BRISTOL -- Un compacto grupo con los protagonistas de la clasificación general midió el poder de los gregarios y la resistencia del líder del SKY en la segunda llegada en alto bajo una persistente lluvia. Casi todos coincidieron en que Chris Froome está perfectamente resguardado y que el binomio Porte-Thomas es quizás la mejor arma del maillot Jaune. Tanto el Tinkoff Saxo como el Movistar mostraron sus intenciones de aislar a Froome de sus dos escuderos y aunque el primero en ceder fue Richie, Geraint consiguió recuperarse a tiempo para no dejar solo a Chris por mucho tiempo.
Alberto Contador fue el primero en intentar decantar al grupo con el ritmo de subida impuesto por Rogers, Kreuziger y Majka --este último hizo el mayor daño--. El líder del TCS por fin salió del lote de los candidatos, pero su ataque fue controlado por el SKY.
“Estoy contento porque me estoy encontrando cada vez un poco mejor”, dijo Alberto al cierre de la etapa. “Sí que es verdad que me falta mucho, no tengo el punto de forma que me gustaría, pero hay que seguir sumando días y esfuerzos y quizá eso a la larga me pueda venir mejor”.
Aunque después de Contador salió Nibali, el escualo no significó ningún sobresalto para al grupo y lo dejaron ser por unos metros. La lluvia continuaba cayendo pero eso no enfrió los intentos del Movistar porque Alejandro Valverde realizó dos salidas y Nairo Quintana también puso la cara dos veces para ver si Froome mostraba alguna debilidad.
Aunque Thomas llegó a perder la rueda de su líder, Chris encaró los ataques ya dentro de los últimos 5 kilómetros. Geraint Thomas sabía que en algún momento habría presión.
“Cuando Quintana atacó pensé ‘oh no’, porque Richie ya no estaba y la carga me caía a mí. Afortunadamente, tuve piernas para responder y poco a poco regresé al grupo. Eso me motivó porque estaba recortando distancia, ¡nada menos que con Nairo! “puntualizó el excampeón olímpico de pista. Thomas ha realizado ese proceso que también hizo en su momento Bradley Wiggins, quien de los velódromos pudo conquistar un Tour de France. Geraint, este año en clasificación general terminó 5º en la Paris Niza detrás de su coequipero Richie Porte, y luego 2º en la general de la Vuelta a Suiza detrás de Simon Spilak (KAT).
Uno que no se movió pero que aguantó los arrancones fue Tejay Van Garderen, quien se imaginó que el SKY estaría en posición de neutralizar todos los ataques en Plateau de Beille. “Yo tengo poca gente que marcar, los que están más cerca de mi posición en la general”, dijo el líder del BMC. “Hice un buen trabajo estando siempre cerca y dentro de mis limites, así que nuestro plan sigue vivo”.
Adelante la batalla la ganó la experiencia, las piernas y la bravura de Joaquim Rodríguez (KAT). El gran Purito supo acomodarse en la fuga numerosa del día donde a final de cuentas dos de los mejores escaladores se unieron a su causa en la subida del premio de categoría especial; Fuglsang (AST) y Bardet (AG2). El corredor del Katusha apretó las tuercas ante la escasa colaboración del francés y aunque Jakob también dejó a Bardet atrás, ya nunca pudo alcanzar al catalán que nunca bajo el ritmo. Puede ser que estas dos victorias de etapa para Purito pueden nivelar el balance ante la ausencia de su acomodo en la General, pero ahora también está bien acomodado en la clasificación de la montaña, un maillot que ya portó durante la primera semana.
