En la superficie, luce como si Matt Harvey ha mejorado considerablemente en sus pasadas tres salidas. Su efectividad, que se había inflado a 6.08 en sus primeras 10 aperturas, es de 0.90 en esos tres partidos. Prácticamente ha logrado mejorar todas sus estadísticas.
Pero ¿será esta mejoría algo legítimo? Echemos una mirada a otras cosas para ver las diferencias de cuando Harvey tenía problemas y compararlas con este momento.
Sus lanzamientos
Harvey está lanzando la recta 1 mph más rápida (95.1 mph) en sus últimas tres aperturas que en los inicios de la temporada, y los contrarios tiene menor promedio de bateo ante ella (.188 en sus últimas tres salidas comparado con .336 en sus primeras 10). A pesar del aumento en velocidad, su tasa de abanicadas y falladas se ha mantenido consistente en un 16 por ciento.
Del mismo modo, el slider de Harvey no está logrando abanicadas y falladas adicionales, pero es un lanzamiento muy diferente a como lo fue en los inicios de la temporada, como se puede apreciar en la gráfica a la derecha. Y eso puede ser la diferencia más significativa en este momento.
Parece haber una diferencia prevista en el pitcheo. Tiene un poco más de similitud a un dardo alejándose para un bateador derecho y acercándose para un zurdo, quedándose con la zona de strike, como se puede ver en el mapa de zona caliente. Hay una estadística que explica esto muy bien. El slider de Harvey se estaba moviendo a 4.6 pies por segundo de forma horizontal mientras cruzaba el plato en sus primeras 10 aperturas. Pero ahora ha movido a 5.1 pies por segundo en sus últimas tres salidas.
Quizás esto explique la buena tasa de pelotas bateadas suave contra pelotas bateadas duro. Harvey permitió 17 pelotas bateadas suave y siete pelotas bateadas duro con su slider en sus primeras 10 salidas. En sus últimas tres ha permitido ocho pelotas bateadas suave y no ha permitido ninguna dura.
Acercamiento estratégico
Para sorpresa de nadie, dados sus números, Harvey ha sido un lanzador mucho mejor con gente en base en estas últimas tres aperturas. Los contrarios le batearon para .364 con hombres en base en sus primeras 10 salidas, pero en las últimas tres le han conectado para .250.
Harvey ha hecho esto sin recurrir al ponche. Su tasa de ponches del 6 por ciento en estas últimas tres salidas es menor de su tasa del 13 por ciento que logró en las primeras 10.
En estas pasadas tres aperturas, Harvey ha logrado éxito en su tasa de pitcheo a contacto con gente en base, provocando más rodados que ponches. Su tasa de rodados con gente en base ha sido de 64 por ciento en las pasadas tres aperturas. En las primeras 10 con gente en base, la tasa de rodados de Harvey fue del 40 por ciento.
Y ahora que ha vuelto a tener éxito con el slider, está utilizando más su repertorio de lanzamientos quebrados con gente en base, como lo demuestra su tasa de uso del 32 por ciento en las primeras 10 aperturas en comparación con el 46 por ciento en sus últimas tres.
La defensa
Pero siendo justos, no le podemos dar todo el crédito a Harvey. La defensiva de los Mets ha jugado mucho mejor detrás de él. El BABIP de los contrarios en sus primeras 10 salidas fue de .378. En sus últimas tres, ha sido de .170.
Y los Mets están logrando outs con pelotas bateadas suave en una forma que no lo hicieron en el arranque de la temporada. Harvey permitió 21 "hits suaves" en sus primeras 10 salidas, pero no ha permitido ninguno en sus últimas tres.
Una mirada al juego de esta noche
Algo que Harvey recibiría con gusto en sus siguientes aperturas - algo de apoyo ofensivo. Harvey ha permitido una carrera o menos en cada una de sus pasadas tres salidas, durante las cuales los Mets han anotado apenas tres carreras. Harvey está recibiendo 2.69 carreras de apoyo por salida, empatado con la tercera peor cantidad en todo el béisbol y por mucho la peor de todos los abridores de los Mets.
La buena noticia para él: Los Mets se medirán a un cuerpo de lanzadores de los Bravos que tiene efectividad de 4.58.