Toronto se moviliza al ritmo de los Juegos Panamericanos en una ciudad multicultural, en la que encontrar cocina típica de la ciudad no es una tarea fácil, ya que estamos rodeados de los típicos fast foods o restaurants de otros tipos de cocina, como la italiana o la oriental.
Mas alla de que nos informamos que la gastronomía canadiense forma sus bases en la cocina inglesa y francesa sabemos que lo tradicional es Fiddleheads muy típico en Nueva Brunswick y Poutine originario de Quebec, así que no desmayaremos hasta encontrarlos y degustarlos.
No resulta fácil explicar, lo que resulta pasar de cubrir un evento deportivo de un solo deporte a uno multideportivo. En 2014 experimentamos lo que fue pasar en 48 horas de cubrir Roland Garros, a cubrir el Mundial de Brasil 2014, y más allá de que eran dos grandes eventos de dos deportes diferentes la sensación no es la misma hoy, que pasamos de cubrir Wimbledon a estos Juegos Panamericanos de Toronto. No sé si es porque es mi primer evento multideportivo, o si por ser un verdadero amante de los deportes, me encuentro abrumado por la oferta.
Otra cosa que realmente abruma es como la tecnología ha pasado a ser "tan parte" de nuestras vidas, es en estos tipos de evento, donde nos reencontarmos con colegas a los que no veíamos desde hace un tiempo, donde nos tocó cubrir otros eventos, y me doy cuenta que si no los llamo por su nombre, pasaran de largo por mi costado sin siquiera darse cuenta que existo, ya que estan tan imbuídos en "su twitter" o en "su facebook" o en "su whatsupp".
Recuerdo que hace mucho tiempo le pregunté a mi padre cuales eran los programas de televisión que a él más le gustaban cuando era chico, y el me contesto: Hijo, en mi epoca de chico, no había televisión...recuerdo que mi mandibula cayó hasta el piso por la sorpresa. Hoy es la mandibula de mis colegas la que cae hasta el piso cuando les digo que no uso Twitter ni Facebook.
¿O sea que no tienes seguidores? Me preguntan.
¡Como no!, les respondo yo...los que me escuchan por la radio de lunes a viernes de 9.00 pm. a 11.00 pm., los que me llaman por telefono, los que me saludan por la calle, los que cuando se sientan a almorzar conmigo me miran a los ojos y no estan pendientes de cuantos más los están siguiendo...
Así termino y dejo la responsabilidad del relevo en manos de mi colega Gonzalo Aguirregomezcorta.