El 21 de mayo, el abridor de los Mets de Nueva York Jacob deGrom permitió cuatro carreras en cinco entradas ante los Cerveceros, una apertura que elevó su efectividad en la temporada a 3.07. Pero aunque seguía siendo un número respectable, deGrom no lucía bien. La velocidad de su recta había bajado, y sus boletos habían aumentado. Lucía como un lanzador fatigado por la carga de trabajo que llegó en octubre pasado.
Pero desde esa apertura, deGrom ha lucido de forma muy parecida al lanzador que brilló en 2014 y 2015. De sus últimas 13 aperturas, solo una, una derrota ante los Marlins, se podría clasificar como "mala" (permitió cinco carreras en 3⅔ entradas).
Está en el medio de una racha de ocho aperturas (la que incluye esa salida ante los Marlins) en la que ha logrado efectividad de 1.52. Ha permitido no más de una carrera en seis de esas aperturas y se movió a sí mismo en la periferia de la carrera por el Cy Young de la Liga Nacional al encaminarse a su apertura del sábado en la noche ante los Padres.
Muy consistente
DeGrom se ubicó cuarto en la LN en efectividad la pasada temporada y en la actualidad anda cuarto en la LN (2.35). En las últimas tres temporadas, su efectividad de 2.54 lo coloca cuarto en las mayores, detrás de Clayton Kershaw, Jake Arrieta y Zack Greinke.
Además DeGrom se ubica tercero en las mayores en OPS de los contrarios (.597) en ese periodo, detrás de Kershaw y Arrieta.
El fuego está encendido - de nuevo
La recta de DeGrom promedió 92.9 mph en sus primeras 12 aperturas. Eso representa unas 2 mph menos que su velocidad de 2015, pero en sus últimas ocho aperturas ha subido casi una milla completa por hora, a un promedio de 93.8 mph.
En esas primeras 12 aperturas, llegó a las 95 mph en el radar de televisión (lo que significa 94.5 mph o más) 77 en 77 ocasiones. En las últimas ocho aperturas, ha alcanzado ese número en 136 veces.
Los contrarios le batearon .184 a esas 136 rectas que registraron 95 mph o más y fallaron el 30 por ciento de sus swings. Promedian .245 con slugging de .327 ante todas sus rectas en su pasadas ocho aperturas con .290/.419 en sus primeras 12.
Un punto que vale la pena notar: El pitcheo ha mostrado más movimiento. En esas primeras 12 aperturas, tuvo 4.4 pulgadas de movimiento hacia la caja de bateo de los zurdos. En las últimas ocho, eso ha aumentado a 5.6, mucho más parecido al número de 5.3 pulgadas del año pasado. Los bateadores zurdos no han podido hacer los ajustes. En 54 turnos ante él en las pasadas ocho aperturas, ellos le batean para .200 sin extrabases.
El slider
El slider de DeGrom ha sido muy valioso durante esta corrida. Los contrarios lograron seis hits en sus primeros 16 turnos ante el slider de deGrom para comenzar la temporada pero desde entonces se han ido de 72-7. El promedio de bateo de los contrarios de .148 con dicho lanzamiento lo ubica en 10º puesto entre los lanzadores calificados para el título de efectividad.
Ese es el mejor de sus lanzamientos secundarios pero los otros dos (curva y cambio) tampoco son malos. DeGrom, Stephen Strasburg y Tanner Roark son los únicos tres lanzadores con efectividad calificada que, según las estadísticas de valor de lanzamientos de Fangraphs (que mide cuanto de cada lanzamiento evita carreras), tiene al menos una carrera salvada con rectas, curvas, sliders y cambios. En otras palabras, esos tres están entre los arsenales más profundos de cualquier abridor en esta temporada.
Jacob con el bate
Con la mejoría en el pitcheo también ha llegado la mejoría en el bateo. DeGrom abrió la temporada con 1 hit en los primeros 25 turnos, pero tiene cuatro hits en sus últimos nueve turnos, y dos carreras anotadas ante los Yankees en su última apertura.
DeGrom, un torpedero convertido en lanzador, batea de por vida .187, el séptimo mejor promedio entre los lanzadores con al menos 100 apariciones en el plato en las últimas tres temporadas.