BUENOS AIRES -- Todo lo que está pasando en el campeonato italiano de fútbol, el Calcio, no puede más que tenerlo feliz al Comisario Técnico de la selección azzurra, Césare Prandelli. En efecto, el hecho de que el torneo se encuentre prácticamente definido desde hace rato, le quita algo de desgaste a Juventus, que a su vez es la base del plantel nacional y que, por otra parte, está a tres partidos de un importantísimo título internacional, cereza ideal sobre el pastel del tricampeonato.
Al mismo tiempo, las principales figuras de la Nazionale están jugando y lo hacen bien: Balotelli crece semana tras semana, hasta desde lo actitudinal (que es su mayor límite), Pirlo administra su condición atlética con enorme inteligencia, los defensores de Juventus, Barzagli, Bonucci, Chiellini e Ogbonna, tienen rotación con Cáceres, Candreva anotó un doblete, Aquilani viene jugando y hasta anotando, al igual que Montolivo, Marchisio está ahora mucho mejor, Verratti y Motta brillan en PSG, De Rossi es la columna vertebral de Roma, Cerci e Immobile son la pareja más goleadora del torneo, Destro puja para ir y hay otros jóvenes como Insigne y Florenzi que también garantizan eventual recambio; además, están los Parolo y los Poli que aún sueñan viajar a Brasil.
Con tantos jóvenes en buena condición, los veteranos perdieron casi todas las chances. Gilardino debería ir casi seguramente, pero hasta Cassano, convocado en los 42 que hicieron la revisación médica en Coverciano, base operativa de la Azzurra, tiene pocas posibilidades, ni hablar de los varios Totti, Toni, Di Natale y Diamanti, que han quedado ya descartados en esa primera "lista amplia".
Pero Prandelli ya dejó muy claro que la principal dificultad para Italia será el aspecto físico. El entrenador italiano hizo verdadero tesoro de la experiencia vivida en la Condederation Cup pero también en la Eurocopa 2012, cuando Italia le hizo frente a España en el primer partido, pero llegó fundida y sin fuerzas a la final, perdida por goleada. Inclusive Don Césare está pensando seriamente en un plantel que pueda garantizarle la máxima rotación posible, sin que eso afecte el funcionamiento, con dos jugadores de características muy similares por puesto.
"Van a jugar los que estén mejor físicamente", viene repitiendo hace rato, más aún desde cuando la urna volvió realidad su peor pesadilla, es decir, un primer grupo enteramente a disputarse en condiciones climáticas extremas. Algo que, aún en la hipótesis de clasificación, tendrá seguramente un impacto sobre la condición del plantel en el resto del torneo, si es que su comandante no logra realizar una rotación inteligente y que no afecte el potencial global del equipo.
En suma, el torneo le hizo un lindo regalo a su representante azzurro, pero sigue manteniendo algunos puntos de interés. Especialmente en la lucha por la cuarta, quinta y sexta plaza, puesto que en ese segmento hay equipos que parecen estar recuperando la memoria o que siguen sorprendiendo, más allá de los resultados cambiantes semana tras semana. Vale la pena recordar brevemente que quinto y sexto puesto entregan un pasaporte para la Europa League, pero lo hacen de manera diferente, uno jugando (el sexto) el primer compromiso oficial a fin de julio y el otro casi un mes después. Teniendo presente que el Mundial termina sobre la mitad de julio, está claro que jugar un preliminar a fin de ese mismo mes sería un desastre para quien tiene muchos jugadores mundialistas.
Inclusive Inter o Milan, aún llegando sextos, casi perderían plata, porque no podrían hacer la gira prevista por los Estados Unidos en ese mismo período, con una ganancia de casi 5 millones de euros. Considerando que la UEFA League garantiza poco más que el doble de esa cantidad, y eso sólo en caso de triunfo final, está claro que llegar a Europa vía sexta plaza sería un consuelo de tontos para los primos milaneses, puesto que no garantizaría mayores ingresos y complicaría enormemente toda la temporada. Obviamente, el clásico, dentro de dos fechas, tomará enorme importancia en esta discusión, sobre todo si Milan pudiera mantener las distancias en la próxima fecha.
En cambio, la sexta posición podría ser un premio apetecible para Parma, que como algunos recuerdan tiene misma cantidad de títulos internacionales (2 Europa League, una Recopa y una Supercopa europea) que nacionales (3 Copa Italia y una Supercopa nacional), hecho más único que raro.
También el descenso está interesante: Catania tenía una última chance de seguir soñando y no la desperdició, con un triunfo que, como en las lindas épocas, tuvo que ver con sus delanteros argentinos, un golazo de Leto y el tanto decisivo de Bergessio. Ahora la permanencia queda a cinco unidades: Catania colero con 23, Livorno anteúltimo con 25, con 28 Bologna y Sassuolo y con 30 Chievo. Faltan 12 puntos para asignar, realmente podría ocurrir cualquier cosa.
Cerramos con una mirada a los sudamericanos: Tévez e Higuaín no jugaron, al igual que Vidal, Cuadrado se cargó el equipo al hombro, pero el técnico lo hizo jugar en una posición que no lo favorece. Importante y lindo fue el gol de Ibarbo, que de hecho le garantizó la permanencia a Cagliari. Fue convocado por primera vez Zúñiga: esperemos que pueda jugar, para él sería lo máximo poder estar en la final de Copa Italia. Isla jugó 80 minutos en nivel aceptable. Iturbe la rompió otra vez y, sobre todo, expuso cruelmente los problemas que tiene Yepes con los delanteros ágiles y veloces, como antes había mostrado Gervinho.
En suma, inevitablemente, aún en el torneo más difícil del mundo y con tantas cosas todavía por decidirse, las cabezas se van hacia el Mundial, ya demasiado cerca como para no cubrir con su sombra lo que ocurrirá en este último segmento del campeonato. Exactamente la misma razón por la que, en este comentario, se habló antes de selección que del resto. Nuestro cielo, lenta pero inexorablemente, se va tiñendo de Azzurro.