A las espaldas del grupo principal llegó Eduardo Sepúlveda (BSE) quien con el ritmo que marcó en su lote Tony Gallopin (LTS) subió el difícil ascenso. El corredor argentino está mostrando grandes arrechos en esta segunda semana de Pirineos, en un Tour de France en el que se estrena y que además será su primera carrera de tres semanas. Balito inspira a pensar que su categoría de líder puede tener muy pronto acomodo en otras filas con mayor proyección. En algún momento se planteó su futuro en el World Tour con el Cannondale pero la fusión del equipo con Garmin dio un giro a su decisión. De cualquier forma Sepúlveda sigue subiendo posiciones en la CG, ahora es Top 20 y 4º en la clasificación de los jóvenes.
El tercer corredor de Latinoamérica en cruzar la meta fue Jarlinson Pantano (IAM), quien si bien no es un extraño en las grandes, si está viviendo su primer ronda gala. Esta semana ha sido de aguantar para colaborar la posición de su líder.
“Pudimos limitar el daño que sufrió Mathias aunque se hicieron las condiciones aún más difíciles por el calor, la lluvia y a veces granizo”, dijo el caleño. “La escapada se armó bastante rápido, pero eso no hizo que nuestro trabajo sea más fácil. Sky mantuvo un ritmo constante y el sol literalmente nos cocinó hasta que llegó la lluvia y la temperatura bajó. En la subida a Plateau de Beille, hice todo lo posible para ayudar a Mathias y luego monté a mi propio ritmo, junto con Castroviejo . Me sentí bien y espero que continúe así. El tour está lejos de terminar y todavía puede soñar con un top 10 para Mathias quien hoy no pudo quedarse con los más fuertes. Yo y tampoco pude seguir el ritmo impuesto por Sky". Pantano se mantuvo 27º en la general, pero como el mismo colombiano apunta el final aún está a nueve etapas.
El día fue tremendamente difícil para Rigoberto Urán (EQS), después de haber sufrido insolación y golpe de calor por dos días consecutivos, el arranque de la etapa terminó por frustrar las intenciones de tomar un ritmo en el grupo principal. Las temperaturas de más de 35 grados con las que se arrancó la etapa limitaron a Rigo a seguir un ritmo básico y terminó la etapa con Mark Cavendish y el grupetto de los sprinters. Aunque Rigo sabe que la clasificación general se complicó desde la etapa 10, aún queda en su lista por cumplir intentar una victoria de etapa que hoy se le frustró a Michal Kwiatkowski. El polaco estuvo en la fuga y tomó la iniciativa de atacar de lejos sabiendo que otros escaladores en la escapada sería mejores que el campeón del mundo en la subida final. Y, efectivamente, esos especialistas alcanzaron al polaco para quitarle la ilusión a unos 6 kilómetros de terminar la jornada. Aun así, el Etixx Quick Step es el equipo con más victorias en la carrera por ahora con tres y esperan que la cuenta aumente.
Por enésima ocasión Winner Anacona (MOV) demostró que su selección a formar la novena del Tour está más que comprobada. Ha sido un tremendo gregario en los primeros kilómetros y además ha ayudado al poner ritmo a Nairo y Alejandro en los primeros kilómetros de Plateau de Beille.
La etapa 13 está cerca de los 200 kilómetros entre Muret y Rodez con el termómetro arriba de los 30°C. Varios columpios marcarán el camino que remate con tres premios de montaña de mediana dificultad. Uno de 3ª al kilómetro 131 y luego dos de 4ª Cat que culminan a 31.5km de la meta. En el último kilómetro hay una curva en forma de “S” y una pared de 570 metros a una media de 9.6% para terminar. Es otra oportunidad para las escapadas, en las que esperamos ver a uno de los latinoamericanos incluidos.
Clasificación de los latinoamericanos: 3º Nairo Quintana (Col-MOV) +3:09”, 20º Eduardo Sepúlveda (Arg-BSE) +28:19”, 27º Jarlinson Pantano (Col-IAM) +37:11”,35º Rigoberto Urán (Col-EQS) +48:02”, 85º Winner Anacona (Col-MOV) + 1h 27:38”, 146º José Serpa (Col-LAM) + 1h 52:48", 152º Julián Arredondo (Col-TFR) + 1h 57:16”.