CERVINIA -- Un día con más de 4,000 metros de desnivele redefinió el podio del Giro de Italia con un Fabio Aru montado en el orgullo para ganar la etapa que le debía a la gran afición italiana que se le ha volcado en apoyo. Esta salida de la maglia blanca fue el sacrificio de Mikel Landa para que su joven capitán ocupara la segunda casilla de la general mientras el corredor español se quedaba haciendo la guardia con Alberto Contador. Esta pasividad que se dio al cierre -- no sin antes Contador probar romper el grupo-- le permitió a Ryder Hesjedal salir primero para intentar con enésima ocasión la victoria de etapa. Pero atrás con más corazón que otra cosa Aru decidió tomar la oportunidad a poco más de 7 kilómetros de meta y en poco tiempo alcanzó al canadiense para luego seguir de frente de camino. En ese grupo de la maglia rosa se encontraba en un mejor día Rigoberto Urán y aunque tuvo que trabajar desde atrás para alcanzar por los ataques comentados Rigo se mantuvo firme en su paso para rebasar y ponerse tercero en la fila de ascenso a la meta en Cervinia.
Fue como si le regresará el alma al cuerpo al antioqueño que a pesar de una forma diezmada por la enfermedad y la caída se me tiene en carrera precisamente para recuperar esa posición que siempre ha tenido en el Giro que es la del protagonismo. No hubo forma de recortar para disputar la etapa pero es un gran incentivo para Rigo y sus fans tenerlo ahí adelante en una llegada en alto.
"Me sentí bien y cómodo. Cuando empezaron a atacar respondí. Estábamos con seis corredores. Pero cuando atacaron de nuevo no pude seguir. Decidí llevar a mi ritmo y recuperarme. Me encontré en el camino Amador, Nieve y Kangert. Colaboramos con Amador, pero él perdió contacto con nosotros en la subida. Yo estaba allí sólo con Nieve y Kangert. Ellos tenían compañeros de equipo adelante así que estaba claro que harían nada para comprometerlos. Así que en el túnel decidí atacar. Al final del túnel pude ver Contador y los otros. Ataqué y volví al grupo maglia rosa. Luego, cuando llegué allí, sabía que Aru ya se había ido junto con Hesjedal. En ese momento me hice mi mejor esfuerzo y me fui inmediatamente y tomé un pequeño hueco. Realmente hice todo lo que pude y al final entré tercero. Por lo tanto, teniendo en cuenta todo, estoy contento. Como ya dije, el Giro termina el domingo, cada etapa es una oportunidad. Cada día vamos a luchar, a pesar de todos los problemas que hemos tenido aquí en este Giro. Para ser honesto, estoy feliz de haber podido estar con los mejores y terminar la etapa entre los pilotos de cabeza del pelotón ", puntualizó Rigo.
Por otro lado difícil manejar una dualidad de posibilidades en el Movistar con un Giovanni Visconti buscando presencia en su país que no pudo tener hasta ahora en la fuga buena del día. El italiano salió del top 10 hace unos días pero tenía una renta de puntos en la clasificación de la montaña y con más de 100 puntos de primer lugar en disputa había que intentarlo mientras el resto del equipo se quedaba a cuidar de Andrey Amador. El tico sabía que tendría que aguantar el ritmo que le pusiera el Astana, un equipo que hoy buscó mas la victoria de etapa dando ya por sentado que hacerle daño a Contador le fue prácticamente imposible. Con Visconti coronando los dos primeros puestos de 1ª categoría -- el segundo y más difícil en solitario--- el equipo atrás intentó bloquearle a Steven Kruijswijk los puestos más altos de cruce para quitarle la posibilidad de defender la maglia azzurra al holandés.
Andrey estuvo al inicio de la última subida cuidando las espaldas de Aru, pero cuando empezaron los tirones a unos 9 kilómetros de la meta ya el ritmo que podía seguir Amador era el propio para limitar un daño mayor tomando en cuenta que otros corredores de top 10 como König, Hesjedal y Kruijswijk podrían acercarse a su posición de la general. Un trote duro para el tico que como todos ya acusa cansancio.
El que uso una gran etapa con todo y un duro golpe en la rotula izquierda fue el venezolano Yonathan Monsalve quien hizo top 15 en la etapa y subió a la casilla 28. Una tremenda actuación para el ciclista criollo que recuperó un segundo aire en esta última semana.
También termino Sebastián Henao que traía una dolencia por una caída de ayer, el equipo le había recomendado no seguir en carrera pero con la llegada final tan cerca el antioqueño no quiere tirar la toalla.
Aun queda una etapa de montaña y aunque el Finistrere tiene su encanto se ve difícil la modificación del Top 10. Lo que será emocionante es saber quién puede ganar esta última jornada.