SANTO DOMINGO -- Las cosas han cambiado dramáticamente para el toletero dominicano Nelson Cruz… casi en un abrir y cerrar de ojos.
Cruz siempre ha sido considerado un excelente bateador que causó estragos a los lanzadores rivales en la Liga Dominicana de Béisbol, con los Gigantes del Cibao, el equipo de San Francisco de Macorís.
Su paso a las Grandes Ligas, sin embargo, no fue tan "suave" como él mismo hubiera querido.
Los Rangers de Texas, por mucho tiempo, fueron renuentes a darle una oportunidad a tiempo completo luego de adquirirlo desde los Cerveceros de Milwaukee en un cambio previo a la temporada del 2006 y en el que estuvo involucrado el relevista dominicano Francisco Cordero y el inicialista panameño Carlos Lee.
No fue sino hasta el 2009 cuando, luego de intentar convertirlo en lanzador, los Rangers decidieron darle la oportunidad a Cruz.
Cinco años con los Rangers , 135 cuadrangulares y una suspensión por 50 partidos por su relación con la clínica Biogenesis pusieron a Cruz en una encrucijada complicada previo a la temporada del 2014.
Tras rechazar la oferta calificada de los Rangers, el nativo de las Matas de Santa Cruz buscaba un contrato multianual en su primer año de agencia libre.
¿El resultado? El mercado se desvaneció para él y tuvo que conformarse con una oferta de US$8 millones por un año con los Orioles de Baltimore.
La respuesta de Cruz en los primeros dos meses de temporada ha sido impresionante: es el líder de cuadrangulares de las mayores, con 20, y de empujadas con 52. También lidera en slugging con .672 y en OPS con 1.055.
Todo luce indicar que la del 2014 será la mejor temporada de su carrera, pero obviamente es mejor esperar a que el año siga avanzando ya que lo mismo estaba pasando en el 2013 antes que su campaña se viera cortada por la suspensión.
Con 33 años de edad, Cruz tendrá la oportunidad de probar el mercado nuevamente cuando termine la campaña y obviamente que su caso será mucho mejor que el invierno pasado.