BRISTOL -- A pesar de que Aaron Rodgers perdió a dos de sus principales armas a la ofensiva, Eddie Lacy y Davante Adams, encontró la forma para ganar el partido para los Green Bay Packers en el último cuarto, y lo hizo con la precisión de su brazo.
Seattle no pudo mantener una ventaja en el último cuarto, como ocurrió en el Super Bowl, y terminó con su segunda derrota en esta temporada (no iniciaba 0-2 desde 2011, cuando terminaron 7-9). Los Seahawks se convirtieron en el quinto equipo de los últimos 25 años que inicia 0-2 después de que la temporada previa llegara al Super Bowl (último fueron Rams en 2002).
La ausencia de Kam Chancellor fue determinante una vez más en la defensiva de Seattle, que en el último cuarto le permitió a Rodgers lucir perfecto en sus envíos. En la serie que lograron la anotación y conversión de 2 puntos para irse arriba por 7 puntos, Rodgers terminó 9 de 9 con pase de anotación y pase de conversión de 2 puntos. Rodgers finalizó el último periodo con 9 de 9 para 91 yardas y pase de touchdown.
De esta forma, Green Bay sumó su décima victoria (incluidos playoffs) en fila en casa, para ser la racha en activo más larga en la NFL, además de que Rogers en esta racha suma 545 pases intentados como local sin intercepción, con lo extiende su propio récord. Rogers terminó el partido con 249 yardas y dos touchdowns. Por su parte, James Starks, quien tomó la titularidad por la lesión de Lacy, finalizó con 95 yardas por tierra, su mejor cifra desde la Semana 2 del 2013.
Seattle no pudo correr el balón con Marshawn Lynch, quien terminó con 41 yardas en 15 acarreos (ambos sus registros más bajos contra los Packers), después de que había sumado 267 yardas en los últimos dos partidos contra Green Bay, incluida la Final de la NFC.
Mientras el ataque de Seattle no sea capaz de correr el balón, no podrán atacar con Jimmy Graham, ala cerrada, quien llegó agencia libre y no ha sido, hasta ahora, factor en la ofensiva. Seattle logró dos anotaciones en las dos primeras series ofensivas de la segunda mitad, y en ambas avanzó el balón por aire, pero siempre o al menos en la mayoría de las jugadas engañando primero por tierra, pero no siempre funcionará; necesita balancear más su ataque.
Por otro lado, la defensiva ha tenido problemas en los últimos tres partidos (incluyendo el Super Bowl de la temporada pasada y frente a los Rams en la Semana 1) para mantener ventajas en el último cuarto. Sin juego terrestre y defensa que en los momentos claves, no se ve un buen futuro para Seattle, pero la temporada apenas inicia y hay tiempo para corregir.
Green Bay inicia 2-0, la última ocasión que lo consiguió se fueron 13-0, para terminar la temporada con marca de 15-1.