Justin Verlander y Félix Hernández son ganadores del Cy Young, pero nunca han chocado entre ellos luego de ganar sus premios Cy Young. Aunque ambos han estado en la Liga Americana desde 2006, el choque del miércoles en la noche entre los Tigres de Detroit y los Marineros de Seattle será apenas su cuarto entre ellos y el primero desde abril de 2009-antes de que alguno de ellos ganara el premio.
Ellos se encuentran de nuevo en puntos interesantes en sus carreras. La carrera de Verlander aparenta estar en una encrucijada luego de su mediocre campaña en el 2014 y su mal arranque en el 2015, ya que su alguna vez intimidante recta ya no lo es tanto. Pero terminó con fuerza en el 2015 y ha seguido de igual forma en esta temporada. No, ya no lanza a 100 mph, pero los resultados se asemejan al Verlander del 2011. Está segundo entre los abridores de la LA con promedio de los rivales de .214 y está quinto en tasa de ponches. El resurgir de los Tigres desde finales de junio ha sido gracias a Verlander, quien tiene marca de 5-0 y efectividad de 1.85 en sus últimas siete aperturas.
La velocidad de Hernández también ha bajado en años recientes y el promedio de su recta esta temporada anda por las 90.2 mph. Eso ha llevado a dos problemas: (1) Está lanzando menos rectas. Cuando ganó el Cy Young en 2010, lanzó la recta en el 63 por ciento del tiempo, pero este año esa tasa ha sido del 46 por ciento, y cuando la lanza no tiene mucho control de ella, lo que lo ha llevado a la peor tasa de boletos de su carrera; (2) su cambio, que luce más como una recta de dedos separados ya que la lanza en las altas 80 mph, se ha convertido en menos dominante, ya que tiene una tasa de ponches del 30 por ciento en comparación con el 52 por ciento en el 2010. Sigue siendo una buena arma - los bateadores le conectan para .187 - pero ya no es el arma dominante e imbateable que alguna vez fue.
Aun así, se las ha arreglado para tener efectividad de 3.55 (se perdió casi dos meses por lesión de la pantorrilla), y si los Marineros tienen alguna oportunidad de competir por uno de los comodines, ellos necesitan que el Rey Félix esté en su mejor forma.
He aquí una pregunta: ¿Pertenencen Verlander y Hernández al Salón de la Fama? Sus records de por vida:
Verlander: 169-103, 3.52 ERA, 50.8 fWAR
Hernandez: 149-105, 3.13 ERA, 50.4 fWAR
Hay dos maneras de mirar sus oportunidades para el Salón de la Fama. Según los duros estándares de la BBWAA, ambos se encuentran cortos en la actualidad. Mike Mussina ni siquiera llegó al 30 por ciento del voto y tiene 270 victorias y 82.2 fWAR en su carrera. Curt Schilling apenas superó en apoyo a Mussina y tiene 216 victorias, 79.8 fWAR y el reconocimiento como uno de los mejores lanzadores en la historia de la postemporada. Por alguna razón, la BBWAA ha trazado una dura línea para elegir a lanzadores abridores. El grupo cedió en el estándar de las 300 victorias para Pedro Martínez y John Smoltz, aunque Pedro tuvo el valor pico más alto en la historia para un lanzador, y Smoltz pareció recibir crédito extra por sus años como relevista, así que no estoy seguro de que sus casos sean demasiado ilustrativos.
La otra manera de mirar las carreras de Verlander y Hernández es que ellos son claramente dos de los mejores lanzadores de su generación. Daniel Marks escribió recientemente un artículo en el portal Bill James Online titulado, "¿Estamos frente a algún Lanzador del Salón de la Fama?"
Marks hace un examen de la historia y analiza cuántos lanzadores del Salón de la Fama estuvieron activos en un año cualquiera. Las dos mejores temporadas en ese aspecto fueron 1925 y 1966, y en ambos estuvieron activos 15 futuros miembros de Cooperstown. La menor cantidad - hasta el 2009 -- fue 1944, con apenas dos inmortales. Por supuesto, ese es el resultado de tener varios lanzadores como Bob Feller, Warren Spahn y otros en el ejército sirviendo en la Segunda Guerra Mundial. En 2008, Greg Maddux, Tom Glavine y Smoltz terminaron sus carreras (al igual que Mussina); en 2009, Pedro y Randy Johnson lanzaron su última temporada.
Así que ¿quiénes son los futuros lanzadores del Salón de la Fama desde 2010?
Clayton Kershaw es la respuesta fácil, a pesar que solo tiene 125 victorias en su carrera (pero ya tiene un 52.5 fWAR). Técnicamente, todavía no es elegible, ya que solo ha jugado nueve temporadas (necesitas estar activo en 10 temporadas para ser considerado para la boleta). Asumamos que supera su actual lesión y que tiene muchas más temporadas grandiosas en su futuro. Pero necesitamos más de un lanzador del Salón de la Fama de esta generación.
Por eso es que pienso que los votantes eventualmente aprenderán a ajustar sus estándares. El criterio de selección "automática" por las 300 victorias necesita ser descartado. Y no debes tener que llegar a las alturas de un Pedro o un Kershaw para poder entrar. Quizás Verlander y Hernández no han llegado ahí, pero estarían cerca con algunas temporadas adicionales sólidas. Es poco probable que alcancen las 300 victorias, quizás ni siquiera lleguen a las 250. Es duro ganar tantos juegos en esta era con temporadas de 32 aperturas y relevistas dominantes que limitan las entradas y las decisiones. Sin embargo, ellos son dos de los mejores lanzadores que hayamos visto.
Disfruten el juego del miércoles. Es un choque que no se da a menudo.