VIÑA DEL MAR (Enviado especial) -- Recorrer la cuenta de Instagram de Marcos Rojo permite identificar rápidamente sus grandes pasiones: la familia, los amigos y el fútbol.
En el día previo al Argentina-Colombia por los cuartos de final de la Copa América, la foto subida por el lateral izquierdo en “marcosrojo” no es una selfie, no incluye a compañeros en la concentración ni nada por el estilo. Se lo ve abrazado a seres queridos y lo describe así: “La visita mas hermosa de todas , gracias a todos por estar siempre acompañándome !!!”
La visita mas hermosa de todas , gracias a todos por estar siempre acompañándome !!!
Una foto publicada por Marcos Rojo ⚽️ (@marcosrojo) el
Un rato después del encuentro, su mujer Eugenia, su hija Morena, su hermana Micaela y los amigos Gastón y Bahiano le contaron sus sensaciones a ESPN.com. “Se sintió acompañado. Quiere jugar ya”, arrancó Bahiano, el más desinhibido. “Hay mucha fe, lo vimos muy bien. Nos puso contentos a nosotros y nosotros lo pusimos contento a él”, resumió Gastón sentado en el sillón del lobby del hotel en el que se hospedan.
El grupo llegó el miércoles a Santiago e inmediatamente se trasladó a Viña del Mar. La idea es quedarse hasta donde llegue la Selección. A la espera de lo que depare la noche del viernes en Sausalito, buscan vuelos. Bahiano no tiene dudas: “Vamos a pasar”.
La nueva rabona de Marcos no podía quedar afuera de la charla. Eugenia la vio por televisión, en la casa de su suegra: “Nos empezamos a reír y la mamá dijo que es un crack”. Gastón recordó que cuando la hizo en el Maracaná, en el debut del Mundial, pensó que estaba “loco”, pero ahora no se sorprendió. “Es un fenómeno. Por algo está donde está, ¿no?”, reflexionó Bahiano.
¿Cábalas? “Somos bastante resultadistas”, aseguró Gaston. “Pongo una bandera argentina siempre abajo del televisor. Lo hice también en el Mundial. Ahora está colgada en la ventana que da a la avenida”, contó el fanático de Estudiantes, como no podía ser de otra manera. Bahiano, hincha de Gimnasia, también habló de la bandera de Las Malvinas, el club de la infancia del jugador de Manchester United.
La visita se produjo justo a un año del gol de Rojo en el 3-2 a Nigeria en Brasil 2014. Las promesas siempre están. Gastón le anticipó a su amigo que va a hacer un gol: “Si lo hace, salgo en cuero a dar la vuelta a la manzana”. Bahiano no se queda atrás: “Yo me pelo”.
¿Qué queda si ganan la Copa América? Ya lo pensaron: “Si salimos campeones nos tatuamos la bandera de Argentina. Y si me pide que me tire al mar, me tiro...”. A Bahiano casi lo dejan adentro de la concentración. “El Tata (Martino) me dijo que me parezco a Funes Mori”. “Pegar, pega”, reveló Gastón. “Un poquito”, admitió el aparente clon de Rogelio y Ramiro.
“Mucho no nos llaman porque somos bastantes malos. Siempre estamos, aunque sea haciendo el asado”. La amistad, ante todo.
Mientras tanto, la pequeña Morena sigue sentada en el piso, con sus juguetes sobre una mesa baja. “Se emociona mucho cuando lo ve, le canta, le grita, le dice de todo. Y ahora cuando lo encontró estaba feliz. No lo dejó, estuvo siempre al lado de él, lo abrazaba, le daba besos, lo llevaba para todos lados. Es de ella”, dice la madre de la nena de 3 años.
En la foto que ya tiene más de 40.000 “me gusta” hay seis visitas. Pero en la entrevista participan cinco. ¿Y el restante? Kristian duerme plácidamente en un sillón. Lo conoció a Marcos en un shopping de Manchester y entablaron una gran relación. Para Gastón es “un personaje”. Bahiano cumple el rol de traductor por que “no entiende nada”. “Empezó a venir a casa y se quedó. Ahora es uno más de nosotros. Se vino a verlo a Chile y después va unos dias a Argentina”, agregó Eugenia.
Terminó la charla y el inglés que alienta por Argentina nunca se despertó. Todos coinciden en que por su nuevo fanatismo, si Kristian vuelve a Inglaterra lo van a matar. Por eso se tendría que quedar a vivir en La Plata…
Está claro que por su familia y por sus amigos, Marcos Rojo da todo.