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El América está obligado...

No puede malgastar la ocasión que tiene en la vitrina de un Mundial de Clubes. Lo que ocurrió hace 365 días debe quedar en el pasado. Es imperativo superar al equipo de Corea del Sur para ganarse el derecho de jugar ante el Real Madrid a media semana. El América parece tener hoy más argumentos que el invierno pasado, pero no debe menospreciar lo que tiene en el presente ni pensar demasiado en el futuro. Todo a su paso, a su tiempo, a su ritmo. Lo primero es lo primero: una madrugada de domingo en la que la victoria no vale tanto como la derrota.

LOS ANGELES, CA -- Lo único que tiene prohibido el América es desperdiciar la madrugada japonesa del domingo.

Todos, los americanistas y hasta los no americanistas, conocen las reglas del juego: una nueva derrota, una segunda caída consecutiva en la primera ronda del Mundial de Clubes sería interpretada como un serio y profundo fracaso. El precio del triunfo no se compara con el de la derrota. Vencer al equipo sudcoreano Jeonbuk es casi una obligación del representante mexicano, entendiendo que lo primero que no debe hacer el América es depreciar a su rival de este domingo. Si lo hace, el juego ante el Real Madrid estará muy lejos de transformarse en realidad.

A diferencia del invierno anterior, el América tiene hoy más argumentos. Hace un año, venía de ser eliminado en una dura batalla ante los Pumas por las semifinales del futbol mexicano. Había ciertas fracturas en el grupo que se manifestaron directamente en la cancha de Japón. Hoy, el América, tiene un entrenador sólido, líder, experimentado, que aunque no ha logrado impregnarle al cuadro su estilo, sabe, seguramente hacia dónde va y que tiene que hacer para consumarlo. El plantel es más o menos el mismo, con incursiones como la del ecuatoriano Renato y el argentino Silvio Romero. La duda impactante es la de Rubens Sambueza, que está dado de alta luego de la lesión en el inicio de la Liguilla ante las Chivas. Este América, en términos generales, luce mejor que el de hace 365 días.

Más que representar al futbol mexicano, el América representa los intereses deportivos y económicos de la Liga MX. Es un club forjado justamente en el estilo y en las formas de los nuevos tiempos que plantea el futbol de México. Una base extensa de futbolistas extranjeros en todas las líneas y algunos mexicanos de reconocido nivel doméstico. El América puede y debe mostrarnos los avances que ha tenido, indudablemente, el futbol mexicano a nivel de clubes en los últimos años.

Por el gran desequilibrio que existe en el futbol internacional, el Mundial de Clubes es una gran mentira de la FIFA, pero también es una excelente ocasión y una de las pocas vitrinas --hoy que ha decidido dejar la Copa Libertadores-- que tiene el futbol mexicano, a nivel de equipos, de mostrar su valía y su competitividad.

El América no puede desperdiciar la madrugada japonesa del domingo. Debe mostrarse, pleno, decidido, contundente, brillante y debe superar al equipo de Corea del Sur. Ya habrá tiempo, después, de sacar conjeturas y de darle probabilidades reales de hacer un buen papel ante el Real Madrid. Primero lo primero ¡Y mucho cuidado!

@Faitelson_ESPN