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Banderas en el corazón

LA SERENA -- "Para la gente es sentir al ídolo cerca. Con la tela creen que Messi está ahí, al alcance. Es una emoción tremenda".

Si algo le sobra a Hernán es emoción. Habla con pasión, la misma que motoriza el proyecto. Acompañado de Hernán y Pablo, todos oriundos de Santiago, llaman la atención con sus banderas de Messi, Maradona y Mascherano. También forman parte Ramiro y Sergio, que no consiguieron entradas para presenciar Argentina-Paraguay en La Serena.

"Leyendas" es una iniciativa que ya cuenta con unas 500 telas que retratan a deportistas que han marcado un hito a lo largo del tiempo. 80 de ellos son chilenos. El fútbol acapara 300. Las guardan embolsadas, en cajitas, separadas por disciplina y por país.

La selección de los personajes no es sencilla. "Partimos de logros y también de sentimientos. No siempre hay acuerdo", admite Hernán. Primero eligen una buena foto y la creación tarda de dos a tres semanas. En lo que sí concuerdan es en mantener en secreto al autor. Se lo denomina "El hombre del pincel".

Rafael Nadal autografió su tela en el ATP de Viña del Mar y posó para una foto. Ya estuvieron en el Mundial de Brasil 2014 y en el debut de la Copa América con las telas de Vidal, Bravo, Medel y Alexis Sánchez. Después de Argentina-Paraguay planean estar en Colombia-Venezuela, en Rancagua, con las banderas de Valderrama, Falcao e Higuita. "No alcanzamos a terminar con James", admiten con resignación.

El grupo está en búsqueda de recursos pararecorrer su país y transmitirle a los niños la historia de los mejores exponentes del deporte. Claro que el sueño ambicioso no se detiene ahí. Ya imaginan la chance de poder viajar por Sudamérica, Europa y el resto del mundo. Aspiran a promover un museo itinerante y culminar con una gran exposición en la capital chilena.

A Hernán lo emociona contar sobre "Leyendas" y se sensibiliza al expresar su fanatismo por el 10: "¿Messi o Maradona? Diego siempre va a estar un paso más adelante y un escalón más arriba. Cuando vino a un programa de Chile, le tiré la bandera en la escalera. La pisaba o la firmaba. Por suerte agarró el lápiz. Sólo me faltó la foto".

No se quedó conforme con eso: "También le regalé la tela a Dalma, cuando la fui a ver en La Hija de Dios, una obra extraordinaria. Para un Maradoneano es lo máximo".

"Estar con Diego sería un sueño. Tener una foto sería maravilloso. Le querría agradecer todo lo que viví con él".

Sería la forma perfecta de coronar el proyecto.