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El futbol volverá... La pregunta es: ¿Cómo?

Es cuestión de horas o de minutos para que se anuncie que se juega a partir de este martes los octavos de final de la Copa MX, pero la gran cuestión es saber si todo este movimiento que han hecho los árbitros servirá, finalmente, para generar los cambios que tanto requiere el futbol mexicano en muchos de sus rubros. Está claro, que a partir de los problemas que se ha suscitado en las Comisiones de arbitraje y de disciplina, el futbol mexicano requiere urgentemente de una revisión y de una reorganización. Este fue un aviso importante. ¿Harán algo o echaran, como siempre, la basura debajo de la alfombra?

LOS ANGELES, CA.- No es un simple partido de futbol, pero puede que, al final del día, y después de todo, haya espacio para un ganador.

El termómetro indica que algo o que muchas cosas andan mal en el futbol mexicano. La temperatura se elevó desde uno de los sitios más delicados y vulnerables que tiene nuestro futbol: la Comisión de Árbitros y la de Disciplina, justo el sitio neurálgico desde donde se debe impartir, cuidar y hacer prevalecer la justicia.

Verlo como un "simple" levantamiento y parón de los árbitros es tener una visión muy limitada o no querer admitir y afrontar la realidad.

El futbol mexicano ha vivido en las últimas horas momentos históricos que supongo pueden y deben marcar un rumbo distinto en cuanto a las maneras y las costumbres (llamémosle tradicionales) con las que se ha administrado el futbol en México. Si no lo confrontamos de así, las cosas seguirán igual y el desarrollo de este futbol seguirá dependiendo del "capricho" y la voluntad de algunos grupos que se aferran al poder y al manejo en beneficio de sus propios intereses.

El futbol mexicano requiere de cambios urgentes en las formas en la cuales se dirige y se administra hoy en día.

Y no sólo se trata de analizar y extender el castigo de los futbolistas del América y del Toluca (Pablo Aguilar y Enrique Triverio). De lo que en realidad se trata aquí es de acabar con la impunidad, el control absoluto, el tráfico de influencias y la corrupción (porque al final del día se trata de una forma de corrupción) que agobia a las diferentes estructuras del futbol en México.

Hace ya tiempo que las comisiones de arbitrajes y de disciplina (órganos fundamentales que se encargan de impartir la justicia en la cancha y fuera de ella) han dado visos de que requieren de una revisión urgente. Lo mismo pasa en otros rubros del futbol mexicano: la Liga, la oportunidad de los jugadores mexicanos en la cancha, las selecciones mexicanas y el famoso avance que vemos y que no vemos, la licitación de derechos televisivos de la selección y de la Liga en general y muchos otros temas que deben transformarse con la transformación misma que México afronta como país.

El mensaje más trascendente de este escándalo arbitral radica en que se hizo trampa. ¿Trampa? Sí, porque después de observar en la cancha las agresiones o los intentos de agresión de los futbolistas, no había duda de que merecían un castigo de acuerdo con lo que dicta el reglamento, pero el futbol mexicano entro a su práctica más común: pisotear las leyes, instalarse en un mundo impune, donde las presiones y los intereses son capaces de ocultar la verdad. Los árbitros fueron capaces de detener la Liga y enviar un mensaje un poderoso de que es necesaria una reestructuración y una "limpieza" en muchos de los sectores del futbol mexicano.

El futbol, tarde que temprano, volverá a las canchas y algunas cosas a su normalidad y que bueno, porque finalmente, es un pasatiempo que le gusta y que le apasiona al mexicano. Pero lo más importante no es que vuelva el futbol. Lo más importante es qué cambios se originarán a partir de este movimiento.

@Faitelson_ESPN