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Episodio II

España, con Xavi Yoda y Obi Wan Alonso, va por su segundo título Ilustración Sebastián Domenech

Sudáfrica fue su batalla más exitosa. Una serie de enfrentamientos en los que supieron demostrar que la mente y el control resultan mucho más importantes que La Furia cuando uno busca una Copa del Mundo. Tanto Xavi Hernández como Xabi Alonso fueron una parte integral de aquella España campeona en 2010. Lejos del lado oscuro, los maestros Jedi de la Roja aprovecharon la Fuerza de la mejor manera.

El sabio veterano del Barcelona buscará dar otra lección a los jóvenes aprendices, muchas veces engreídos y con ínfulas de saber lo suficiente, que lo miran como si su mejor tiempo ya hubiera pasado. Como Yoda, su imagen puede ser engañosa. Aunque no parezca muy ágil, él sabe que puede marcar la diferencia con su experiencia y con su cabeza.

Alonso, en cambio, es una pieza de sacrificio. Dentro de la cancha podría morir por la causa, como Obi-Wan Kenobi. Y aunque sabe que nunca será un personaje principal, también tiene claro que su rol es central para que la trama llegue a buen puerto. Aunque no luzca. Aunque por momentos los espectadores se olviden de él. Su función está clara, él la cumple sin resistencias, desde un segundo plano, para que su país tenga una chance real en esta Guerra de las Galaxias futbolísticas.