stephen Strasburg tuvo una mala temporada en el 2013.
La realidad: Él tuvo una temporada bastante buena, la cual incluyó un PCL de 3.00, generó un OPS de sus rivales de .588, la sexta mejor marca de las mayores en ese rubro, y 191 ponches en 183 entradas. Él lanzó al menos siete entradas en 16 juegos. Sin embargo, él también estaba jugando con astillas en los huesos del codo y no pudo ser tan exitoso como quería debido al verse involucrado en partidos cerrados que eran así gracias en gran parte a la ofensiva esporádica de los Nacionales.
Él se sacó las astillas después de la temporada y le agregó el slider a su arsenal de lanzamientos. Él se decidió a concentrarse en prevenir bases robadas.
También se convirtió en papá.
Strasburg parece estar perfilado para tener una temporada dominante.
Mito No. 4: El sistema de repetición está listo.
La realidad: La temporada 2014 va a estar repleta de intentos y errores -- y no solamente en las decisiones.
Los managers y los coaches están preocupados puertas adentro por el hecho de que ellos no han tenido la posibilidad de practicar el proceso -- la manera en que la jugada en cuestión será repasada internamente, con alguien nombrado por el equipo para ver la repetición y luego avisarle a la gente en el dugout que la jugada pudo haber sido mal cobrada para que el manager luego pueda hablar al respecto con el umpire. Sin embargo, los managers -- y también los umpires -- estarán descubriendo las peculiaridades del nuevo sistema de desafíos en el principio de la temporada ya que dicha tecnología no estaba a su disposición antes o durante los entrenamientos primaverales.
Los managers denotan en privado que hay varias áreas grises en el sistema de las que ellos intentarán aprovecharse, y un montón de áreas grises podrían llegar a ser interpretadas de distintas maneras por cada umpire.
Por ejemplo: Los desafíos se supone que deben hacerse de manera 'puntual'. ¿Pero qué significa eso? ¿Será la idea de la puntualidad de Ángel Hernández distinta a la de Greg Gibson?
Que las Grandes Ligas hayan reconocido desde un principio que la revisión de jugadas utilizando la repetición instantánea será algo que mejorará día a día, ya que eso le permitirá ser abiertos a las críticas a los encargados de MLB y discutir las debilidades que posee el sistema como parte de una serie de críticas constructivas.
Richard Sandomir escribió aquí sobre cómo funcionaría el sistema. Una parte de su artículo dice lo siguiente:
El manager debe salir del dugout y decirle al umpire que está desafiando el veredicto de la jugada. Él no puede gritarle su pedido desde el dugout. Él no puede lanzar una banderita o semillas de girasol. Él sí puede discutir la jugada pero debe responder sí el umpire le pregunta "¿Vas a desafiar la jugada o no, amigo?"
Cada manager contará con un desafío por partido, pero sí su desafío es correcto, él recibe otro adicional. Es la obligación del manager el especificarle al umpire la jugada que está desafiando y puede pedir que se repase más de un solo aspecto de ella.
Existe una larga lista de cosas que pueden y no pueden ser desafiadas. Por ejemplo, algunas jugadas que sí se pueden desafiar son outs forzados, jugadas de contacto para un out, un doble por regla, saber si un bateador en verdad fue golpeado por un lanzamiento, y la potencial interferencia de un simpatizante.
Sin embargo, los movimientos en falso de un lanzador antes de lanzar, foul tips, bolas y strikes y la denominada "jugada del vecindario" en segunda base durante una doble matanza forman parte de una lista todavía más extensa de jugadas que no pueden ser cuestionadas.
61 jugadas fueron revisadas y 11 de ellas fueron cambiadas durante las pruebas ejecutadas en los juegos correspondientes al entrenamiento primaveral -- las cuales involucraron a camiones satelitales ubicados afuera de cada parque en vez de al centro de operaciones de Manhattan -- hasta el martes pasado. 49 de las jugadas revisadas llegaron como consecuencia de desafíos de los managers, y las otras 12 fueron iniciadas por el encargado de los umpires (lo cual solamente puede ocurrir de la séptima entrada en adelante).
Aquellos involucrados con el día a día de las Grandes Ligas creen que la mayoría de las jugadas desafiadas serán jugadas de outs forzados o de contacto para un out.
Joe Torre, el ex manager de los Yankees que ahora es el vicepresidente ejecutivo de la MLB a cargo de las operaciones relacionadas con el béisbol, dijo que el sistema fue diseñado para preservar el deseo "instintivo" de los managers de discutir algo cobrado y para crear un remedio que revierta las jugadas que eran cobradas incorrectamente pero que no podían ser enmendadas en el pasado.
"Podría llegar a haber una jugada repentina que el manager discuta para defender a su jugador, pero eso no significa que él necesariamente vaya a desafiarla", dijo Torre.
Mito No. 5: Justin Verlander es un lanzador que va colina abajo con su nivel.
La realidad: Él todavía no parece haber llegado al periodo de declive en su carrera. Verlander tuvo sus bajones y vio a la velocidad de sus lanzamientos disminuir un poco en el 2013, pero él siempre creyó que esto se debía a una falla relacionada con la manera en que él lanzaba -- y él lo comprobó con tres juegos dominantes durante una postemporada que lo vio permitir una carrera, 10 imparables en 23 entradas, otorgando tres boletos gratis libres y ponchando 23 bateadores.
Él no ha permitido ni una sola carrera en 20 entradas lanzadas con apenas ocho imparables y cinco pases libres esta primavera.
Verlander se ve tremendo, y tuvo otro juego dominante el miércoles.