Noventa minutos después de haber comenzado las semifinales, las cosas no han cambiado: Rayados sigue siendo el favorito, pero el América tiene una ventaja que podría utilizar o desperdiciar mientras avance el reloj este sábado en el nuevo estadio de Monterrey. El futbol se transformará en un juego mental. El América no saldrá del estilo que le ha dado resultados hasta ahora, y Rayados tendrá que ser paciente y contundente. Nos espera una buena jornada...
LOS ANGELES, CA -- Pocas cosas parecen haber cambiado tras los primeros 90 minutos de las semifinales. Monterrey sigue siendo el favorito para todo; para eliminar al América y para levantar el trofeo de campeón. De ahí a que logre ambas cosas, falta un buen trecho.
Ganar, ganar en casa. Eso es lo único que requiere un equipo que en la temporada regular tuvo tiempo de encabezar al torneo con 37 puntos, de ser el mejor local (7 triunfos y 2 derrotas) y de lograr la mayor cantidad de goles (38). Los Rayados no tendrían porque fallar cuando han mostrado una asombrosa regularidad durante la mayor parte del semestre.
Pero se trata de una zona donde las condiciones competitivas históricas del América pueden y deben contar y en una actualidad, habrá que decirlo y admitirlo, donde el equipo ha encontrado un método efectivo para jugar los partidos y para ganarlos. Nos guste o no, este cercano o lejano al estilo que debe tener un club como el América, Ignacio Ambriz tiene una fórmula que le da resultado: logra una ventaja basado en algunas de las grandes individualidades del equipo, se defiende con propiedad, consume el tiempo, le cede el control y la iniciativa del juego al rival, y luego 'lo mata' en un contragolpe letal. Así ha jugado el América y así promete jugar este sábado en el nuevo estadio de los Rayados.
No será fácil, de ninguna manera, para el América soportar el intenso desgaste físico y hasta emocional que tendrá en los 90 minutos de vuelta. Pero aunque podría, no quiere jugar de otra forma. Es ahí donde el América se siente seguro, protegido y fortalecido. Cambiar ahora parece, primero, imposible, y después, innecesario.
Las aspiraciones del Monterrey están depositadas en uno de los mejores ataque de toda la Liga: Cardona, Pabón, Funes Mori, más los volantes que se pueden agregar. Pero me parece que 'la llave' de los Rayados en el juego y en la eliminatoria dependerá de la paciencia que tengan para resolver el partido.
Monterrey sabe que tendrá oportunidades de gol, pero también sabe que el América buscará, en el contragolpe, una anotación que termine siendo un gran impacto en el marcador y en lo anímico. Debe tener calma, cuidado, mucha concentración, para no adelantar tiempos, situaciones y esperar... esperar el mejor momento para hacer daño y ganar el partido.
Monterrey y América tendrá una agónica lucha mental este sábado en el Estadio Bancomer. Aquel que no desespere, que no tome decisiones a la ligera y que sea contundente cuando se presente la ocasión, logrará el boleto para la final del futbol mexicano.
Las cosas no han cambiado, pero sí que se han condicionado para la vuelta: El Monterrey es y sigue siendo el favorito, pero el América tiene una ventaja y un plan de juego definido. El futbol se transforma en juego de ajedrez. Y aquí, quien realice mejor sus movimientos sobre el tablero terminará logrando el jaque mate de las semifinales.
@Faitelson_ESPN