Gerrit Cole no ha sido un abridor de alto nivel en los últimos dos años, él perdió tiempo con lesiones en el codo y tríceps en 2016, lanzó una temporada completa en 2017 pero con peores resultados que en su temporada de 2015, cuando valía 4.5 WAR por su ERA y 5.5 por sus periféricos. Los Astros no tenían exactamente un hueco en su rotación, pero incluso si Cole repite su actuación de 2017, será una mejora leve, y el paquete que recibe Pittsburgh es más de cantidad que de impacto.
Cole permitió demasiado contacto duro para un lanzador con su calibre de repertorio, y se convirtió en particularmente propenso a permitir jonrones la campaña pasada; concedió tantos jonrones solo en rectas (18) en 2017 como lo hizo en sus dos temporadas anteriores con todos los tipos de lanzamiento. Cole tiene la tendencia de intentar escapar de los problemas con la recta, lo que hace que sus pitcheos sean planos y más bateables. Su recta de cuatro costuras siempre ha sido fuerte, pero puede mostrar un slider plus y cambios, cuando no los tira en exceso, aunque sigue siendo vulnerable al contacto de calidad cuando trabaja en la zona de strike, especialmente en el tercio medio de la zona si dlo divides verticalmente Él puede salirse con la recta de cuatro costuras en o encima de la zona o enterrando una slider en la parte inferior; pero en 2017 perdió esos lugares con demasiada frecuencia.
Los Astros obtienen a Cole para los próximos dos años por $ 6.75 millones en 2018 y probablemente $ 10-12 millones en 2019, aún muy por debajo de lo que su producción valdrá para ellos, incluso si solo reproduce su desempeño de 2017. La incorporación de Cole les da siete potenciales abridores de Grandes Ligas, incluso sin considerar a Francis Martes y David Paulino, prospectos de ligas menores que probablemente estarán en el bullpen de los Astros para comenzar el año. El excedente podría permitirle al equipo cambiar a Brad Peacock de nuevo a un papel de preparador, o mover al lesionado Lance McCullers Jr. al bullpen, donde se destacó en la postemporada para ellos. Collin McHugh todavía está ahí, pero el año pasado se limitó a 12 aperturas debido principalmente a una lesión en el codo, y puede haber estado en conversaciones de posible salida incluso antes del cambio por Cole.
Entonces, los Astros realmente no necesitaban a Cole, y tal vez este año sea solo una victoria pequeña el tenerlo si solo alcanza su producción de 2017; los Astros pueden estar apostando a que Cole regrese a la forma de 2015, y también pueden haber querido asegurarse de que no fuera a un rival directo como los Yankees.
A cambio de su as nominal, los Piratas recibieron cuatro jugadores, pero no mejores prospectos o futuras estrellas; ninguno de los dos prospectos que adquirieron estarán en mi top 100 a finales de este mes. Joe Musgrove fue mucho más efectivo en el 2017 como relevista (efectividad de 1.44, con oponentes bateando .196/.244/.321) que como abridor (6.12 de efectividad, .306/.356/.526). No tiene el tercer lanzamiento para ser abridor y su bola rápida es mucho más efectiva cuando puede ampliarla en un papel de relevo. Los Piratas pueden usarlo de abridor, pero hay pocas razones para pensar que él será lo suficientemente bueno para hacerlo.
Michael Feliz ha hecho 98 apariciones en Houston en los últimos dos años, todo saliendo del bullpen, ponchando a casi un tercio de los bateadores que enfrenta pero siendo asesinado cuando trabaja de lado. Él es principalmente lanzador de bola rápida y slider, muy ocasionalmente tirando un cambio, aunque los zurdos no han representado un problema significativo para él en las Grandes Ligas, al menos, no más que el problema que representan los bateadores diestros. Puede haber algunos aspectos positivos aquí si los Piratas pueden hacerlo más efectivo con hombres en base, pero ahora es el undécimo hombre de un staff.
Los Piratas también adquirieron dos prospectos, pero no obtuvieron ninguno de los cuatro mejores de los Astros. Colin Moran ha parecido un poco decepcionante ya que los Marlins lo convirtieron en la sexta selección del draft en 2013, pero parece estar listo para hacerse cargo como tercera base diaria de los Piratas en 2018. Moran tiene un buen swing y ha entrado en más poder a medida que se ha hecho mayor, a pesar que tiene cierta tendencia a batear demasiados roletazos mientras busca levantar su swing -golpeando la bola en la parte superior- para alcanzar todo su poder. Realmente ha trabajado para mejorar su defensa y al menos es aceptable en tercera base, con un brazo positivo y buenas manos, pero pies un poco lentos. Su línea Triple-A en 2017 también estaba un poco inflada por su estadio local, y creo que se proyecta como un regular sólido promedio en tercera, pero no más.
El jardinero Jason Martin llegó a Doble A este año a los 21, pero está limitado al jardín izquierdo, no se embasa con gran frecuencia y parece que ya ha alcanzado el máximo de su poder. En este momento, los perfiles son menos que los de un regular.
Así que por el momento, al menos, parece que los Piratas obtuvieron dos relevistas para el bullpen, un antesalista de todos los días y un prospecto del jardín izquierdo que comenzará en Doble-A, pero tiene que golpear más al perfil como regular. Si Cole hubiera estado saludable y efectivo los últimos dos años, probablemente estamos hablando de un tipo que hubiera generado un paquete a lo Andrew Miller / Chris Sale, pero las temporadas 2016 y 2017 parecen haber mellado significativamente el valor comercial de Cole.