Firmar a Edwin Encarnación es una mejoría colosal en el puesto de bateador designado para los Indios de Cleveland, quienes llegaron a la Serie Mundial a pesar de una temporada por debajo a lo esperado de parte de Mike Napoli, cuyos números de .239/.335/.465 estuvieron por debajo del promedio de la Liga Americana para los designados (.254/.328/.452), incluyendo jugadores a tiempo parcial y sustitutos.
En 10 juegos más y 57 apariciones más, Encarnación logró 12 dobles más que Napoli, ocho jonrones más, nueve boletos más, y 56 ponches menos, junto con ventajas cómodas en cualquier estadística que importe, incluyendo 30 puntos en el wOBA y una ventaja de 134 a 113 en el wRC+ ajustado por estadio. Encarnación fue simplemente mejor, por mucho, y es una mejora de más de dos victorias para Cleveland incluso si asumimos un declive relacionado a su edad a sus 34 años.
Yo escribe al principio de la temporada baja que Encarnación era una buena apuesta para tener algo de declive relacionado a la edad debido a que es un jugador con "herramientas de hombre viejo", logrando valor con boletos y poder, pero con muchos ponches y sin traer a la mesa velocidad o defensiva. Yo solía argumentar eso mientras él andaba en búsqueda de un acuerdo de cuatro años y $80 millones, me reía de esos términos; en cambio, Cleveland lo logra firmar por tres años y unos reportados $60 millones en general, con la oportunidad de que sean cuatro y $80 millones si ejercer su opción de $20 millones (con cláusula de salida por $5 millones) para el 2020.
Pero de todos los equipos potencialmente interesados en Encarnación, Cleveland tiene el máximo potencial de ganar con su presencia, tanto en el terreno como financieramente, en el 2017: Ellos ganaron el banderín de la Liga Americana, ellos tendrán esencialmente el mismo roster el año que viene pero con pitcheo más saludable, y acaban de mejorar en su hueco más grande que tenían en el terreno. La ganancia marginal de las dos a tres victorias adicionales que acaban de conseguir es enorme - esas podrían ser victorias que fácilmente les traigan la división, o un juego extra de playoffs en casa, o en el peor de los escenarios un puesto de comodín. Si los devuelve a octubre, en el Año 1 ellos habrán recuperarían gran parte de esa garantía de $65 millones y entonces podrían manejar la probabilidad de que para el Año 3 él ya no sea más un jugador de $20 millones.
Los mayores perdedores aquí son los Azulejos de Toronto, el antiguo patrono de Encarnación. Los Azulejos se metieron de lleno al mercado de agentes libres demasiado temprano este año y firmaron a un jugador que no es ni una cuarta parte de lo bueno que es Encarnación por más de la mitad del precio. Kendrys Morales ni siquiera fue un jugador con un WAR de una victoria el año pasado, y en el 2014 tuvo un OBP de .274, pero los Azulejos le dieron tres años y $33 millones - así que estarán pagándole el 55 por ciento de salario de Encarnación para que produzca quizás el 25 por ciento de su valor, quizás menos. Los Azulejos no se pusieron más jóvenes, y no se comprometieron con menos años. Ellos ahorraron dinero, pero el equipo empeoró. Por lo general no me gustan las firmas de agentes libres en noviembre, las que en ocasiones llegan antes de tener un sentido real de la dirección del mercado en ese invierno, pero esta parece realmente una firma muy a sobreprecio, especialmente con tantos jugadores parecidos - incluyendo a Mark Trumbo, Pedro Alvarez o incluso la cara familiar de José Bautista -- todavía disponibles.
El equipo que debe ser ahora más activo en ese segmento del mercado debe ser los Vigilantes de Texas, quienes parecían ser un destino lógico para Encarnación ya que fueron un equipo contendiente sin un obvio titular en su roster para la primera base o el puesto de designado, aunque ellos tienen varios jugadores (Jurickson Profar, Joey Gallo, Ryan Rua) que podrían ser utilizados en comité o compartiendo tiempo de juego en cualquiera de las posiciones.
No creo que Álvarez sea una mejor apuesta que Gallo, ya que son bateadores parecidos y yo no sé si la predictabilidad de Alvarez valga la pena por el aumento de costo sobre la ventaja de Gallo. Y por supuesto Bautista tiene su historial con el intermedista de los Vigilantes Rougned Odor, aunque algunas heridas sanan rápidamente con dinero y victorias. Pero en alguna parte está la oportunidad real para los Vigilantes de mejorar en una o dos victorias a un costo relativamente bajo, especialmente si alguien como Bautista está dispuesto a aceptar un acuerdo de un año para recuperar su valor - si no es en Texas, quizás en Tampa Bay, donde podría convertirse en una interesante ficha de cambio en julio si logra recuperar algo de su forma previa al 2016.